Ha llegado de nuevo ese momento del año en que miramos hacia delante para determinar las tendencias tecnológicas que tendrán mayor impacto en 2016. Jeremy Burton, President, Products and Marketing, EMC, analiza las tecnologías que, en su opinión, marcarán el próximo año. El análisis de datos y nuestro modo de vida digital seguirán transformando el mundo y los negocios.
1: Los negocios digitales, cada vez más relevantes en el mundo empresarial
Los directivos reconocen cada vez más el valor de los negocios digitales y los datos que producen. Aumentará el número de Chief Digital Officers con conocimientos sobre la tecnología más avanzada para obtener productos más inteligentes y crear experiencias de servicio adecuadas para el cliente. Los datos deberán analizarse y utilizarse para lograr ventajas competitivas. Éste no es un fenómeno del sector tecnológico, se trata de un fenómeno de «cualquier sector». Pese a que los directivos saben que les beneficia, siguen inmersos en decisiones sobre organigramas, deberes y guerras de posiciones.
2: Los wearables se llevarán el oro olímpico
Los sensores «ponibles» o wearables irrumpirán para «saltar los obstáculos» en determinados deportes. Los nadadores ya utilizan cámaras sumergibles para analizar la brazada, pero su imagen es bastante limitada. Los nuevos sensores desarrollados para este deporte serán sólo un ejemplo de cómo 2016 será un año innovador en relación con el uso de análisis de datos para lograr el máximo rendimiento por parte de los atletas. Compañías como Nike, que denomina a los datos «la nueva voz del atleta», les ayudarán a utilizar éstos de manera innovadora. Estos dispositivos estarán más presentes que nunca en los Juegos Olímpicos, tanto a la vista como entre bastidores. Veremos sensores integrados en wearables para evaluar a los atletas de élite, desde dietas y patrones de sueño a estilos de carrera y ángulos corporales óptimos, permitiéndoles convertirse en maestros de su propio rendimiento físico. Pero Usain Bolt no va a llevar una Fitbit para competir: para tener impacto, los wearables se adaptarán a las necesidades específicas de cada atleta.
3: Los wearables no igualarán a la medicina personalizada, todavía
Pese al revuelo generado en torno a las Jawbone y Fitbit, los wearables no tendrán un impacto generalizado en la salud personal durante el próximo año. Para que cumplan las promesas en relación con la medicina personalizada, los profesionales sanitarios deberán tener acceso directo y rápido a los datos generados sobre sus pacientes. ¿Se unirán los fabricantes de dispositivos y los médicos para desarrollar la base necesaria? ¿Están los consumidores dispuestos a conceder este tipo de acceso continuado a sus datos biométricos? En mi opinión, los obstáculos culturales suponen una barrera mayor que la tecnología, pero ninguno de los dos aspectos se abordarán de manera que la medicina personalizada se convierta en una realidad en 2016.
4: La red oscura: una herramienta para los criminales en 2015 y una fuente para la seguridad en 2016
En 2015, la cultura popular alimentó la leyenda de la red oscura, el tenebroso «callejón» digital en el que los criminales venden sus bienes ilícitos y en ocasiones contratan sicarios. En términos digitales, la red oscura se denomina así porque no está indexada por motores de búsqueda.
La mayoría de las compañías adoptarán tecnologías para minimizar los riesgos, y lo harán buscando los datos en el lugar al que van tras ser robados: la red oscura. Las herramientas dirigidas por software que rastrean la red oscura para identificar información robada se extenderán en 2016.
5: La realidad virtual traerá el estadio al salón de su casa
Ya se pueden comprar unas gafas de realidad virtual baratas que se adaptan a su smartphone, pero muy pocos las compran. Lo importante es que la innovación en tecnología de realidad virtual y aumentada, principalmente dirigida al entretenimiento, se va a acelerar. Imagine ir a un concierto de rock con un sitio en primera fila y un pase para el backstage, sin ni siquiera salir del salón. Con Rift de Facebook a la cabeza, los consumidores podrán acceder a realidad virtual de alta calidad. Las ligas deportivas y los artistas, con la idea de convertir un estadio para 80.000 personas en uno para 800.000, buscarán la transformación digital para aprovechar esto en su beneficio.
6: El software se come al coche
La energía eléctrica no es la innovación más interesante del sector del automóvil, sino que la más interesante tiene que ver con el software, y más concretamente, con la automatización a través del software. Los potentes fabricantes de coches alemanes y japoneses compiten en una carrera nunca vista para hacer con los coches lo que Apple hizo con los teléfonos. Estoy más convencido que nunca de que todos los coches irán en esta dirección, y el ritmo se verá drásticamente acelerado en 2016. Y no me refiero únicamente a un coche que se conduzca solo, sino a un coche que se conecte con su Wi-Fi al entrar en el garaje, un coche que se actualice con nuevas funciones de manera continuada, un coche que le conozca un poco más cada vez que lo conduzca, un coche que prevea sus necesidades antes de que surjan… Todo esto es posible a través del software… y del análisis de los datos recogidos por el software. En los 10 próximos años, los fabricantes de coches que conocemos hoy habrán desaparecido, engullidos por el software.
