La ciberseguridad es el riesgo número uno en la actualidad para las empresas. Así lo confirman los datos del informe ‘Risk in Focus 2020. Hot topics for internal auditors’ (RIF20) que cada año realizan el Instituto de Auditores Internos y otros siete institutos homólogos europeos con el objetivo de identificar los principales riesgos a los que se enfrentarán las empresas europeas el próximo año y asegurar su correcta supervisión. El informe recoge la opinión de más de 500 directores de Auditoría Interna de las principales multinacionales de Europa.
El 78% de los directores de Auditoría Interna encuestados citan “Ciberseguridad y protección de datos” como uno de los cinco riesgos principales a los que se enfrentan sus organizaciones y un 21% opina que es el riesgo principal.
El hecho de que se produzcan fallos en la protección de datos de manera continuada en todo tipo de empresas ha mantenido la ciberseguridad en el primer lugar del ranking de riesgos. Algunos ejemplos pueden verse en el descubrimiento de las vulnerabilidades de Spectre y Meltdown que afectaron prácticamente a todos los chips de procesamiento de Intel; la exposición de información personal de 50 millones de usuarios de Facebook; o el ciberataque de la cadena hotelera Marriott que comprometió los datos de 500 millones de clientes.
Un riesgo cada vez más sofisticado
La seguridad de la información y la protección de datos no solo está en la mente de los directores de Auditoría Interna, también en su agenda. El informe revela que es uno de los cinco riesgos a los que esta área dedica en la actualidad la mayor parte de su tiempo y esfuerzo y se prevé que siga siendo así debido a la rápida evolución de las ciberamenazas. Es necesario que las empresas se mantengan alerta porque los métodos empleados para violar la seguridad de los datos se sofistican cada vez más. Del mismo modo, la seguridad de los servicios en la nube sigue siendo un punto clave para Auditoría Interna y una prioridad para las compañías.
La ciberseguridad y la protección de datos no solo está en la mente de los directores de Auditoría Interna, también en su agenda
Las empresas deben mantenerse al día sobre las amenazas nuevas y emergentes. Las técnicas de aprendizaje automático están comenzando a implementarse en la detección y prevención de intrusiones de red, detección de malware y autentificación segura de usuarios. Pero también se espera que los ciberataques sean cada vez más frecuentes. Darktrace, compañía de defensa cibernética e inteligencia artificial, predice un futuro en el que los ataques serán masivos y se propagarán automáticamente utilizando el entorno de red.
Multas millonarias
El riesgo de la seguridad de la información es aún más acuciante tras el Reglamento General de Protección de Datos (RGPD) que entró en vigor en mayo de 2018. En los primeros ocho meses desde su aplicación, se registraron 59.000 violaciones de datos personales en toda Europa y las autoridades comenzaron a emitir sus primeras multas en países como Francia, Alemania, Polonia y Dinamarca, siendo la más importante una sanción de 50 millones de euros a Google por la recopilación encubierta de datos del consumidor. Las multas RGPD alcanzaron en el primer año de implantación 56 millones de euros. Las elevadas sanciones, potencialmente ruinosas, están obligando a las compañías a cambiar la forma de gestión de los datos personales.
Pero la ciberseguridad no solo debe verse como un riesgo sino también como una oportunidad para ofrecer valor. Aquellas empresas que implementen los sistemas de seguridad adecuados y sean capaces de responder a las infracciones cibernéticas de manera rápida y efectiva, generarán una mayor confianza en sus clientes, lo que a su vez crea valor para los accionistas.
Los resultados del informe Risk in Focus 2020 son aplicables en todos los sectores y países ya que, aunque la investigación se ha llevado a cabo en Europa, la mayoría de los directores de Auditoría Interna que han participado en el informe pertenecen a empresas multinacionales