La simplicidad del wireless tiene como consecuencia el crecimiento de un mercado “plug and play” idóneo para los resellers orientados al consumo y particularmente a los partners ISP que mantienen la ruta más larga hacia el mercado, ya que ofrecen routers/gateways inalámbricos con suscripciones de banda ancha.
El mercado se está ahora diversificando con el 20% de las ventas provenientes del sector empresarial. El año pasado las empresas comenzaron a implementar wireless en sus redes en un índice mucho más alto, consiguiendo un incremento del 25% en sus ventas anuales durante 2006, en comparación al periodo anterior.
Esto no se debe a que las empresas se hayan desecho de sus instalaciones y se hayan vuelto completamente inalámbricas, sino a la actual confianza en usar WLAN para el acceso remoto y para el bridging de red. Las firmas que buscan ampliar sus negocios desde una única oficina a múltiples localizaciones consideran las conexiones de red inalámbricas de alta velocidad como una opción viable con el objetivo de mantener la productividad.
Como ocurre con la mayoría de tecnologías emergentes, la laguna en los estándares comunes dificultaba a los usuarios empresariales y el estándar inalámbrico 802.11n no fue una excepción. Inicialmente los usuarios SOHO y domésticos adoptaron muy rápidamente esta tecnología, pero actualmente con la versión 2 de esta tecnología, certificada por la alianza WiFi, se han solucionado los problemas relacionados con la interoperabilidad entre los fabricantes así como la fiabilidad en la seguridad y el rendimiento.
A esto hay que añadir la creciente base instalada de PCs con tarjetas inalámbricas 802.11n embedadas. Los negocios están ahora adoptando más fácilmente esta tecnología para sacar ventaja de su rendimiento e incrementar su autonomía.
Una tendencia de negocio que también influye en el mercado wireless es el ascenso de la plantilla de empleados temporales, haciendo preferible tener una red wireless ya que así es más sencillo darles acceso al sistema. El mercado corporativo crecerá en 2009 y se continuará acelerando cuando el 11n se convierta en estándar.
Con el estándar 802.11n, los “puntos muertos” en la oficina están cerca de ser eliminados, mientras la autonomía, la velocidad y la seguridad de las WLANs mejora considerablemente. Los empleados de las oficinas estarán capacitados para enviar e intercambiar datos hasta cuatro veces más rápido que con los actuales estándares wireless. Las nuevas capacidades de seguridad además proporcionarán garantías a los negocios cuyos datos sensibles están a salvo y los hackers no podrán meterse en su sistema.
Ciertamente el mayor cambio de producto en los últimos años en términos de volumen y margen ha sido el switch gigabit. Así como el wireless se ha convertido en menos exclusivo para SoHo que anteriormente, el 10 Gigabit Ethernet, que solo se veía entre las grandes empresas, es ahora más asequible para el nicho de las pequeñas empresas. En entornos domésticos, el uso de gigabit también ha crecido drásticamente. Esto es debido a la mayor adopción de servidores de medios domésticos, streaming o video HD y el hecho de que la mayoría de portátiles funcionan con conexiones Gigabit Ethernet como estándar.
Aún así, la mayoría de las empresas se han mostrado prudentes a la hora de migrar por razones de costes prohibitivos y la falta de demanda, pero todo esto ha cambiado. Debido al gran descenso en el coste por puerto para las soluciones gigabit, se está ahora adoptado en mayor medida por todo tipo de negocios. Este incremento en el volumen ha significado además un incremento en la competición por los líderes de mercado, teniendo como resultado una bajada en el margen retenido a los vendedores. Pero si el margen cae en ciertos productos entonces se produce un incremento correspondiente en el volumen de ventas.
En general, la tecnología 10G está siendo ampliamente solicitada en entornos en los que los datos necesitan ser procesados rápidamente y donde la información necesita ser accesible en tiempo real. También es una aplicación con gran demanda en instituciones de educación y hospitales ya que permite alcanzar ahorros reales en los costes, al permitir aplicaciones como la VoIP o la convergencia de voz, video y datos, reduciendo el número de líneas externas alquiladas.
El aumento en aplicaciones de mayor ancho de banda continúa moviendo al mercado hacia delante y por tanto la tecnología debe evolucionar para satisfacer estas necesidades. Entre los sectores que están respondiendo se encuentran las redes de centros de datos, los ordenadores de alto rendimiento, el almacenamiento en red, las películas de efectos especiales y animación y el video bajo demanda.
Las redes de área metropolitana, capacitadas actualmente para soportar 10G, están dando la oportunidad de ofrecer servicios de redes privadas virtuales basadas en IP mejoradas. En general, cualquier aplicación de banda ancha buscará migrar a soluciones de 10GB en los próximos años. La industria del cine, por ejemplo, ha sido muy rápida en adoptar esta tecnología.
También en el mundo de la seguridad la tecnología 10G también ha sido ampliamente implantada debido a la actual necesidad de sistemas basados en IP (protocolo de Internet) y a la convergencia de los sistemas de seguridad avanzados que integran voz, datos y video en una única plataforma.
Además encontramos un gran interés por parte de los partners que negocian con los centros de datos.
En general, el cambio se produce hacia la tendencia de mayor velocidad a un menor coste y con una seguridad creciente y el génesis es que se produzca una buena recepción a las nuevas oportunidades de negocio que ofrecen. Sin embargo, incluso si la tecnología está disponible es posible que los partners de canal no consigan vencer todos los problemas que conciernen a los clientes; por lo que los esfuerzos de ventas y marketing se deben centrar en cambiar las percepciones y asegurarse que el usuario confía en que esta tecnología es justo la que necesita para su negocio.
