Con un peso de unos dos kilos, este modelo, “hecho para iPod” resulta diferenciador por su capacidad para enganchar directamente a este popular sistema multimedia portátil. Aunque no sea por el momento la opción preferida para realizar presentaciones, lo cierto es que la capacidad de llevar en el iPod tanto archivos como contenidos multimedia hace que resulte un elemento perfectamente válido para llevar la información.
Al igual que el iPod, el PJ258D ha sido diseñado para que resulte fácil de manejo y, a la vez, versátil en su funcionamiento. El soporte incluido conecta directamente el iPod vídeo, eliminando la necesidad de un ordenador como elemento intermedio de conexión. Además, el proyector recarga la batería del iPod durante la reproducción del contenido digital, permitiendo que la proyección continúe sin interrupciones debido a falta de autonomía del reproductor.
Además de con el iPod, el proyector es capaz de operar con sistemas PC y Mac a través de su entrada RGB, así como otra de vídeo compuesto y una tercera de S-Video. El equipamiento estándar para un proyector de pequeño tamaño como es el caso. Su óptica, con enfoque manual, así como el zoom, le permite trabajar con distancias de presentación entre 1,2 y 10 metros, con tamaños de entre 0,76 y 10 metros de diagonal.
Con un sistema óptico basado en la tecnología DLP de Texas Instrument, el PJ258D ofrece una nítida resolución XGA con formato de 1.024 por 768 puntos, aunque también es capaz de trabajar con una resolución de 1.280 por 1.024 en formato comprimido. Dotado con una lámpara de 200 vatios, el proyector entrega un brillo de 2.000 lúmenes de brillo y un valor de contraste de 2.000:1 para proporcionar imágenes con gran fuerza y brillo.
El equipo incluye cables de conexión, así como bolsa de transporte y mando a distancia inalámbrico, que hacen más cómodo el acceso a los ajustes que la botonera situada en la parte trasera del equipo. El conjunto de ajustes es notablemente amplio y bien distribuido, lo que permite colocar rápidamente el proyector en cualquier sala y prepararlo para la presentación. Las prestaciones adicionales de este modelo le permiten tanto la más clásica de congelar la imagen como la avanzada de repetición de video en cualquier escena.
El funcionamiento es notablemente silencioso, tanto en el modo normal de funcionamiento, a plena potencia de la lámpara, como en el modo económico, que reduce la potencia de iluminación. En el primer caso se obtiene una duración estimada de la lámpara de unas 2.000 horas, que suben hasta las 3.000 con el modo económico. Sin duda el ViewSonic PJ258D es un compacto equipo con vertiente tanto profesional como de ocio gracias a su capacidad para reproducir los contenidos de los iPod o una videoconsola, pero también los de un PC.
