Uno de los pilares más importantes de una empresa es su equipo humano. De esto no cabe duda. Pero no todas pueden dedicar el tiempo y el esfuerzo necesarios para gestionarlo debidamente. Son numerosos los Departamentos de Recursos Humanos que se encuentran ante esta encrucijada, y el desasosiego que les produce aumenta cuanto mayor es el papel que esta área desempeña en compañías que le conceden la posición estratégica que merece o que aspiran a hacerlo. Nóminas, prestaciones, bonificaciones… y otras tantas tareas necesarias —obligatorias, de hecho— pero que poco valor aportan consumen un apreciado tiempo del Departamento de Recursos Humanos que deja de dedicarse a aspectos fundamentales como, por ejemplo, la gestión del talento. La encrucijada sigue ahí. Por Tomàs Font. Director de Negocio de Wolters Kluwer