Nombre: Yolanda de Prado
Cargo: Directora General de Getronics
Fecha de nacimiento: 10/05/1976 Hijos: dos
Hobbies: correr y viajar
Estudios: licenciada en matemáticas
Entrevista con Yolanda de Prado, directora general de Getronics
¿Cómo llegó al mundo TIC?
Yo siempre quise estudiar medicina, pero en el último instante me decidí por hacer matemáticas. Mi primera experiencia laboral ya fue en el mundo de la tecnología en 1999. Desde entonces, mi carrera ha evolucionado y he ido creciendo profesionalmente siempre vinculada al sector, he participado en varias adquisiciones de empresas TIC, he dirigido sus integraciones y transformaciones y estoy viviendo en primera línea uno de los momentos más importantes de la Humanidad en cuanto a conexiones y conectividad se refiere.
Sinceramente, creo que hice una buena elección.
¿Qué es lo que más valora de su trabajo?
Estar en un sector esencial para la transformación digital de empresas y Administraciones Públicas es además de una gran responsabilidad, una gran motivación. Las TIC jugamos un importante papel para afrontar un nuevo entorno generado por las consecuencias de la pandemia y los efectos que traen consigo en la economía y en la sociedad acontecimientos como la guerra de Ucrania.
La tecnología va mucho más allá de la transformación digital, sirve para crear una sociedad mejor, más sostenible, innovadora y diversa. Aterrizar este mensaje a cada miembro de nuestro equipo en Getronics para que entiendan la importancia de la contribución de cada uno de ellos en este objetivo final, es lo que más valoro de mi día a día.
En su opinión ¿qué es lo que falla para que las mujeres no apuesten más por el estudio de carreras STEM?
Desde mi punto de vista, esto se debe, en gran medida, a un tema cultural y generacional, por lo que creo que es importante abordarlo con una educación más paritaria, creando vocación desde la etapa infantil y dando visibilidad a las mujeres innovadoras del mundo tecnológico. En España, solo el 16% de los profesionales del área STEM son mujeres. Además, es muy significativo el bajo porcentaje de mujeres interesadas en formarse en este ámbito, por lo que todavía existe una gran brecha de género relacionada con este tipo de formación.
A nivel cultural podríamos decir que todavía existen estereotipos de género en nuestra sociedad. Históricamente, el género femenino ha estado más asociado a las habilidades sociales que a las técnicas. Esto está empezando a cambiar, ya que poco a poco vamos teniendo más mujeres en esta área y empieza a haber más referentes y, por tanto, más interés. Además, según diferentes estudios, se ha demostrado que el porcentaje de éxito de las mujeres que apuestan por carreras STEM es superior al de los hombres, con una tasa de abandono entre 2 y 6 puntos inferior.
¿Cree que existe el “techo de cristal” en las empresas TIC? ¿Cuál debería ser la solución?
Aunque se han hecho progresos en los últimos años, sigue existiendo una importante brecha de género en el sector tecnológico. Establecer objetivos de diversidad y hacer un seguimiento de los progresos, sensibilizar y educar sobre prejuicios, crear programas de desarrollo de liderazgo que se centren en cultivar las habilidades y competencias necesarias para gestionar equipos diversos e inclusivos, tener procesos transparentes de evaluación y promoción, fomentar políticas de trabajo flexible y visibilizar y reconocer públicamente historias de éxito son algunas de las iniciativas que estamos poniendo en marcha en Getronics y que nos han ayudado a conseguir que el 60% del equipo directivo de nuestra organización este formado por mujeres.
¿Una política de cuotas puede resolver el problema?
Debemos apostar por el talento en mayúsculas, independientemente del género y promover ecosistemas de trabajo inclusivos, equitativos y diversos.
Y para poder llegar a este objetivo creo todavía necesario acudir a medidas como las cuotas para asegurar la representación equitativa dentro de las organizaciones. Estas cuotas, al fin y al cabo, vienen a garantizar que exista diversidad y equidad entre los puestos de poder y de toma de decisiones.
Todo empieza por un fuerte compromiso de las organizaciones con la diversidad y la inclusión y con una evolución y mejora continua de nuestras políticas y prácticas.
¿Qué dificultades se encontró usted para llegar a la posición que tiene actualmente?
Pues podría contarte algunas anécdotas de mi trayectoria, pero creo que la mayor dificultad que he encontrado en mi carrera tiene que ver con el llamado “síndrome de la impostora”. Desconfiar de mis capacidades por mucho que la evidencia demuestre lo contrario.
Creo que este sentimiento está generalizado en muchas de las mujeres que llegamos a tener posiciones de responsabilidad y hace que no queramos destacar porque históricamente a las que hemos intentado asomar la cabeza se nos ha señalado como “marimandonas”.
Tenemos que visibilizar mucho más nuestros éxitos sin tapujos para proteger a la siguiente generación de mujeres y muy especialmente en el sector tecnológico.
¿Qué es lo que más valora de su empresa con respecto a la integración de la mujer?
Me enorgullece estar al frente de un equipo de personas que se deja la piel en todo lo que hacen y donde cada día puedo contagiarme de su pasión y energía. En Getronics estamos muy enfocados en mejorar la experiencia de nuestras personas porque sabemos que es la clave para poder impactar en nuestros clientes y hacer una sociedad mejor, más diversa e igualitaria.
Aplicamos criterios de diversidad inclusiva tanto en los procesos de contratación como en las diferentes etapas de desarrollo profesional de las personas que constituyen la empresa. Hemos creado programas de liderazgo orientados al talento femenino y, además, apoyamos a los más jóvenes mediante iniciativas para su incorporación y mentoring.
Trabajamos para asegurarnos que todas nuestras personas reciben un trato igualitario y cuentan con los mismos derechos. Otra iniciativa que me gustaría destacar es nuestro programa Segundas Oportunidades, que ofrece formación y empleo a personas en riesgo de exclusión. Nuestra forma de gestionar personas, en definitiva, no es un ejercicio de estilo, sino parte irrenunciable de nuestra cultura corporativa.
Un 35% de alumnos no logra ni acabar el bachillerato ni la FP equivalente, ¿está en la educación el problema de la falta de perfiles especializados?
En efecto, la falta de perfiles especializados en uno de los retos a los que se enfrenta el sistema educativo en España. Para crear un país más digital, más innovador y que protege y desarrolla su talento debemos tomar ciertas medidas como colaborar más de la mano con Universidades y/o los centros de Formación Profesional para desarrollar y ampliar programas de formación que aborden específicamente las necesidades tecnológicas actuales y ofrecer oportunidades de practicas garantizando que estos programas se ajusten a las demandas del mercado laboral.
¿Le han servido los estudios que hizo para realizar su labor actual?
Yo creo que sí. Mi pragmatismo o mi orientación a resultados se lo debo en una parte a mi personalidad, pero otra parte a mi formación en matemáticas y a la búsqueda constante de la mejor solución a los problemas.
Pero es cierto que mi trayectoria profesional y la continua evolución y transformación en un sector en continuo cambio, me ha ayudado a estar más preparada para afrontar situaciones tan complejas como una pandemia, los efectos de la guerra, la crisis energética o el gran cambio en los modelos de trabajo.
Solucione el problema de la educación en España…
La educación es el pilar clave para que cualquier sociedad y país avance. Y como tal requiere un planteamiento amplio que aborde diversos aspectos del sistema actual. Es esencial, desde mi punto de vista implicar en la solución a todas las partes interesadas, incluidos educadores, estudiantes, familias, universidades, centros de formación profesional etc.
Se han introducido por ejemplo grandes avances en la Integración de la Formación Profesional que apuesta por la formación dual y ayuda a los estudiantes a tomar decisiones informadas sobre sus trayectorias educativas y profesionales.
En el primer cuatrimestre del 2023 ya están colaborando con Getronics más de 90 alumnos en prácticas provenientes de más de 50 centros de todo el territorio nacional y con una previsión de terminar el año con una media de 120 colaboradores.
Si tuviera que aconsejar a un joven qué estudiar de cara a obtener un futuro laboral estable, ¿por dónde le orientaría?
Pues le diría lo mismo que digo a mis hijos. Que lo primero es que apuesten siempre por algo que les guste y les apasione. Después les explicaría que hay áreas con más futuro y más demanda, como pueden ser la ciberseguridad, la inteligencia artificial o la robótica donde existe una gran brecha de talento y gran empleabilidad.
¿Hacia dónde cree que va el sector TIC? En su opinión, ¿cuáles van a ser las tendencias que realmente van a transformar la sociedad?
En mi opinión, el sector de las TIC seguirá siendo un pilar clave para la transformación de las empresas, de la economía y de la sociedad.
Algunas de las tendencias clave que ya sabemos tendrán un impacto sustancial son la Inteligencia Artificial, el Internet de las cosas (IoT), el Big Data, la Ciberseguridad, el blockchain o la Tecnología Verde.
Estas tendencias representan sólo una fracción de las posibilidades de transformación del sector de las TIC pero es importante señalar que la adopción y el impacto de estas tecnologías variarán según la madurez de los sectores y regiones, las consideraciones éticas y la aceptación social.
Los líderes de las TIC tenemos un gran papel que desempeñar para convertir a nuestro país en un país digital, innovador, sostenible, competitivo, que avanza en igualdad y que apuesta por nuestro talento.
Pero para llegar a este objetivo todavía queda camino por recorrer en el desarrollo de las competencias que el mercado laboral y la sociedad quieren y necesitan. También tenemos que reorientar la formación hacia un modelo de aprendizaje continuo que se extienda a toda la vida, garantizar la igualdad de oportunidades apostando por la diversidad y donde los valores y la cultura de la organización sean el motor del desarrollo.
IA, automatización, robótica, ¿de verdad cree que el futuro pasa por las personas?
La tecnología en sí misma no sirve para nada. Su valor reside en la utilización que hagamos de ella. No queremos que las “maquinas” o la tecnología nos dominen, lo que queremos es que nos ayuden a vivir mejor, más tiempo, con mayor calidad de vida o en un mundo más sostenible.
Por supuesto la tecnología (IA, automatización o la robótica) nos ayudaran a automatizar procesos, ser más eficientes, ser más productivos y tomar decisiones con menor margen de error, pero la tecnología está ahí, a nuestra disposición y lo que este por llegar depende solo de las personas.
