En un entorno macroeconómico complicado como el actual, las empresas se ven sometidas a una creciente presión para lograr hacer más con menos. En esta realidad, el 89% de las compañías españolas (91% a nivel global) considera que optimizar los costes TI es una prioridad para su negocio.
Sin embargo, solo el 5% de las empresas, tanto en el mundo como en España, cree que su presupuesto en tecnología está totalmente optimizado, y solo un 30% de las organizaciones españolas (35% a nivel global) está analizando proactivamente su gasto en TI o buscando fórmulas para poder controlarlo. Esta es la principal conclusión que se desprende de un informe que acaba de publicar la firma Crayon y que ha llevado a cabo la empresa de estudios de mercado SAPIO Research.
A pesar de ello, los responsables de TI consultados que trabajan en compañías sin una mentalidad enfocada a la optimización de costes, están convencidos de que esta práctica puede llegar a suponer un importante beneficio para su negocio, sobre todo en lo que a productividad (63% en España y 49% a nivel global), eficacia (38% en España y 58% a nivel global) y rentabilidad (38% en España y 42% a nivel global) se refiere.
La nube, principal objetivo de la optimización
Según este estudio, los costes en tecnología se han disparado desde la pandemia. Un 39% de los encuestados españoles (56% a nivel global) dicen que su empresa gasta más de un millón de dólares anuales solo en la nube pública. En EE. UU., hasta el 75% de las empresas dedican, al menos, esta cantidad, y en Noruega, el 12% de las organizaciones que participaron en este estudio gastan más de 25 millones de dólares cada año.
Estas cifras explican que un 50% de los encuestados españoles (55% a nivel global) sitúen la optimización cloud como punto prioritario en sus tácticas y estrategias de reducción de costes. En segundo lugar aparece la negociación con proveedores de servicios (46% en España y 45% en todo el mundo) y, a continuación, la negociación con proveedores de software (44% en España y 41% en el resto de países).
“El panorama económico está resultando increíblemente difícil para casi todas las empresas del mundo”, dice José Manuel Marina, director general de Crayon en España. “Nuestra investigación destaca que los líderes empresariales luchan por encontrar una fórmula que les permita seguir siendo competitivos mientras reducen costes. También sabemos que cuando se trata de los costes de TI, muchas empresas no están aplicando el mismo nivel de escrutinio que a otras partidas importantes”.
Además del reto de optimizar los costes, las organizaciones se ven obligadas a afrontar otros desafíos, como el desconocimiento interno sobre tecnologías innovadoras
En el afán de mantener los costes bajo control, la encuesta de Crayon señala que aunque una de cada cinco empresas a nivel global (16% en España) deja las decisiones de costes de TI en manos de los directores financieros y de sus equipos, tres de cada cinco empresas (54% en España) ya están implementando departamentos FinOps, una disciplina financiera que incluye a los departamentos de negocio en las decisiones de gasto basadas en datos. Esta práctica está siendo ampliamente adoptada en países como Singapur (84%), Arabia Saudita (76%), Dinamarca (75%), EE. UU. (74%) y Noruega (73%), algo que refleja la importancia que se le concede a la optimización de costes y que sugiere que las organizaciones están intentando ser más rigurosas a la hora de extraer valor de sus inversiones en tecnología.
Falta de conocimiento, visibilidad y tiempo
Para el 30% de los profesionales españoles, el mayor obstáculo a la hora de optimizar los costes de TI en sus empresas es la falta de conocimiento sobre la mejor manera de hacerlo (28% a nivel global). Le siguen la falta de visibilidad de los gastos de la organización (28% en el mundo y 24% en España) y la falta de tiempo de los responsables de la toma de decisiones (31% a nivel global y 19% en España).
A la hora de gestionar sus activos de TI, además del reto de optimizar los costes, las organizaciones se ven obligadas a afrontar otros desafíos, tales como el desconocimiento interno sobre tecnologías innovadoras, como IA o Cloud (34% en España y 36% a nivel global); la migración e implementación de la nube (29% en España y 33% a nivel global) o la gestión simultánea de entornos cloud y on-premises (32% en España y 33% a nivel global).
“El cambio de estrategia en lo que respecta a la reducción de costes de TI está abriendo nuevos retos”, continúa Marina. “Esto se debe a la naturaleza altamente técnica de este gasto, que dificulta su gestión. Para capear la tormenta tanto ahora como en el futuro, las organizaciones deben colaborar con un partner que les ayude a definir las líneas correctas entre diferentes tecnologías y plataformas, necesidades de negocio, cláusulas contractuales y suscripciones que no se utilizan, estructuras organizacionales, brechas de habilidades y mucho más”.