Las empresas están poniendo toda la carne en el asador. En realidad no es otra cosa que realizar las labores de marketing, llevadas hacia el mundo del marketing digital. El hecho de que parezca más que necesario adentrarse en este mundo esté provocando que cada vez aparezcan más cursos, másters, planes de formación específicos en las empresas, por lo que son muchos los que se preguntan si no nos encontramos ante una nueva burbuja dentro de este mundo tecnológico.
Los datos son claros. Según un informe realizado por IAB se indica que el marketing digital es a día de hoy una tendencia generalizada, con crecimientos anuales de hasta el 21% y empresas de todos los tamaños dedican cada vez más tiempo y recursos a esta actividad. Por ello, incluso las pymes se están adaptando rápidamente y empiezan a emplear herramientas de marketing online para explorar nuevas posibilidades y diferenciarse de sus competidores.
¿Qué es lo que están viendo las empresas en todo lo relacionado con el marketing digital? ¿?Cuáles son sus principales beneficios? Pedro Abad. Country Manager de Elogia, asegura que “el marketing digital en sí no reporta ningún beneficio. Una buena estrategia de marketing digital y una excelente ejecución pueden reportar grandes beneficios. Pueden ser beneficios claramente cuantificables (ventas, registros…) o beneficios como vinculación con la marca, incremento de notoriedad o comunicación personalizada con nuestros clientes”.
La realidad es que el marketing digital no es otra cosa que el marketing tradicional llevado a la red, a los dispositivos móviles, las redes sociales, etc. Es decir, aquella empresa que tenga una mala estrategia en el marketing tradicional, muy posiblemente también falle a la hora de atraer o satisfacer las necesidades de sus clientes en el mundo online. Pero aún así, el hecho de tener una estrategia plena en el mundo del marketing tradicional no implica que esa sea correcta en el nuevo mundo del marketing online. El cambio se produjo con el nacimiento de la denominada web 2.0: Con ella y gracias a las ventajas que proporcionan las nuevas tecnologías, los canales de vídeo, las redes sociales, foros, etc. aparece un nuevo concepto: el cliente actúa con la empresa y como cliente que es exige de ella un trato cada vez más personalizado. Es más los clientes interactñuan entre sí, valorando, positiva o negativamente a una compañía, hasta tal punto que un producto medicocre puede subir a los altares si los usuarios lo posicionan como tal… y viceversa, un producto excelente puede convertirse en el peor de todos si los usuarios observan que la empresa que lo comercializa no atiende sus demandas. Internet, y todo lo que la rodea, se ha convertido en el ágora pública en el que la empresa debe estar y tiene que convertirse en una estrategia prioritaria del área de márketing. Como afirma Eduardo García, Director de Marketing y Comunicación de Wolters Kluwer Tax & Accounting, “el marketing digital no es más que una de las palancas tácticas para llegar al cliente, pero ésta, al igual que otras, siempre debe estar basada en las decisiones estratégicas y objetivos de negocio. Esta estrategia nos llevará a una definición de nuestro posicionamiento de marca que impulse los productos y servicios, y esta estructura de decisiones y objetivos no es digital o analógica. Los beneficios que reportan son la interacción con el usuario/destinatario, la segmentación para llegar al target deseado y la medición de resultados”.
Fernando Meco, Director de Marketing & Sales Operations en SAS asegura que “el marketing digital optimizado con analítica avanzada, permite mayor interacción, aproximación y personalización del cliente, logrando incrementar el engagement con la marca; implantar acciones medibles y conocer resultados, no sólo de las tácticas habituales sino también de nuevas ideas o nuevos públicos que se quieran probar; segmentar y personalizar de forma más eficaz e ir adaptando la estrategia de relación con el cliente conforme se va desarrollando con técnicas de análisis en tiempo real”.
Marketing digital, un nuevo empleo
SEM, SEO, Redes Sociales, diseño web,… son algunas de las prácticas necesarias en cualquier departamento de marketing. Cualquier persona que busque un trabajo relacionado con el mundo del marketing, se encontrará en la oferta alguna de ellas. Y es que, desde la aparición del término Community Manager hace unos diez años, y que supuso una burbuja (ahora se ha convertirdo en uno más de los empleos qcuya retirbución no es ni para mileurista), el responsable de marketing debe tener guardado a fuego todo ese mar de siglas y nuevas técnicas. Si no, ni encontrará un nuevo puesto de trabajo ni muy posiblemente, mantendrá el suyo con la formación tradicional que haya tenido.
Más que porque ofrezca beneficios a las empresas, éstas han abrazdao el marketing digital por obligación. La realidad es que la idea de, por ejemplo, tener que interactuar con el cliente en tiempo real no les seduce en absoluto. Así que más de beneficios, hablamos de minimizar riesgos. La era de la reputación, que se llama. La empresa vive en ese estado permanente de no perder reputación, de no ser castigado por un “influencer” de 14 año que se dedica a colgar vídeos en Youtube. No es bueno que un grupo de clientes empiece a poner notas negativas a un determinado producto o servicio.
Al no creer en el beneficio que aporta, y minimizar riesgos, las empresas no caen en los beneficios que la nueva era de marketing reportan. Por ejemplo, basan la mayoría de sus estretegias en la presencia en redes sociales, cuando el tráfico que reporta hacia su web en la gran mayoría de los casos no llega al 10% y olvida la presencia en buscadores, que al final será lo que les reporte un mayor número de clics, y que permitirán que un determinado producto se compre o no.
Ante la nueva realidad, las empresas están aprendiendo. Todavía no tienen el conocimiento necesario para poder realizar una estrategia que les aproxime a los clientes que ya tienen y mucho menos, saben alcanzar a aquellos que todavía no son sus clientes. En muchos casos el éxito o el fracaso depende de un factor que no se puede cuantificar: la suerte.
Así que se produce un afloramiento de cursos, masters, grados etc. que van desde los 5 euros a los 30.000. Se trata de una burbuja formativa que en muchos casos no cumple con las expectativas. Así que lo primero que deberían saber las empresas es establecer una estrategia de lo que se quiere conseguir con el marketing digital, porque no es lo mismo el marketing que tenga que hacer una aerolínea que el de un gran hipermercado.
Ventajas del Marketing digital
Como asegura José María Zamora, director de Marketing de Microsoft Ibérica, “el marketing digital engloba todas las estrategias de comercialización y contacto con el consumidor que se desarrollan a través de medios digitales o que ,al menos, tienen como base el conocimiento derivado del tratamiento de datos con herramientas CRMs, la implementación de telemarketing, etc. Dos de las ventajas más destacadas son la profundidad del conocimiento del consumidor que es posible alcanzar, así como la inmediatez en el análisis de los datos, que nos permite hablar incluso de estrategias definidas y optimizadas en tiempo real. Las posibilidades de automatización y aprendizaje inteligente que ponen a nuestra disposición tecnologías como el bigdata o el machine learning permiten un salto cualitativo y cuantitativo que resulta imposible de alcanzar a través de medios tradicionales”. Así que, en general, tanto si si es Pescaderías López como si se es una gran empresa del sector utility como de una entidad bancaria, es necesario tener una estretegia de marketing digital, ya que como señala este directivo, “ todas las empresas deberían usar estrategias de marketing digital para garantizar su competitividad en el momento actual. Independientemente del tamaño de las organizaciones, todas ellas manejan los mismos ingredientes básicos: los datos y unos consumidores que ya son digitales, es decir, que usan la tecnología en su vida diaria, tanto en el trabajo como en su plano personal, para informarse sobre productos, lugares de venta, consultar opiniones de terceros y, en última instancia, tomar la decisión de consumir un servicio o adquirir un dispositivo”.
Víctor Magariño, es un antiguo directivo de Google que ahora ejerce como director de marketing en Comunycarse. Sobre si es necesario que una empresa tenga una estrategia de marketing digital, ofrece la siguiente respuesta: “La respuesta corta es sí: es fundamental para todas. Absolutamente todas las empresas necesitan tener una Estrategia Digital. La respuesta larga es que en función de algunas variables, el despliegue en marketing digital es más o menos “vital”. En primer lugar dependerá del porcentaje de negocio digital sobre el total. En segundo lugar hay que ver si la empresa es muy vertical o ver el sector donde opera y finalmente hay que estudiar el tipo de objetivo perseguido: ventas, posicionamiento, leads, etc. Por ejemplo una empresa del sector viajes (hoteles, vuelos, ocio…) en el que la penetración de los medios digitales supera el 70%, debe centrar su estrategia y por lo tanto su presupuesto en marketing digital. En el caso opuesto, una empresa más tradicional, en un sector no excesivamente digitalizado, puede funcionar con una inversión más básica en marketing digital, lo que no quiere decir que se pueda prescindir por completo de la misma”. En la misma línea se sitúa Mar de Ojeda y Ruiz de Luna, CEO de EMRED/SALESmanago Marketing Automation: “Todas las empresas necesitan una estrategia. Otra cosa distinta es si la estrategia debe ser 100% online o digital. Dependiendo del sector y de la tipología de cliente, no siempre hay que estar volcado 100% en online. El sector del lujo es uno de los sectores que por las particularidades del producto y exigencia de la clientela, necesita más puntos de contacto que lo puramente digital”. El portavoz de SAS, por su parte, considera que “la falta de una visión completa del cliente es uno de los mayores problemas que tienen los responsables de marketing. Conocer a fondo y en el menor tiempo posible el comportamiento de un cliente cuando se relaciona con la marca es la base fundamental para la toma de decisiones más inteligentes en la estrategia de marketing de la compañía. Desde SAS ofrecemos soluciones como SAS Customer Intelligence 360, que actúa como un hub intuitivo de marketing digital reuniendo las interacciones del cliente en todos los canales: web, email, medios digitales, actividad en la tienda o llamadas al contact center y midiendo resultados de acciones, contenidos, segmentos de cliente o secuencias; todo ello en tiempo real. Con toda esta información disponible de forma inmediata es posible mejorar la experiencia del cliente ejecutando las mejores acciones en los momentos adecuados. Por ejemplo, con toda la información del cliente disponible e integrada, el profesional de marketing puede enviar de forma inmediata una propuesta personalizada al smartphone de un cliente cuándo está cerca de una localización concreta, lo que mejora su experiencia con la compañía cubriendo sus necesidades en el momento adecuado. El marketing digital optimizado con analítica avanzada, permite mayor interacción, aproximación y personalización del cliente, logrando incrementar el engagement con la marca; implantar acciones medibles y conocer resultados, no sólo de las tácticas habituales sino también de nuevas ideas o nuevos públicos que se quieran probar; segmentar y personalizar de forma más eficaz e ir adaptando la estrategia de relación con el cliente conforme se va desarrollando con técnicas de análisis en tiempo real”.
Saturación de mercado
Como comentábamos más arriba, puede que nos encontremos ante una burbuja dentro del mundo de las tecnologías. La avalancha de cursos, así como la oferta de empleos (cada vez peor pagados, debido a una sobresaturación del mercado y el desconocimiento de las empresas de los objetivos a conseguir) es cada vez mayor. Si se navega un poco por los portales de empleo, podemos ver cómo el salario cae cada vez más. Un responsible de marketing digital, encargado de llevar toda la estrategia de marketing digital de una compañía, tendrá una salario bruto que se sitúa entre los 24.000 y los 30.000 euros anuales. Si simplemente se busca integrarse en el área de marketing digital de una empresa nunca se obtendrán más de 15.000 euros brutos anuales. Es decir, se trata de empleos que cotizan a la baja en general por dos motivos. El primero, y el más importante, porque los responsables de la empresa no le dan la importancia que realmente tienen las estrategias de marketing en la empresa ni los beneficios que les puede conllevar. En segundo lugar, porque existe un exceso de oferta, con lo que los precios han ido cayendo de manera exponencial año tras año.
Esto no ocurre en países cuyas empresas sí le dan importancia a la estretagia en marketing online: así en lugares como Australia, EE.UU., Alemania u Holanda, el salario medio de un senior que quiera trabajar en el departamento de marketing online de una empresa obtendrá una remuneración que se situará entre los 53.000 y los 83.000 dólares anuales, según un estudio que realizaron las empresas Moz y Survey Monkey. Es decir, se considera un empleo cualificado, mientras que en España, no.
Sin embargo aquí sigue el exceso de demanda de profesionales y el incremento de cursos de formación. Y es que como señala la portavoz de EMRED, “Efectivamente la linea de producto/servicio no siempre está bien definida. Hay proveedores que quieren ser todo para todos, y eso al final se traduce en falta de especialización. Hoy en día hay que conocer mucho y bien el sector al que te quieres dirigir”. Desde Wolters Kluwer también se señala que “actualmente prácticamente nadie duda de la necesidad de tener presencia en medios online (sobre todo las redes sociales) pero quizás no todas las empresas se detienen a pensar cómo hacerlo ni a diseñar una estrategia que sustente esa acción y objetivos de negocio que la oriente: reconocimiento de marca, captación de leads o compra. Cualquier acción en marketing y comunicación que no esté alineada con los objetivos del negocio y se apoye en un análisis previo y posterior del target, disponga de unos objetivos claros y compartidos, y con monitorización de resultados, no tiene demasiado sentido más allá del comentado de estar por estar y entre nosotros de quemar dinero de la empresa y, no lo olvidemos, a los potenciales clientes”. Finalmente Pedro Abad de Elogia asegura que “Al igual que a nuestros clientes, las agencias también debemos preguntarnos cuál es nuestra propuesta de valor, es decir, ¿por qué nos van a comprra a nosotros? Desconozco si algunos entran por gancho o por moda, pero lo que es claro es que en este sector la clave es conjugar conocimiento, tecnología y filosofía. Y haría hincapié en esta última. Necesitas personas que piensen en digital, que estén dispuestos a trabajar a la vanguardia, con incertidumbre y siempre en modo aprender. Son las personas las que nos hacen valiosos”.
Marketing digital. Definir la estrategia
Uno de los problemas viene a la hora de definir la estrategia, que en muchos casos ni siquiera se hace. Esta es la parte fundamental del marketing digital. De la misma forma que en el marketing tradicional se definen las estrategias antes de lanzar un nuevo produto, dar un servicio al cliente o hacer una encuesta de satisfacción, en el marketing digital, los responsables de la organización deberán valorar antes que nada qué es lo que pretenden conseguir. Si esto no se realiza la campaña en cuestión se convertirá en un auténtico fracaso. Pedro Abad asegura que “lo primero es tener claro cual es su propuesta de valor, entender es qué se diferencia y cuales son sus ventajas competitivas. A partir de ahí debemos definir los objetivos y las palancas en las que apoyarnos. Estas palancas deben ser sólidas. Algunos piensan que solo haciendo buen marketing tendrán éxito. Esto no suele ocurrir. Necesitamos producto, coherencia, de valores, etc, para poder armar una estrategia ganadora”. De la misma opinión de Mar de Ojeda: “en primer lugar, [a la hora de establecer una estrategia de marketing digital] hay que tener bien definidos sus objetivos y expectativas del marketing online. Y en base a eso crear un plan de acción a corto, medio y largo plazo. Hacerse preguntas del estilo. ¿a donde quiero llegar? ¿a qué publico quiero llegar? ¿qué quiero ser cuando crezca? Establecer un presupuesto acorde a esos objetivos, que han de ser siempre realistas y dimensionarlos en base a la velocidad de crucero. No es lo mismo una empresa/marca que crece sólo con recursos propios, de una marca/empresa que crece con finanaciación externa”.
La opiniones las hay para todos los gustos. Así para José María Zamora de Microsoft, para establecer una estrategia de marketing online, hay que tener en cuenta que “las posibilidades en este campo son virtualmente infinitas y tenemos que trabajar para que el bosque no nos impida ver los árboles. En otras palabras, es necesario que el cliente comience por definir unos objetivos claros por encima de todo. El siguiente paso es definir cuáles son los datos relevantes que debemos manejar para ofrecer al consumidor una experiencia personalizada que repercuta en una mayor confianza y proximidad por su parte. Las herramientas actuales ponen a nuestro alcance un abanico de posibilidades sin parangón. Por esto mismo es vital que nos aseguremos desde un principio que estamos tomando el camino que conduce a la meta que queremos alcanzar”. Finalmente desde SAS afirman que “una buena estrategia de marketing digital debe estar basada en el análisis de la información que genera el cliente en su relación con la marca a través de todos los canales. Este conocimiento integral del comportamiento del cliente es lo que debe definir las estrategias buscando la personalización e inmediatez de forma que se cubran sus necesidades particulares en los momentos más acertados. No sólo se logran ofertas más afines, sino que se estará rentabilizando la inversión de las acciones”.
Por su parte, en una entrevista realizada a Víctor Magariño en el passado número de BYTE TI, este directivo da con buena parte de las claves a la hora de establecer una estrategia digital de marketing por parte de las empresas: “Lo primero de todo: tener clara su estrategia de marketing tradicional, la estrategia de negocio. Para ello debe conocer muy bien su negocio para saber cuál es su estrategia de marketing: saber si quiere obtener visitas o si quiere tener posicionamiento, o vender,… Una vez que se tiene claro, sólo tiene que aplicar las teclas en función de los objetivos que quiere conseguir. En nuestro caso, nuestras soluciones no se venden online. Ni siquiera las puramente cloud. Nuestras soluciones hay que venderlas en directo porque somos una empresa de consultoría. Así que nuestro objetivo es generar leads. Leads lo más cualificados posibles. Así que nuestra estrategia, se basa en dos pilares: En marketing de buscadores es una estrategia always-on. Siempre tienes que esta “on” porque los usuarios buscan cuando buscan y no están esperando a que saquemos un producto o hagamos una campaña en radio. Por ello apostamos por el marketing de buscadores y en ello tenemos muy controladas las palabras clave de nuestro negocio para que aparezcamos siempre que se produzca una búsqueda y esto es lo que significa always-on. Por otro lado, tenemos una estrategia de generación de contenidos tanto en marketing de buscadores como en redes sociales: blogs, webinars, etc. Siempre intentando añadir algo de valor, que no sea un simple retweet. Además, para nosotros es fundamental dar con el responsable de la toma de decisiones de una empresa. Nos han ofrecido varias bases de datos. Normalmente esas bases de datos no sirven para tus propósitos. La mejor base de datos actualmente es LinkedIn. Hace tres años, cuando nadie hablaba de la venta social, nosotros compramos licencias de lo que hoy se llama Linkedin Sales Navigator. Al haber sido de los primeros en apostar por ello hemos tenido algunas ventajas. Esta herramienta es fundamental pero sobre ella tienes que generar una cultura de uso y hoy en día nosotros tenemos una cultura de uso que es muy difícil de trastocar”.
No sólo Google
Uno de los errores más comunes es que detrás de cualquier estretegia de marketing digital, solo ha que contar con Google. Otro error sería centrarse en las redes sociales. El marketing digital es eso, pero va también más allá. Para la CEO de EMRED/SALESmanago Marketing Automation, “Las marcas y profesionales del marketing están saturados del monopolio de Google tanto en la invasión de la publicidad como en la intromisión en nuestros correos. Hay vida más allá de Google. Hay marcas que han hecho una estrategia excelente de posicionamiento al margen de Google. Las redes sociales están teniendo una importancia increible para conectar marcas con audiencias. Y aquí Google no lo ha hecho bien”. Pedro Abad, country manager de Elogia también considera que “Google es un pilar fundamental para la mayoría de clientes, pero ¿qué ocurre si tu producto o servicio no tiene demanda? ¿De qué te sirve Google si no hay búsquedas en tu sector? El marketing digital tiene otras muchas herramientas como la publicidad gráfica, el email marketing y las redes sociales, quienes están tomando un papel protagonista. Y diré más: el marketing online es mucho más que adquisición de clientes.No puedes olvidar la importancia de la conversión y sobre todo de la fidelización. Ahí juegas con otros canales”.
De nuevo se vuelve a apreciar que las empresas cometen errores a la hora de implantar una estrategia de marketing digital, al confiar plenamente en el poder de Google. Pero, ¿qué otros errores se cometen? Muchos de ellos parten de la base de no definir correctamente cuál es el objetivo y poner las bases de una estrategia que lleve de forma unívoca en esa dirección. “En este sentido uno de los principales errores es, por ejemplo, generar tráfico a través de campañas impactantes hacia lugares no relevantes para el consumidor sin un call to action claro y, además, sin registrar información”, afirma el portavoz de Microsoft. Desde Comunycarse, se afirma que otro de los errores ha venido de la palabra ahora maldita, el Community Manager. Desde esta compañía se asegura que un error común es “dejarse llevar por las modas, por lo que habla todo el mundo, por la última red social o startup, o por lo aparentemente fácil. La popular figura del Comunity Manager ha hecho mucho daño a algunas empresas que se dejaron llevar por la facilidad y lo barato que puede parecer tocar esta “tecla” y no cumplieron en absoluto sus objetivos”.
Pero es sobre todo en la definición de la estretegia donde se producen los errores más comunes. Muchas veces esta no se encuentra bien definida e incluso, ni siquiera existe. Muchos por ejemplo, se creen que lanzando una campaña a través de una red social se incrementarna su ventas y al no lograrse consideran que es la herramienta o el producto el que falla, cuando la realidad es que lo único que ha fallado es no ir al público objetivo o no saber atraer a la demanda por un canal más específico. Como asegura la portavoz de EMRED, muchos errores vienen dados porque “se quiere vender en internet sin definir una estrategia adecuada, sin un producto adecuado, no saber comunicar, no saber llegar al target adecuado, no elegir un proveedor logístico adecuado, no cumplir las promesas…. Es más fácil cometer errores que tener éxito”. Por su parte, el portavoz de Wolters Kluwer cree que “uno de los errores más comunes que se suele cometer en este ámbito es del estar por estar, es decir, tener presencia en medios digitales sin una estrategia clara. En el mismo sentido, otro error frecuente es simplemente trasladar la estrategia de marketing tradicional a soporte online sin entender que en marketing digital no solo cambia el soporte, sino también todo lo que gira a su alrededor”.
Marketing digital tradicional vs online
¿Va a reemplazar el marketing online al marketing tradicional? En principio, no. El marketing tradicional va a seguir existiendo simplemente por una razón: los usuarios no vivimos las 24 horas en el mundo digital. Eso sí, el marketing digital va a seguir creciendo en los próximos años. Como afirma José María Zamora, “ambos tipos de marketing deben convivir y complementarse para llegar al máximo número posible de clientes. No debemos perder de vista que vivimos en un mundo en el que el consumidor es omnicanal, no existe el blanco o el negro, sino que dependiendo del momento o la categoría de producto el cliente recurre a canales más presenciales o más digitales”. Para el portavoz de Elogia, el trasvase “dependerá de los sectores. La televisión sigue siendo un soporte donde llegar a millones de personas en muy corto espacio de tiempo. Creo que el marketing digital seguirá creciendo, pues al final la inversión irá donde estén sus potenciales clientes y el móvil absorberá gran parte de ese crecimiento. Aunque normalmente ese trasvase ocurra con un delay importante”. Por su parte, Mar de Ojeda cree que “el marketing digital está cada vez adquiriendo más peso. Antes de comprar algo o reservar un hotel/viaje nos informamos por Internet. Este pequeño gesto ya te indica que nos documentamos mucho mejor que antes, pero igualmente somos más exigentes y nos formamos una opinión positiva/negativa en función de la rapidez de respuesta que nos da el soporte digital”.
Lo que está claro es que conocer al cliente será clave en los próximos años. Aquñi es donde entrarán en juego muchas variables, como Big Data, y serán las que harán que la estrategia de marketing de una empresa sea efectiva o no. Como señala de Ojeda, “las tendencias se van a centrar en conocer al cliente de forma real, a través de plataformas de CRM que nos permitan monitorizar, segmentar y personalizar la experiencia de compra por cada cliente. A partir de aquí se van a automatizar muchos procesos de marketing gracias al correcto uso del Big Data y a herramientas de marketing automation. Lo que hará que la experiencia sea mucho más satisfactoria para el cliente en el momento oportuno”.
Para el portavoz de Comunycarse las tendencias son ya una realidad. Ahora mismo ya se cuentan con herramientas para realizar una correcta estrategia, pero muchas veces las empresas se confunden ante la avalancha de terminología: SEO, SEM, Inbound Marketing… Para Magariño, “la estretegia de nuevo dependerá del tipo de negocio (B2C, B2B), del vertical, del objetivo principal que se persigue y del presupuesto del que se dispone. En ningún caso debe faltar una mínima inversión en SEM (siquiera defensiva) y algo de SEO, siempre que nuestra oferta nos lo permita. Para muchas empresas sencillamente no es realista posicionarse orgánicamente con toda su oferta, por razones de amplitud, coste, posicionamiento, etc. A partir de esta base podemos ir experimentando con otras teclas como Display Advertising en sus modalidades más básicas (orientación contextual, por tema…) o más complejas incluyendo las millones de variables que pueden habilitarse con RTB y las modernas plataformas SSP´s, DSP´s y DMP´s. Además, Online Vídeo (You Tube , FB…) se está convirtiendo cada vez más en una herramienta fundamental para todo tipo de negocio y vertical, tanto B2B como B2C. E-mail marketing por ejemplo ofrece buenos resultados en captación de leads y resulta fundamental para fidelización y retención de clientes. Su otra gran ventaja es el muy bajo coste. Puesto que el consumidor hoy día emplea su tiempo y consume contenidos en varias pantallas, todo lo dicho tiene una versión desktop, móvil, etc”.
Finalmente el portavoz de Elogia señala que “cada marca debe trabajar los canales que mejor se adapten a su estrategia pero es más, no deberíamos juzgar cada canal por si solo si no a través de su contribución total. A veces hay canales iniciadores de venta, que por si solos no justifican su existencia, en cambio, puede que sean imprescindibles para que los canales “rematadores” consigan su objetivo. Todos trabajamos hacia la optimización de la inversión, intentando no tirar ese 50% de presupuesto fuera de nuestro público objetivo. Pensamos que el futuro está en mejorar la precisión de las acciones de marketing, conociendo más a los usuarios y pudiendo adecuar las campañas y mensajes al qué, dónde y cuándo debo contarte algo. Iremos a terminar con el café para todos. Para ello la tecnología juega un papel crucial, pero como dije antes, esto va de tecnología, conocimiento y personas”.