Nombre: Elena García-Mascaraque
Cargo: Directora de Proveedores de Servicios de Seguridad de Watchguard
Fecha de nacimiento: 16 Agosto 1974 Hijos: dos
Hobbies: leer, viajar, hacer deporte y disfrutar de un buen vino con amigos
Estudios: Licenciada en CC Económicas y Empresariales; Máster en Telecomunicaciones; Programa de Alta Dirección de Negocio Digital
Entrevista con Elena García-Mascaraque, Directora de Proveedores de Servicios de Seguridad en WatchGuard
¿Cómo llegó al mundo TIC?
Comencé mi carrera profesional durante mi último año de carrera mediante una beca en HP, dónde me conquistó no solo el contacto directo con la tecnología, sino también su cultura de innovación permanente y espíritu de trabajo en equipo. Descubrí el estrecho vínculo entre la innovación y la tecnología, y como esté vínculo trabaja para construir unas mejores organizaciones.
¿Qué es lo que más valora de su trabajo?
Durante mi carrera profesional he podido desarrollar diferentes capacidades tanto técnicas como de gestión, en diferentes tipos de mercados y geografías dentro del ámbito TIC.
En esta última etapa, estar en el mundo de la ciberseguridad es un reto constante, con la oportunidad de trabajar en una multinacional líder como WatchGuard abanderando que la ciberseguridad avanzada sea accesible para todas las organizaciones, y construyendo simplicidad sobre un entorno enormemente complejo.
En su opinión ¿qué es lo que falla para que las mujeres no apuesten más por el estudio de carreras STEM?
Según el informe en materia de STEM, de la UNESCO, solo el 35% de los estudiantes matriculados en las carreras vinculadas a las STEM en la educación superior son mujeres y únicamente el 3% de las estudiantes de educación superior realizan estudios TIC.
Esto es preocupante. Pero es que todavía hace falta cambiar muchos estereotipos y construcciones socioculturales sobre los roles de hombres y mujeres. Y esto es una tarea de todos. Todos debemos implicarnos y mostrar a los más pequeños, en los colegios y en casa, que también existen grandes mujeres que fueron y son grandes científicas, escritoras, matemáticas, ingenieras, astronautas, etc.
Estoy segura de que si las niñas de hoy conocieran mejor y supieran de la existencia de todas esas mujeres que han sido referentes en todos los ámbitos STEM, y se les diera el reconocimiento que es debido por la sociedad, su aportación en la evolución de la actual sociedad en la que vivimos, seguramente habría más mujeres matriculadas estudiando carreras STEM.
Necesitamos que las niñas tengan referencias, sería muy útil que “existieran mujeres influencers también en el ámbito de la ciencia y la tecnología” que hicieran ese papel inspirador. Es vital concienciar a las chicas de hoy, que si no entran en el mundo tecnológico se pueden quedar fuera de muchas cosas. Y esta tarea debería empezar incluso antes del bachillerato, cuando son niñas. Solo de esa manera se podrá conseguir, que esas niñas quieran jugar también a ser ingenieras o científicas.
Según parece, las alumnas parecen perder interés en las áreas STEM en la adolescencia y la brecha se agrava al elegir los estudios superiores. Esto significa que no es cuestión de romper el techo de cristal, sino de fortalecer los pilares, eliminar estigmas y educar desde edades tempranas.
¿Cree que existe el “techo de cristal” en las empresas TIC? ¿Cuál debería ser la solución?
El techo de cristal existe en todos los ámbitos y sectores de la economía. Las TIC no son una excepción. Y aunque han pasado más de 40 años desde que se empleó por primera vez la metáfora de los “techos de cristal”, lo cierto es, que aún queda mucho por hacer, para lograr la igualdad en el ámbito laboral.
Solo se puede romper el techo de cristal implicando a toda la sociedad. Esto no es una labor que solo dependa de las mujeres, también recae en los políticos, las AA.PP. aprobando leyes que contribuyan al fomento del talento sin género, haciendo que las organizaciones creen entornos de trabajo donde mujeres y hombres sean tratados en función de sus logros, méritos y capacidad, y trayectoria profesional, sin que pesen prejuicios o sesgos de género.
Pero, sobre todo, es responsabilidad de gobiernos y empresas el establecer normas, pautas y políticas de igualdad que reduzcan la brecha salarial, ayuden a la conciliación laboral y familiar y faciliten el desarrollo profesional de las mujeres.
El techo de cristal de las mujeres en el ámbito laboral también viene dado por roles, estereotipos o conceptos culturales arraigados en el tiempo, sobre todo en determinados sectores. La labor de las autoridades educativas es fundamental para que las nuevas generaciones comprendan e interioricen la necesidad de desarrollar una sociedad justa e igualitaria. En este sentido, los más jóvenes están mucho más concienciados que las generaciones pasadas, pero todavía queda mucho por hacer en este sentido.
¿Una política de cuotas puede resolver el problema?
Creo que es un medio para que en los procesos de selección se tomen en consideración la diversidad de género, pero quizás antes de imponer una política de cuotas, conviene preguntarse ¿qué frena realmente la carrera y el ascenso laboral de las mujeres?
Todavía existen muchos factores socioculturales muy presentes en nuestra sociedad y que calan en el ámbito laboral. La cultura empresarial sigue estando predominantemente masculinizada. Es una cultura que necesita rehacerse desde la base, es decir, desde la educación, no solo hablamos de igualdad género, sino de la eliminación de roles de género, de asociar unas determinadas profesiones con ser para hombres o de mujeres y acabar con las expectativas que la sociedad tiene respecto a lo que se espera de hombres y mujeres; todavía muchas mujeres se ven en la disyuntiva de elegir entre su carrera profesional y ser madres. Según el INE, el 6% de mujeres ocupa el cargo de presidente en las empresas del Ibex 35, y de ese 6% son solo 3 mujeres.
¿Qué dificultades se encontró usted para llegar a la posición que tiene actualmente?
He desarrollado mi carrera profesional durante más de 20 años en el sector TIC, dónde el mayor desafío ha sido la adaptación a un entorno absolutamente cambiante, dónde la tecnología ha pasado de ser un componente de coste a ser un activo básico dentro de los modelos de negocio
Actualmente, en el mundo de la ciberseguridad nos encontramos con el reto de que las soluciones cada vez más sofisticadas puedan ser proporcionadas como un servicio sencillo y eficiente para cualquier tipo de organización.
¿Qué es lo que más valora de su empresa con respecto a la integración de la mujer?
Las empresas pueden y tienen la capacidad de impulsar la igualdad de género y la rotura de ese techo de cristal desarrollando e implementando diferentes medidas que promuevan la igualdad de trato y oportunidades entre hombres y mujeres en el ámbito laboral.
En WatchGuard se impulsa la igualdad, promoviendo una cultura libre de prejuicios, estereotipos y discriminación. Queremos fomentar un mundo diverso, equitativo e inclusivo, donde la diversidad es un elemento clave para nuestra organización.
Contamos con una comunidad WOW (Women of WatchGuard) muy activa y global que nos facilita un entorno para la sororidad, aprendizaje y autoconocimiento para el desarrollo personal y profesional de las profesionales de la empresa.
Un 35% de alumnos no logra ni acabar el bachillerato ni la FP equivalente, ¿está en la educación el problema de la falta de perfiles especializados?
Creo que son dos cuestiones diferentes, pero que se podrían vincular. Una es abandono de estudios, y otra la falta de perfiles especializados. Posiblemente los jóvenes abandonan sus estudios porque no ven clara una salida laboral, y optan por empleos precarios, para obtener sus primeros ingresos, en lugar de apostar por completar su formación y acabar sus estudios, y así luego, que esto les permita optar a mejores oportunidades de trabajo.
Si esto es así, entonces por qué no apostamos por crear estudios/ciclos formativos FP/Universidad con perfiles especializados que sabemos que tienen una alta demanda en el mercado laboral. Y de esta manera, les incentivamos a seguir estudiando y formándose en algo que tendrá una salida laboral, casi garantizada.
¿Le han servido los estudios que hizo para realizar su labor actual?
La educación universitaria es la base, pero aún más importante es la formación continua a lo largo de la carrera profesional, nunca he pausado mi formación. Vivimos en un entorno enormemente dinámico y la formación continuada es clave, en algunos momentos de mi carrera me ha resultado más desafiante desaprender para volver a aprender.
Solucione el problema de la educación en España…
Partamos de dos palabras consenso y futuro. Reformar el sistema educativo cada dos o cuatro años, atendiendo a ciclos electorales, no está ayudando a que nuestros jóvenes tengan mejores oportunidades laborales. Necesitamos un sistema educativo sólido, y que mire al futuro, sin olvidar la demanda del mercado laboral, especialmente en el ámbito de las TIC.
Si tuviera que aconsejar a un joven qué estudiar de cara a obtener un futuro laboral estable, ¿por dónde le orientaría?
Lo primero es una formación que le implique un propósito personal, que le mueva su corazón y su mente. Pero al mismo tiempo que tenga en consideración que la tecnología va a ser su herramienta más poderosa en cualquier ámbito laboral, tenemos que trabajar arduamente en el bilingüismo tecnológico como herramienta vehicular en cualquier plan formativo.
¿Hacia dónde cree que va el sector TIC? En su opinión, ¿cuáles van a ser las tendencias que realmente van a transformar la sociedad?
La tecnología debe ser un aliado fundamental para el cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), acelerando y haciendo más eficiente su implantación. La asociación 2030 Vision, publicó un informe sobre las principales oportunidades y desafíos para que la tecnología digital promueva los ODS. Sus autores estiman que el impacto positivo de estas tecnologías puede generar unos ingresos anuales de 2,1 billones de euros.
Entre las formas en las que la tecnología puede promover los ODS están, las tecnologías de acceso a la información, análisis y recolección de datos, nuevos modelos de negocios sostenibles y descentralizados, incremento de la financiación mediante plataformas digitales, nuevos modelos de realidad, y la robótica aplicada
IA, automatización, robótica, ¿de verdad cree que el futuro pasa por las personas?
El futuro pasa por las personas, siempre. La IA, la automatización y la robótica, son los medios, las herramientas para lograr hacer más fácil la vida a las personas. Las personas no tendrán que competir contra las máquinas. La IA se ocupará de las tareas en las que los humanos no somos muy buenos, y lo harán mejor. Serán una herramienta, no la competencia. Las máquinas no son capaces de trasladar lo aprendido a otros escenarios que las cojan desprevenidas tan bien como los humanos que pueden adaptarse, hacer uso de la lógica, la creatividad, el ingenio y la razón ante toda situación, por muy nueva y extraña que les resulte. Y es por esto por lo que creo que el talón de Aquiles de las máquinas somos los humanos, y el futuro es nuestro.
