Sin embargo, todas comparten un propósito principal: garantizar las comunicaciones de una empresa con un alto grado de seguridad y privacidad. Túneles IPSEC, conexiones SSL o redes MPLS son algunas de las tecnologías utilizadas para crear redes VPN. ¿Cuándo es mejor utilizar una tecnología u otra? ¿Qué beneficios me aportan las diferentes alternativas? ¿Qué costes tengo? ¿Cómo va a afectar a los usuarios de mi organización? Esas son algunas de las cuestiones que una compañía debe plantearse antes de implementar una red privada virtual, y que desde Claranet vamos a intentar ayudar a responder.
Una elección estratégica
A modo de ejemplo, pensemos en una organización con varias sedes repartidas por el territorio, empleados que se desplazan para poder llevar a cabo su puesto de trabajo y multitud de aplicaciones, muchas de ellas críticas y sensibles a la seguridad de la información. En este escenario los responsables de IT de la empresa deben definir varias cosas: la estrategia en cuanto a las comunicaciones, la accesibilidad a las aplicaciones que utilizan en la compañía y las conexiones de seguridad necesarias, todo ello afectando lo menos posible al servicio.
Para conseguirlo deberán diseñar junto a un proveedor de conectividad gestionada una red privada virtual, ya sea empleando una sola tecnología o bien combinando varias de ellas. En este artículo no nos vamos a fijar tanto en los detalles técnicos de las distintas opciones sino en qué puede obtener con ellas una organización como la planteada mediante un proveedor de TI como Claranet:
- Integrar las diferentes delegaciones de las compañía, incluso las aplicaciones alojadas en un data center o servicio cloud, mediante una red VPN con tecnología MPLS.
- Priorizar el tráfico por una red MPLS para garantizar la calidad de las comunicaciones de aplicaciones críticas.
- Implementar una solución con conexiones SSL en los portátiles, tablets o smartphones para que nuestros empleados accedan a las aplicaciones desde cualquier lugar.
- Integrar procesos de empresa como la compra de material estableciendo un túnel IPsec con los proveedores.
- Crear una conexión segura a una web para que los clientes realicen pedidos.
En definitiva, con los servicios VPN de un proveedor de servicios gestionados podemos conseguir mejorar varios procesos de negocio y dotar de valor a la tecnología haciéndola accesible a nuestros empleados, clientes y proveedores.