Los robots entraron en la cultura mundial, especialmente en el mundo del cine, mucho antes de lo que podemos recordar la mayoría. Los robots siempre han sido un reflejo de la noción que domina la sociedad.
Son una gran imagen para mostrar las ideas del director, porque con él se pueden hacer muchas preguntas. Un robot puede ser una máquina de destrucción despiadada o un defensor. Puede sufrir o fingir sufrir, incluso puede sentirse inferior o superior.
Su desarrollo se remonta al prisma del trasfondo histórico. Las primeras películas trataron el tema de la lucha de clases. Los robots comenzaron a representar una amenaza. Las cosas que no se pueden negociar suponen un peligro para las personas. Poco después, no solo se hizo importante el conflicto entre humanos y robots, sino que también se hizo la continuidad y convivencia entre seres vivos y máquinas. Ahora, la gente a menudo hace la pregunta de quién tiene la responsabilidad de las consecuencias que ya han sido causadas y surge la pregunta de si los seres humanos estamos tomando decisiones equivocadas en relación a los robots.
A menudo se muestran en las películas como objetos que infunden miedo en los humanos. La principal preocupación no son ellos en sí, sino aquellos que dominan la tecnología.
Tecnología y robots
En el contexto del desarrollo de la tecnología moderna, las preocupaciones de la gente sobre la interacción con las máquinas y las cuestiones éticas están aumentando. Sin embargo, la gente todavía puede experimentar o dar a las máquinas una sensación de sentimiento. La serie «Black Mirror» aborda estos temas. La imagen de un robot es diferente de una máquina en la cultura popular.
El sueño sublime de las máquinas vivientes ha despertado la atención de la gente sobre esta contradicción: llamar a una persona «máquina» es algo positivo, mientras que llamarla «robot» es una especie de insulto. En el primer caso, hacemos hincapié en la fuerza, la resistencia y la capacidad de evitar cometer errores. En el segundo caso, le decimos a la persona que su insensibilidad suele ser aterradora.
La historia de los robots de cine se basa en esta base equilibrada. Según los expertos, por un lado, los robots pueden imaginarse como personas ideales. Pero por otro lado tenemos a los de la saga «Terminator» que se deshicieron de la esclavitud, por la fuerza. Estos esclavos decidieron utilizar su libertad recién descubierta para vengarse y encontrar su lugar en el mundo.
Los robots son contenedores de nuestros pensamientos sobre nosotros mismos.
En primer lugar, los robots son contenedores de nuestros pensamientos sobre nosotros mismos. Los seres humanos le dan a las máquinas inertes su mejor calidad, y lo peor se lo deja a ellos mismos.
Estamos preocupados por la insensibilidad y crueldad mostrada por el malvado terminator. El robot ha sido un héroe y villano de película perfecto desde el principio. Al igual que una película, es una imitación de la vida. Los expertos concluyen que los robots son un reflejo de las personas.
Asunto moral
Muchas empresas ahora están produciendo activamente equipos de robots humanoides, muchos de los cuales están trabajando arduamente para evitar una traicionera sublevación contra los humanos. Algo que preocupa mucho a la gente y hace que se sientan incómodos y tengan miedo.
De lo que no hay duda es que todavía faltan muchas paginas por escribir en esta emocionante historia de la robótica, que no ha hecho más que empezar.