Un estudio reciente de SAS muestra que el 84% de los españoles teme ser víctima de fraude digital. Además, cerca del 90% de los encuestados considera que tanto las empresas como las administraciones públicas no están haciendo lo suficiente para protegerlos. Este estudio, denominado ‘Faces of Fraud’, analiza las tendencias en fraude digital en más de 15 países.
En España, el 39% de los encuestados admitió haber sido víctima de fraude en dos o más ocasiones, y el 44% ha experimentado intentos de estafa en el último año. El robo de datos bancarios es el tipo de fraude más común, seguido por la sustracción de datos personales y estafas en las que los consumidores son engañados haciéndoles creer que han ganado un premio económico. Los delincuentes utilizan principalmente teléfonos móviles (72%), correo electrónico (67%) y WhatsApp (40%) como canales para llevar a cabo sus ataques y dirigirse a las víctimas.
«Los ciberdelincuentes utilizan, cada vez más, técnicas muy sofisticadas. Por ello no es de extrañar la preocupación que tiene la gran mayoría de los consumidores españoles de convertirse en víctimas de cualquier tipo de fraude” afirma Marcos Carrascosa, director de Customer Advisory en SAS Iberia.
El fraude digital
El estudio de SAS revela otro dato sorprendente: alrededor del 30% de los consumidores no comprende completamente las medidas de seguridad que sus instituciones financieras aplican para protegerlos del fraude y otros delitos financieros. De hecho, el 45% opina que se deben mejorar los controles de seguridad para agilizar el proceso y mejorar la experiencia del cliente. Por tanto, es esencial que las organizaciones brinden el mejor servicio en términos de protección, ya que el 76% de los españoles consideraría cambiar de entidad si eso les proporcionara una mayor sensación de seguridad.
El 84% de los españoles teme ser víctima de algún tipo de fraude digital
Además, dado que el 70% de los españoles planea seguir utilizando servicios digitales en lugar de acudir físicamente a las tiendas, es fundamental que las instituciones financieras implementen tecnologías innovadoras en sus procesos para garantizar la seguridad de los datos. El 83% de los encuestados apoya la incorporación de más verificaciones en sus transacciones y compras para lograr una protección más eficaz, y el 74% está dispuesto a utilizar tecnologías de biometría e inteligencia artificial, como el reconocimiento facial o de voz.
