En la asignatura “Aspectos Sociales y Medioambientales de la Informática” (ASMI para los amigos…), que imparto en la facultad de Informática de Barcelona de la UPC, tratamos diversos temas y, entre ellos, tengo siempre interés por hacer que mis estudiantes conozcan el panorama de las grandes empresas informáticas, a nivel mundial.
Curiosamente, los estudiantes de ingeniería informática, en su juventud y llevados por su experiencia personal, tienen siempre presentes empresas como Google, Facebook, Twitter o Apple. Y, casi inevitablemente, tienden a pensar que ésas son las mayores empresas informáticas del mundo.
Pero no es así y van de sorpresa en sorpresa cuando les cuento la situación con datos reales. Para ello basta con acudir a la lista de las 500 empresas mayores del mundo que proporciona Fortune Global 2014, que se actualiza cada año. (No confundir con la lista Fortune 500 que se refiere a las empresas estadounidenses y no a un ámbito mundial como hace la lista “Global”). Hay que decir que la lista, aunque proporciona otros datos, ordena las empresas por sus ingresos. Tal vez otra cosa sería hacerlo por sus beneficios o por el rendimiento de sus acciones, pero nadie puede negar que el tamaño real de una empresa venga dado, en primer lugar, por los ingresos que consigue.
Cabe reconocer que, en 2014, la primera empresa informática de la lista es Apple, que ocupa la posición número 15 tras un ascenso claro en los últimos años. En 2011, cuando murió Steve Jobs, Apple ni siquiera estaba entre las 100 primeras, pero su ascenso en la lista ha sido claro: el puesto 55 en el año 2012, el 19 en el año 2013 y, ahora, en la última lista disponible, el 15 en 2014. Curiosa constatación de que tal vez Steve Job era menos hábil “vendedor” que sus sucesores, y así lo refrenda ese número de reservas del nuevo Apple Watch que ha sobrepasado, dicen, el millón.
Luego viene HP, en clara descendencia eso sí, que ocupa en 2014 el puesto 50 tras ocupar el 28, 31 y 43 en 2011, 2012 y 2013 respectivamente. Una empresa tradicional y “vieja”, que procede de la fusión de HP con Compaq y DEC y que, pese a su descenso (y también el del porcentaje de sus beneficios), hace ya años que superó a IBM. En el caso concreto de IBM, es la 71 en 2014, tras un cierto descenso en los últimos años: 52, 57 y 62 fueron sus posiciones en 2011, 2012 y 2013.
Lo curioso es que mis estudiantes casi ni saben de la existencia de IBM o HP, algo que intento “corregir” en la asignatura que les he citado anteriormente.
Por si son ustedes curiosos, les diré que las más famosas de las empresas informáticas de hoy, ésas que mis estudiantes creían las mayores del mundo, no lo son tanto. En 2014 el ranking seguiría, ya por debajo del primer centenar, con Microsoft (con el puesto 104), Amazon (112), Google (162) o Oracle (302). Para gran sorpresa de mis estudiantes, Facebook no está ni siquiera en la lista de las 500 mayores empresas del mundo de esa lista Fortune Global 2014, aunque sí está en la lista Fortune 500 (que sólo considera el ranking para empresas de Estados Unidos) donde ocupa el lugar 341 en 2014.
Por si a alguien le interesa, en el ámbito de las comunicaciones destaca el “estable” lugar que ocupa AT&T con las posiciones 30, 31, 34 y 34 en los años 2011 a 2014. Y por curiosidad “nuestra” Telefónica aparece en la lista Fortune Global 500 en las posiciones, descendentes eso sí, 78, 82, 97 y 104 en los años considerados: de 2011 a 2014, superada, por ejemplo, por Deutsche Telecom que, en 2014 ocupa la posición 99.
En cualquier caso, los datos vienen a dar la imagen real y nos hacen ver cómo empresas “clásicas” como HP e IBM, aunque en retroceso, siguen manteniendo su capacidad de ingresos muy por encima de las nuevas empresas, ésas que tanto conocen mis estudiantes y que, en el fondo, aún están en el camino de establecerse en el mercado mundial al nivel de sus “viejas” antecesoras.