Telefónica ha presentado la decimosexta edición del informe anual “La Sociedad de la Información en España”, correspondiente a 2015, en un acto que ha contado con la presencia del secretario de Estado de Telecomunicaciones y para la Sociedad de la Información, Víctor Calvo-Sotelo, el vicepresidente ejecutivo de Fundación Telefónica, Emilio Gilolmo, y el presidente de Telefónica España, Luis Miguel Gilpérez.
El informe, editado por Fundación Telefónica, se ha convertido en la referencia más importante de la actividad digital de la sociedad española, ya que, además de aportar datos propios obtenidos por Telefónica sobre la realidad actual del comportamiento de los usuarios, expone las tendencias digitales que impactarán en la sociedad en un futuro próximo.
El año 2015 ha confirmado la acelerada digitalización de la vida de los españoles. Un millón más de españoles que el año anterior se conectan regularmente a internet, y se alcanza la cifra de 27,15 millones en la franja de edades comprendidas entre los 16 y los 74 años.
Pero además, lo hacen de forma más intensiva y 22,2 millones de españoles, el 81,7% de los usuarios, se conectan todos los días a internet. Es un millón y medio más que un año antes. Es decir, el 64,35% de los españoles se conectan todos los días a la Red. A destacar en este crecimiento, la franja de edad entre 55 y 64 años que han aumentado 6 puntos porcentuales revertiendo la brecha generacional que existía.
Los usuarios quieren estar conectados continuamente y con todas las tecnologías a su alcance, lo que ha obligado a nuevos esfuerzos para ofrecer un servicio integral al usuario. España se sitúa a la cabeza de Europa en el despliegue de fibra óptica hasta el hogar, con más de 3 millones de clientes conectados y más de 15 millones de hogares en cobertura. En la banda ancha móvil la cobertura 4G ha aumentado desde el 48% hasta el 76%, es decir, un crecimiento del 58% interanual.
Conectarse en movilidad sigue siendo lo más demandado. El 83% de los usuarios acceden a internet a través del teléfono móvil, 5,9 puntos más que en 2014. Y el Smartphone sigue siendo el rey. España es el líder europeo. Un 87% de todos los teléfonos móviles son smartphones en España. Por primera vez, el Smartphone supera al ordenador (diez puntos de ventaja) como dispositivo de acceso a internet. A destacar que en 2015, ha habido un total de 27,7 millones de usuarios de aplicaciones, que se descargan diariamente 3,8 millones. La media de aplicaciones por dispositivo es de 30. Su uso en el móvil supera a la navegación y supone ya el 89% del tiempo que se utiliza el móvil.
España consolida su liderazgo en penetración de dispositivos como el Smartphone, la tableta, el libro electrónico o el televisor inteligente en relación a países como Reino Unido, Alemania, Argentina y Brasil, donde opera Telefónica.
Aunque la comunicación y el ocio siguen siendo los principales motivos del uso de internet, en 2015 se comprueba una utilización más racional de las redes sociales, y un aumento significativo del uso para actividades productivas y profesionales. El empleo de las redes sociales ha descendido 2,4 puntos y los jóvenes dedican ahora más tiempo a conectarse a plataformas de comercio electrónico o aprendizaje on line y menos a la conectividad social. Como curiosidad, el 59,7% silencia a grupos y personas y el 44,1% se ha salido de grupos o bloqueado a personas. En el segmento entre 20 y 24 años, los porcentajes suben hasta el 79,1 y el 68 respectivamente.
El pasado año aumentó significativamente el uso de internet para el consumo de vídeos, películas y música (15,2 puntos) hasta el 67,5% y la búsqueda de información sobre bienes y servicios hasta un 69,6%. La mensajería instantánea siguió creciendo (6,3puntos) y ya la usan a diario el 93,7% de los españoles, al igual que la realización de operaciones bancarias (3,9%) y con la Administración (17,7%).
El gran desarrollo de la vida digital de los españoles ha dado un importante impulso a la importancia que dan a su privacidad y el control de sus datos. El 82% de los internautas consideran la privacidad como un valor a proteger y la mayoría no está dispuesta a perder privacidad a cambio de recibir ofertas personalizadas. El 85,2% reclama la posibilidad de identificar y borrar los datos personales y el 62,2% la capacidad de mover los datos personales a una plataforma o red social diferente. Y muchos ya han extendido acciones activas para protegerse de nuevas amenazas hasta el punto de que el 43% de los internautas desconectan la cámara o la mantienen tapada.
El nuevo gran atractivo de la tecnología y la manera de afrontarla y usarla ha creado un grupo de usuarios más avanzados respecto a la media. Son los llamados early adopters. Este grupo se caracteriza por el disfrute con el uso de las nuevas tecnologías y ser los primeros en adquirir nuevos dispositivos o contratar nuevos servicios tecnológicos. Según una encuesta de Telefónica en los países en los que opera, España destaca como el país con el mayor número de early adopters, con un 15,8% de los internautas, frente al 14,6% de Brasil, el 14,1% de Reino Unido, el 10,5% de Alemania y el 10% de Argentina. Los early adopters son prescriptores entre los familiares y amigos, prefieren disfrutar de experiencias a tener cosas y el trabajo es una parte muy importante de su identidad.
Los early adopters son los más avanzados en los nuevos comportamientos que se están detectando entre los internautas. Por ejemplo, se aprecia un aumento importante hasta el 14% de los usuarios en la adopción de sistemas de bloqueo de publicidad que amenazan los modelos de financiación de internet. Asimismo, el consumo de la televisión está cambiando hacia la personalización a pasos agigantados. El consumo lineal de Juego de Tronos cayó en un solo año del 51% al 22% en 2015. Los usuarios prefieren el video bajo demanda y sólo los eventos deportivos mantienen la preferencia del consumo lineal.
La gran novedad que se produce durante este año es que el incremento de muchas de estas actividades, sobre todo las que están más relacionadas con la productividad, se produce principalmente entre personas maduras, en concreto entre 55 y 64 años: en este segmento se produce un incremento de nada menos que del 48,5% en la utilización de Internet a la hora de realizar compras, del 41,83% para realizar cursos de formación, del 28,45% en las operaciones bancarias, y del 24,87% en las operaciones con las administraciones.
De esta forma, este segmento de población es capaz de revertir la brecha tradicional que le separaba de la media, dándose el caso de que en ciertas actividades se sitúe levemente por encima de la media, como por ejemplo a la hora de operar con las administraciones (46,7% de los internautas de este segmento frente al 46,5% de la media de población) o a la hora de realizar operaciones bancarias (46,5% en el segmento frente al 46,2% de la media).
Las nuevas tendencias no sólo afectan a nuestro comportamiento personal, sino que tendrán un gran impacto de la vida económica y la creación de riqueza. Así, la utilización masiva del internet de las cosas en todos los sectores económicos va a abrir la era del internet industrial, que implica un cambio de paradigma: ya es posible la monitorización de cientos de elementos de una forma sencilla y la actuación de forma predictiva gracias al análisis de datos. Se estima que esta tendencia conducirá de forma directa a la creación de riqueza y se prevé que su aportación acumulada al PIB mundial entre 2015 y 2030 oscilará entre los 10,6 y 14,2 billones de dólares en función de las medidas de impulso que se pongan en marcha para favorecer su implantación, pudiendo suponer en España una aportación en dicho periodo entre 108.000 y 137.000 millones de dólares. Este crecimiento supondrá la creación de un número muy elevado de puestos de trabajo de alto nivel de cualificación, como expertos en TIC o científicos de datos.
Por lo tanto, transporte, energía, agricultura y ganadería, minería y salud son sectores económicos en los que la utilización masiva de sensores y de herramientas de big data y data analitycs van a tener un gran impacto en la creación de valor. La necesidad de nuevos profesionales capaces de procesar y analizar todos los datos que se generan en las distintas actividades económicas va a propiciar una alta demanda a los millennials y las mujeres para la incorporación al mercado laboral. El SmartData, la ciberseguridad, la nueva realidad virtual y aumentada con el tacto y los gestos son necesidades presentes que tendrán un gran desarrollo en el futuro próximo.