Muchos de los temas que afectan a los centros de datos modernos son el resultado de planteamientos prudentes a la distribución de servidores y el coste relativamente bajo de los propios servidores. Añadir un servidor más para ejecutar una nueva aplicación ha sido una práctica común, pero como el espacio se ha convertido en un gasto extra esto ya no es posible.
De hecho, muchos responsables de centros de datos admitirían que la utilización de los servidores no es precisamente óptima. Todos estos factores han llevado al inicio de un periodo de consolidación a través de tecnologías de virtualización.
Y la consolación tiene sentido. CA recientemente llevó a cabo un estudio entre empresas de todo el mundo del que se desprende que las principales áreas en las que la virtualización está aportando beneficios son en las mejores tasas de utilización de servidores y sistemas, en la mayor fiabilidad y tiempo de actividad de los servidores y mejor continuidad del negocio y recuperación ante desastres. El estudio también mostró una estrecha relación entre virtualización y capacidad de prestar servicio a las prioridades del negocio.
El 63% de las organizaciones dijeron que la virtualización de servidores será una “ayuda importante o muy importante para su organización a la hora de mejorar el rendimiento del negocio”; 66% piensan que la virtualización de servidores será una “ayuda importante o muy importante para que sus organizaciones reduzcan costes TI y mejoren la eficiencia TI”, y el 64% dijo que la virtualización de servidores les ayudará a mejorar los niveles de servicios TI.
Así que, con estas opiniones, no es ninguna sorpresa que se hable de virtualización, dado que resuelve bien el tema de la utilización, da una respuesta a la falta de espacio, ofrece valor real al negocio y supera el temor de que las diferentes aplicaciones impacten negativamente entre ellas.
Sin embargo, existen efectos laterales a tener en cuenta. El nivel de complejidad de los centros de datos ya es un problema importante y la virtualización aún lo exagera más. De nuevo, la encuesta realizada demostró que las diversas implantaciones de virtualización están creando problemas como la proliferación de servidores; la necesidad de mayores requisitos de configuración y administración, la dificultad de informar y tener una buena visibilidad de la eficiencia de los servidores, el rendimiento y la utilización, y la necesidad de tener más especialistas para los distintos mantenimientos.
Esencialmente, esto destaca la necesidad de controles de gestión efectivos que lo abarquen todo. También lanza un claro mensaje de que es vital ser capaces de simplificar este proceso y tener una idea clara del rendimiento de las aplicaciones, servidores y transacciones de este entorno.
De hecho, la complejidad adicional ha refrenado algunas organizaciones de adoptar la virtualización pero esto es algo que no va a desaparecer. Las TI, y particularmente las TI en el mundo de la empresa, es por naturaleza un entramado complejo, la cuestión es cómo hacer que la gestión sea simple.
Otros efectos a tener en cuenta con la virtualización son la gestión de los activos, la seguridad y la infraestructura de almacenamiento. El éxito de la virtualización de servidores puede ser menor si la infraestructura de almacenamiento que lo soporta no está configurada apropiadamente.
Desde el punto de vista de la gestión de la seguridad y los activos, las empresas tienen que asegurar que todos los servidores tienen el software de protección ante amenazas adecuado y que cuentan con las licencias para todas las aplicaciones que se están ejecutando. Aunque no es la forma más eficiente de hacerlo, emplear horas de trabajo para este problema es factible en un entorno más tradicional, pero saber cuántas aplicaciones se han instalado y el estado de seguridad de los productos de gestión de amenazas es un entorno virtualizado hace que deba emplearse mucho tiempo en todo ese proceso, lo cual tiene un precio prohibitivo.
Esta complejidad añadida exige un grado de automatización en materia de gestión de activos y despliegue de software y debe ser otra importante consideración a tener en cuenta cuando se adopte un entorno virtualizado.
No hay ninguna duda de que la virtualización puede dar, y de hecho está dando, beneficios a muchas empresas y ciertamente puede ayudar a aliviar muchos de los problemas que están afectando el diseño de los centros de datos, en especial aquellos con espacio limitado.
Sin embargo, es importante comprender las implicaciones de un proyecto así y estar preparados para abordarlo. Tener la infraestructura y los sistemas de gestión adecuados es una necesidad para el éxito a largo plazo de la virtualización, pero si se hace correctamente, este éxito puede ser importante.
