Está previsto que más del 80% de las compañías a nivel global implanten arquitecturas de cloud híbrido este año. En España no nos quedamos muy lejos: casi el 65% de las empresas encuestadas por IDC ya están inmersas actualmente en estrategias de nube híbrida. A pesar de la amplia aceptación del modelo híbrido que representan estas cifras, existen aún desafíos que deben afrontar las organizaciones para implementar el modelo híbrido.
Uno de dichos retos es la capacidad de establecer conexiones seguras, eficientes y rentables entre el cloud privado y las principales plataformas de cloud pública. Es decir, tener garantías de que las cargas de trabajo que se transfieren entre estas nubes lo hagan de una forma privada, segura y con costes rentables.
Casi el 65% de las empresas encuestadas por IDC ya están inmersas actualmente en estrategias de cloud híbrido
En este entorno, desarrollan un papel clave los proveedores cloud como AWS o Microsoft Azure, pero también otros jugadores como los centros de datos especializados. El valor que podemos aportar pasa por ofrecer las mejores opciones de conectividad posible de la manera más económica.
Hace ya varios años que los grandes proveedores de cloud público como Amazon Web Services (AWS) y Microsoft Azure llegaron a Europa. Sus servicios comenzaron a utilizarse, y sus clientes se conectaban mediante internet. Estas conexiones pueden presentar problemas de seguridad y latencia que no resultan fáciles de solucionar. Los proveedores de telecomunicaciones ofrecen entonces servicios WAN o MPLS para mejorar la conectividad, pero el coste de estas soluciones resulta elevado e impide a muchos usuarios acceder a ellas y adoptar con seguridad el modelo cloud.
Presente y futuro: una única conexión a múltiples nubes
Hoy en día se han desarrollado nuevas plataformas desde los centros de datos hiperconectados que permiten, con una única conexión física, el acceso privado y directo a múltiples nubes. Bajo la denominación de Cloud Connect, se ofrece conectividad VLAN segura a las organizaciones que necesitan mejorar latencias, garantizar el rendimiento de las aplicaciones y el control de costes.
Cloud Connect ofrece conectividad escalable en función de las necesidades, evitando agregar conexiones físicas o esperar la entrega de servicios dedicados como conexiones punto a punto.
Las corporaciones pueden además reducir sus costes de red hasta un 50% al eliminar los cargos por tráfico de datos, y simplifican la migración a la nube con la seguridad de que las cargas IT se conectan de forma directa a las nubes. Además, ofrece la capacidad gestionar el cloud híbrido en una plataforma independiente y adaptada al futuro.
Estas conexiones ofrecen beneficios adicionales para los proveedores de servicios gestionados, que podrán ampliar su oferta y disponer de una conexión única a múltiples cloud para múltiples clientes, con un nivel de servicio del 99,999%.
En definitiva, para implementar con seguridad los modelos de cloud híbrido demandan una conectividad mejorada. La evolución tecnológica permite hoy contar con opciones sencillas y rápidas de implementar para establecer conexiones directas, privadas y rentables.
Gracias a esta conectividad, las empresas pueden aprovechar al máximo las grandes posibilidades que hoy en día ofrecen ya las plataformas de nube pública. No olvidemos que movernos en el mundo digital implica que las organizaciones estén “always-on”.
