Zisapel apunta que “aunque vemos que la crisis es evidente, también estamos identificando muchas oportunidades, que pueden venir de los más diversos sitios. Primeramente, se encuentra el datacenter, en donde nosotros estamos centrando nuestros esfuerzos hacia cómo los clientes despliegan sus aplicaciones de misión crítica”. Y en ese punto, tres son los parámetros en los que la multinacional basa sus propuestas: “la disponibilidad, el rendimiento y la seguridad”.
Zisapel está convencido de que es en los CPDs en donde se encuentra el negocio, razón por la que la compañía entró hace unos meses en el terreno de la virtualización con Virtual Director. Precisamente en este punto matiza que “la virtualización llega para ahorrar dinero, pero para eso es preciso invertir antes”, y hay que hacerlo de manera inteligente, “no se puede virtualizar en bloque sin más, porque luego llegarán todos los problemas”.
A estos pilares se suma el hecho, desde su punto de vista, de que “nuestra competencia está invirtiendo bastante menos que nosotros, al tiempo que nosotros estamos mucho más enfocados que Cisco o F5; no creo que ellos hayan hecho nada especial para combatir la crisis”. El CEO está convencido de que el mercado pone a cada uno en su sitio y “del mismo modo que sucede con los médicos, que cuando uno tiene un problema realmente grave acude al especialista, las empresas actúan igual en tecnología”. Este es el motivo por el que más del 90% de la base instalada de Radware, según Zisapel, lo es también de Cisco.
En este contexto, Radware ha conseguido introducirse en los principales operadores y entidades financieras de nuestro país, apuntando ahora hacia la Administración Pública, en donde ya cuenta con varias referencias –entidades públicas, gobiernos regionales, ministerios, etc.– y en donde el CEO encuentra “que hay una mayor sensibilización por invertir inteligentemente en tecnología”.
Una de las claves de su éxito es su escalabilidad modular, que facilita a las empresas ir ampliando su infraestructura tecnológica de manera paralela a sus necesidades reales, sin ni siquiera realizar nuevas instalaciones: “en ocasiones, basta con introducir un nuevo código en la consola para que las nuevas funcionalidades se activen”, indica el CEO.
Radware también ha sabido subirse al tren de las nuevas tendencias, como es el caso del Cloud Computing, si bien el responsable lo hace con prudencia, asegurando que “hoy por hoy son poquísimas las empresas que realmente están adoptando este modelo”. Desde su punto de vista, “las grandes cuentas no se están inclinando aún por este modelo porque no está maduro, quedan muchas respuestas por responder; pero sí lo hacen en cambio las pymes porque es una buena manera de reducir sus costes y ahí nosotros les podemos ayudar”.
Pugna por una ‘ganga’
La compra de Alteon a Nortel, en términos de mercado, podría calificarse de ‘auténtica ganga’, puesto que la operación supuso aproximadamente un 0,2% de lo que nueve años antes había pagado Nortel. Así, no es de extrañar que el responsable de Radware indique que en las últimas rondas se dieron cita cerca de 35 compañías interesadas en Alteon.
“Esta operación ha sido más importante para nosotros por los clientes y el canal que por la tecnología nueva que realmente nos proporciona”, precisa Zisapel. Éste es el motivo por el que Radware se ha comprometido a dar continuidad a los productos durante al menos cinco años, con el fin de asegurar una transición lo más suave posible sin que se pierda ninguna cuenta por el camino.