Finales de Abril. Esa es la fecha en la que Dynabook cerrará su filial española. Tal y como ha adelantado Juan Cabrera en la publicación Channel Partner, la compañía seguirá dando soporte a clientes y partners a partir de abril y cumpliendo con sus obligaciones en cuanto a garantías. Pero, lo cierto es que los antiguos portátiles de Toshiba, considerados en el mundo empresarial como los mejores, dejarán de venderse en nuestro país a través de su canal tradicional.
Byte TI se ha puesto en contacto con la compañía en nuestro país, pero ha remitido un comunicado oficial en el que da los motivos de su cierre en España. Según reza el mismo, el culpable del cierre es el deterioro que se está produciendo en la venta de PCs a nivel global. La firma asegura que «las condiciones del mercado y el entorno económico en la región EMEA continúan siendo especialmente difíciles y muchos analistas prevén que esta situación se prolongará durante el resto del 2023. En consecuencia, Dynabook Europa está llevando a cabo una importante revisión estructural del negocio. Las operaciones de ventas en España bajo el modelo de negocio actual serán descontinuadas y, como resultado, las oficinas de Dynabook en España cerrarán a finales de abril de 2023″.
Caída de ventas
El mercado de PC vivió una segunda juventud cuando irrumpió la crisis provocada por el coronavirus. Tras años de caídas sostenidas, los sucesivos confinamientos y el auge del trabajo a distancia provocó que todos los fabricantes de ordenadores vieran cómo la demanda experimentaba un crecimiento exponencial. Sobre todo en el entorno del B2B, precisamente el nicho del mercado en el que Dynabook era más fuerte.
Pero tras ese incremento y la vuelta a la normalidad, las empresas ya no tienen la misma necesidad de adquirir nuevos equipos toda vez que han renovado casi todo su parqué hace muy pocos meses. Según datos de IDC el cuarto trimestre de 2022 supuso que las ventas de PCs cayeran un 28,1% con respecto al mismo periodo de 2021. En total se despacharon en todo el mundo poco más de 67 millones de equipos para dejar la cifra global del año en los 292,3 millones de máquinas vendidas. Eso supone un acumulado en los 12 meses de un -16,5%. Y las previsiones no son buenas: tanto marcas como las principales firmas de análisis aseguran que, en el mejor de los casos, la demanda no va a crecer hasta el último trimestre de este 2023. La gran mayoría cree que las ventas no volverán a cauces normales hasta 2024. Todo ello supone un lastre para Dynabook que no ha variado su estrategia de ventas y que ha seguido operando de la misma forma que lo hacía la antigua Toshiba. En este caso, a pesar de la gran calidad de su producto, la situación desfavorable y de incertidumbre y la casuística particular del mercado del PC no le permite competir con rivales como HP o Lenovo que lideran el mercado desde hace años.
Cambiar de estrategia
Tal y como ha asegurado en el comunicado enviado a Byte TI la compañía parece querer acabar con la estrategia de venta y por ello afirma que «está desarrollando una nueva estrategia para la región española. El objetivo consiste en crear un nuevo modelo que sea lo suficientemente ágil como para adaptarse a las difíciles condiciones empresariales actuales y futuras de la zona, utilizando un centro de operaciones que se establecerá en Asia».
A pesar de la calidad del producto, Dynabook no podía competir con los líderes del mercado en un entorno de caída de ventas del PCs
Es decir, al menos durante un tiempo, los portátiles de Dynabook dejarán de venderse en el mercado español por los canales habituales. La firma asegura que «el servicio y la asistencia seguirán estando disponibles para todos los clientes actuales a través de los canales existentes. Por supuesto, Dynabook cumplirá todas las obligaciones de garantía existentes, tanto las estándar como las promocionales, así como las ampliaciones y mejoras de garantías adquiridas».
