Tras más de una década de intensas inversiones en sistemas ERP, las empresas necesitan aprovechar al máximo estas infraestructuras operativas para medir, monitorizar y analizar eficazmente su información de negocio. La acumulación de datos procedentes de sistemas y fuentes diversas e inconexas no conduce por sí misma a una toma de decisiones fiable, precisa y actualizada. El número de usuarios que necesitan acceder a la información de negocio crece de forma imparable, abarcando no sólo a los empleados y responsables del negocio, sino también a los clientes, proveedores y socios. Integrar la información de fuentes externas o legadas que están fuera del alcance del ERP se convierte, por tanto, en una prioridad para garantizar la exactitud de los datos. TEXTO: Alfonso Royo, director de Business Intelligence y Performance Management, IBM Cognos SPGI