El programa electoral del PSOE es el más completo de los cuatro en materia tecnológica. Desde el partido de Pedro Sánchez consideran que creen que la innovación tecnológica es uno de los elementos claves.
Valoración de estos últimos 4 años en materia de innovación tecnológica.
Desgraciadamente, han sido cuatro años perdidos con un Gobierno que no ha querido escuchar a nadie. Creemos que la innovación es una de las claves de transformación de este país y, por eso, desde el principio de la legislatura, ofrecimos al Ejecutivo del PP un pacto de Estado para impulsar el conocimiento, la tecnología y la innovación. Sin embargo, no fue posible. Los recortes en materias de Ciencia, Tecnología e Innovación eran inamovibles para el Gobierno e inasumibles para nosotros.
Estamos convencidos de que el país avanza más y más rápido en esta materia cuando se alcanzan consensos y, por ello, negociamos y apoyamos una nueva Ley General de Telecomunicaciones que, gracias a nuestras enmiendas, pasó de hablar de cables a hablar de personas, que introdujo la importancia de la innovación tecnológica en los sectores más innovadores. El Gobierno aprobó está ley para después no cumplirla. La sociedad civil y la tecnología han sufrido en estos cuatro años la inacción del Gobierno y han observado como decrecía el sector, provocando la salida de conocimiento e innovación fuera del país.
En lo referente a las TIC qué aspectos busca potenciar el PSOE de cara a la próxima legislatura?
En primer lugar, apostamos por un desarrollo homogéneo de la digitalización de España. Vamos a impulsar la banda ancha y ultra-ancha pero no vamos a dejar que dependa únicamente de la decisión libre de los operadores, sino que vamos a poner todos los mecanismos necesarios para que, en cuatro años, cualquier persona, sin importar donde resida, pueda tener acceso a 30 Mbps.
Además, vamos a reconocer como derechos la formación digital, la neutralidad de la red o el patrimonio digital, y no vamos a dejarlo, simplemente, escrito en un texto legal sino que vamos a dotar presupuestariamente a estas políticas para que su implantación sea efectiva, logrando que más de un millón de personas tengan conocimientos digitales al final de esta legislatura.
También vamos a impulsar un desarrollo diferente de las ciudades digitales y de la administración electrónica, cambiando el enfoque hacia fuera, hacia el ciudadano, elaborando la innovación conjuntamente, tanto en laboratorios compartidos como abriendo nuestra acción de gobierno.
Vamos a poner a las personas en el centro del futuro, que ya es presente. Sólo podemos elegir si liderarlo o dejar que lo hagan otros en otros lugares.
Fuga de talento, sueldos bajos, becarios eternos…cómo se van a evitar estas situaciones en el sector tecnológico español?
Nuestra acción en esta área va en la línea de dar oportunidades a aquellas personas que tengan una idea y que estén dispuestas a llevarla a cabo. Mediante planes específicos, vamos a dotar a todo el tejido empresarial de una revolución organizativa y tecnológica, que implica que para nuestras empresas la tecnología no sea un gasto, sino una inversión necesaria para sobrevivir y llevar adelante el negocio. Esta política global se particularizará en políticas específicas para el impulso de start-ups, poniendo para ello condiciones adecuadas de financiación y también de mentoring y transferencia de conocimiento. Tenemos como objetivo hacer crecer nuestro sector digital un 50 % más de lo que representa actualmente y poner en marcha más de 1.000 start-ups de base tecnológica. Una vez puestas en marcha estas condiciones, no será necesario que el talento emigre de España por falta de oportunidades, sino que, al contrario, vendrá más talento a nuestro país para participar en esta transformación digital.Y por supuesto, derogaremos la reforma laboral y reduciremos el número de contratos a tres, para que las figuras de los falsos becarios o de los falsos autónomos desaparezcan.
En materia educativa, ¿Cómo se deben formar más profesionales digitales?
Aquí el trabajo debe ir en dos líneas. En primer lugar, los profesionales ya no serán exclusivamente digitales, sino que la digitalización se debe incluir en todos los campos educativos y profesionales. La presencia de la digitalización en el proceso formativo debe ser constante. Por otro lado, la formación constante y la adaptación de los profesionales a los cambios que ofrece la digitalización debe ser impulsada por los poderes públicos de manera permanente. Por tanto, nosotros pondremos en marcha, dentro de nuestra estrategia para la digitalización en España, dos planes específicos: uno para incluir la digitalización en la escuela y en la enseñanza obligatoria, haciéndola habitual desde la más temprana infancia. Este plan estará conjugado con un impulso de las enseñanzas científico-técnicas entre los alumnos de este país y, especialmente, entre las alumnas, porque el talento no tiene sexo y no podemos permitirnos prescindir de la mitad del talento de España. Sobre esta primera base, es preciso destacar que los futuros ingenieros tendrán mucho adelantado porque, además de la curiosidad, los primeros pasos técnicos ya los habrán dado. El segundo plan, de formación digital, buscará la mejora de las cualificaciones técnicas y tecnológicas de las trabajadoras y trabajadores españoles y se pondrá en marcha de forma conjunta con el resto de sectores sociales que quieran involucrarse en este plan. Con ello, queremos que nuestros empleados y empleadores logren refrescar sus conocimientos tecnológicos, mejorándolos y adaptándolos al nuevo modelo productivo al cual aspiramos.
Qué papel deben jugar las administraciones públicas y las empresas privadas en el desarrollo tecnológico de todos los sectores productivos del país? ¿Cuál es la propuesta del PSOE?
El papel de las administraciones públicas es clave. Pero para ello, deben facilitar, promover y ser un aliado en la conversión digital del país. Además de las medidas especificadas en los puntos anteriores, el PSOE propone, en su acción de gobierno, poner en marcha, de forma conjunta con los agentes principales de España, una Estrategia para la Transformación Digital, de la cual emanarán todos los planes que potencien la conectividad global española, los planes de impulso y la transformación digital de la Administración, los planes de conversión, creación e impulso de la transformación digital del tejido económico y los planes de formación y educación de la ciudadanía española.
Con las empresas privadas llegaremos a acuerdos para impulsar su transformación. Sin ellas, al igual que sin los trabajadores, tenemos claro que fracasaría la transformación digital de la economía, una economía basada en el conocimiento. Las empresas privadas estarán con nosotros en el consejo rector de la Estrategia. Ellas serán destinatarias de ayudas a la transformación, con ellas pondremos en marcha consorcios para el impulso de la innovación y aquellas que estén en la cabecera, colaborarán con el Gobierno y otras empresas en el impulso de esa transformación digital, actuando como mentores.
Finalmente, el PSOE alineará a la administración con el conocimiento y la innovación. Pondremos en marcha figuras como la memoria de la innovación, asegurándonos de que ninguna ley ni decreto de los futuros gobiernos supone un retroceso tecnológico. De igual manera, alinearemos las políticas generales de contratación y de impulso del estado de bienestar con la innovación, fomentando figuras como la compra pública innovadora.
Muchas multinacionales tecnológicas se apoyan en la ingeniería financiera para no abonar la totalidad de los impuestos en España. ¿Qué proponen en este sentido?
En nuestro programa llevamos una propuesta para evitar que las empresas multinacionales vacíen sus bases imponibles. Lo haremos a través de la creación de un nuevo Impuesto sobre la detracción de rentas en abuso de derecho que gravaría con un tipo del 35% los beneficios que las empresas sustraigan del control tributario mediante esquemas de planificación fiscal agresiva.