La irrupción masiva del teletrabajo ha hecho que las conexiones jueguen un papel esencial. En estos momentos, en los que buena parte de la población está trabajando desde sus casas, es fundamental tener la mejor conexión posible para que la productividad no se vea reducida.
Es en este punto, cuando muchos usuarios se han dado cuenta de que no disponen de una conexión de fibra óptica en casa, lo que les imposibilita realizar tareas que requieran de un “movimiento” importante de datos.
Tener una buena conectividad es fundamental porque si se carece de ella, por ejemplo, una videoconferencia puede suponer una tortura debido a que la conexión se cae. Asimismo realizar tareas de trabajo colaborativas pueden verse ralentizadas por este motivo. Lo mismo ocurre si se tienen que subir a la nube archivos pesados
El problema es que, como hasta ahora no lo consideraban necesario, muchos trabajadores ni siquiera se habían preocupado del tipo de conexión que tenían en sus hogares. Al darse cuenta de que carecen de una conexión de fibra óptica en casa rápidamente han indagado cómo hacer que su operadora se la instale. Y aquí es donde pueden aparecer los problemas. Y es que, en muchas ocasiones, la operadora no da el servicio de fibra óptica en una determinada zona, por lo que es necesario cambiar a otro operador que sí proporcione ese servicio.
Pero no siempre sucede esto. En grandes ciudades, la fibra óptica puede cubrir la mayoría de los barrios pero en localidades más pequeñas el número de zonas cubiertas por fibra óptica es más limitado. En cualquier caso, para conocer si se puede tener una conexión de fibra óptica en casa lo más sencillo es entrar en la web de la operadora que queremos que nos la instale y buscar en el apartado específico donde se puede comprobar la cobertura de la fibra por zonas. Pero además, si en esa zona no hay cobertura de fibra óptica varias compañías disponen de formularios en sus webs para pedir que la instalen en esa localización.
¿Y qué elegir?
Una vez que se sabe que una determinada zona tiene cobertura de fibra óptica surge la pregunta, ¿qué operador seleccionamos para que me instale una conexión de fibra óptica en casa? Es verdad que la respuesta puede parecer complicada puesto son demasiadas las propuestas que existen en el mercado. Pero es necesario saber que, antes de contratar, hay un punto muy importante a tener en cuenta si no se quieren tener problemas de conexión o de velocidad. Obligatoriamente, el servicio de fibra contratado tiene que ser simétrico, es decir, ofrecer la misma velocidad de conexión tanto si descargamos un archivo como si, por ejemplo, subimos ese archivo a la nube. Una conexión asimétrica, en la que las velocidades de subida y de bajada sean diferentes, puede generarnos problemas puntuales.
En el momento en el que se tiene claro este conjunto de puntos ya sólo falta decidir por una de las ofertas que hay en el mercado. Una de las más atractivas en estos momentos es la oferta de fibra de Simyo. Esta operadora apuesta por la simplicidad para que los usuarios puedan elegir de forma sencilla la opción que mejor se adapte a sus necesidades. Para ello cuenta con dos tarifas diferentes: una opción con velocidad simétrica de 100 Mbps y otra de 300 Mbps. El precio de la primera es de 25,99 euros al mes, mientras que la opción de fibra simétrica a 300 Mbps tiene un precio de 30,99 euros al mes. En ambos casos, no hay cuota de línea y permite tanto la descarga como la subida de datos de forma ilimitada. Además, Symio cede al usuario el router para que pueda tener WiFi en casa y aplica un descuento de 7 euros en el caso de que también se seleccione una una tarifa móvil, con bonos de megas o minutos en el apartado “Crea tu Tarifa”, siempre que esa tarifa de móvil sea igual o superior a 7€.
Otra ventaja de tener la conexión de fibra en casa con Symio es que el usuario podrá cambiar su velocidad sin ninguna penalización y de forma inmediata. Además, la instalación de la fibra es gratuita si el usuario mantiene el contrato durante tres meses y en el caso de que se diera de baja antes, sólo tendría que pagar la parte proporcional a los días que quedan hasta alcanzar esos tres meses.