Seis de cada diez trabajadores en España muestran una actitud favorable hacia el retorno a la oficina, siempre y cuando los entornos laborales promuevan la colaboración fluida, la interacción social y la generación de ideas creativas. A nivel mundial, el 72% de los trabajadores ven de manera positiva la idea de trabajar en persona.
Esto se desprende del estudio más reciente sobre trabajo híbrido realizado por Cisco, que también revela que los espacios de trabajo están mayormente orientados hacia el trabajo individual en lugar de favorecer la colaboración y la creatividad. Específicamente, solo el 29% de los trabajadores españoles consideran que sus espacios laborales están adecuadamente equipados para la nueva era del trabajo híbrido, en comparación con el 46% a nivel global.
“Como líderes empresariales, es nuestra responsabilidad conocer la mejor manera de apoyar y capacitar a nuestros empleados”, afirma Jeetu Patel, Vicepresidente Ejecutivo y Director General de Seguridad y Colaboración en Cisco. “En la era del trabajo híbrido, esto significa incorporar tecnología de colaboración impulsada por IA en nuestros espacios de oficina para crear un lugar de trabajo que impulse la productividad y fomente el trabajo en equipo”.
Modelo híbrido
En la actualidad, el modelo de trabajo híbrido continúa predominando. Un 60% de las empresas españolas encuestadas indican que al menos el 10% de su fuerza laboral está bajo acuerdos de trabajo híbrido, en comparación con el 78% a nivel global. Además, la mayoría de los empleados asisten a la oficina de 3 a 4 días por semana, con un 27% en España y un 35% en el resto del mundo.
Aunque el 61% de los trabajadores ven con agrado el modelo presencial, demandan espacios mejor equipados para colaborar, según el último informe Hybrid Work de Cisco
A pesar de esto, se está observando un retorno gradual a la oficina. Cerca de la mitad de las empresas españolas, un 47%, están implementando un regreso total a la oficina, en contraste con el 31% a nivel mundial. Mientras tanto, un 41% lo exigen parcialmente y un 12% no requieren el regreso a la oficina, cifras que son del 48% y el 21% respectivamente a nivel global.
Los empleadores han identificado diversas consecuencias negativas entre los empleados que no reciben con agrado el regreso a la oficina, incluyendo la disminución del bienestar, la moral y la productividad, así como dificultades para atraer nuevos talentos. Estas cifras son del 43%, 35%, 37% y 24% respectivamente a nivel mundial.
Aunque solo el 10% de los encuestados en España afirman que algunos trabajadores han renunciado a sus puestos como resultado del regreso a la oficina (comparado con el 22% a nivel mundial), en dos años solo se espera que el 29% de los empleadores en España requieran que todos los trabajadores asistan a la oficina los cinco días laborables, en comparación con el 21% a nivel global.
Rediseñando la oficina
La oficina y la tecnología deben cambiar para facilitar la colaboración: el 44% de las empresas españolas todavía asignan más del 75% de su espacio de oficina a espacios de trabajo personales, fomentando hábitos de trabajo individuales (34% a escala global).
Salas de reuniones ineficaces siguen obstaculizando la productividad y los esfuerzos de colaboración. Según los empleadores, el principal escollo es el uso de tecnologías inadecuadas (35% en España y 51% mundial) y la falta de terminales de audio y vídeo (48% en España y 47% global) o de herramientas para monitorizar y reservar los espacios (32% en España y 46% mundial).
Es así como las empresas prevén invertir tanto en un mejor diseño de espacios como en tecnologías verdaderamente colaborativas para atraer a los mejores talentos y mejorar la productividad. Una de cada dos empresas españolas (el 55%) pretenden rediseñar los espacios de trabajo en los próximos 24 meses (71% de media global). Y la mayoría lo harán para facilitar reuniones híbridas mediante herramientas de audio y de vídeo (46% en España y 54% global)