La reparación en lugar de la sustitución, esta es la alternativa sostenible que se está expandiendo tras el auge de la tecnología, más concretamente con la creciente demanda de dispositivos electrónicos con conexión a internet.
El Parlamento Europeo ya ha aprobado la ley sobre el ‘Derecho a reparar’, a través de la cual, Europa prohíbe prácticas comerciales como la obsolescencia programada. En este contexto, ANOVO ha decidido fomentar prácticas comerciales sostenibles con el objetivo de evolucionar hacia una industria más consciente y respetuosa con el medio ambiente.
Derecho a reparar
7 de cada 10 usuarios preferirían reparar sus dispositivos antes de adquirir uno nuevo. Pese a ello, lo cierto es que 4 de cada 10 lo sustituyen más de una vez al año.
Para poner fin a esta tendencia, el ‘Derecho a reparar’ pretende acabar con la obsolescencia programada y promover una economía circular donde los dispositivos sean más duraderos y sostenibles.
Reparación de dispositivos en lugar de sustitución, esta es la apuesta de Europa
Regular la reparación
Así pues, para lograr que la reparación se convierta en la primera opción para los consumidores, es indispensable que exista un marco regulatorio que trate aspectos como la durabilidad y la apuesta por los diseños sostenibles.
Esta regulación priorizará reducir sustancialmente el impacto medioambiental que tienen los dispositivos tecnológicos que, según The Shift Project, representan el 4% de las emisiones mundiales de CO2.
Para revertir esta situación, la compañía defiende la importancia de impulsar los servicios de postventa oficiales, “un espacio donde los consumidores deben verse amparados por la garantía ofrecida por el fabricante y por la profesionalidad de un equipo de expertos enfocados en alargar al máximo la vida útil de los dispositivos”.