Sophos, compañía de seguridad TI y control de contenidos, acaba de hacer público una nueva edición del informe sobre los 12 principales países emisores de correos basura, los llamados “Dirty Dozen”.
Con datos relativos al primer trimestre de 2009, dicho estudio sitúa una vez más a Estados Unidos a la cabeza del ranking, siendo el responsable de más del 15% de los correos basura recibidos en todo el mundo. En el otro extremo, y, por primera vez en dos años, Reino Unido abandona la lista negra, al igual que Alemania. Todo lo contrario ocurre con Polonia y Colombia, que regresan a este ranking por primera vez desde el segundo y tercer trimestre de 2008, respectivamente.
España escala puestos como emisor de spam
Además de estos casos, junto con Brasil –este último ha experimentado el mayor aumento de todos, pasando del cuarto lugar que ocupaba en el Q1 de 2008 al segundo-, hay que destacar la ascensión protagonizada por España durante los tres primeros meses del año.
Así, con un porcentaje de emisión del 3%, nuestro país pasa de la novena plaza que ostentaba en el último trimestre de 2008, a la octava. Sirva recordar, que en los tres primeros meses de 2008, España ocupaba la undécima posición.
El TOP 12 de países emisores de spam de enero a marzo de 2009 queda conformado de la siguiente manera:
1. Estados Unidos 15,8%
2. Brasil 10,2%
3. China (incluye HK) 7,7%
4. India 5,1%
5. Turquía 4,1%
6. Corea del Sur 3,8%
=6 Rusia 3,8%
8. España 3,0%
9. Argentina 2,8%
10. Polonia 2,6%
=10.Colombia 2,6%
12. Italia 2,3%
Otros 36,2%
«Desde el pasado trimestre, -en el que fue el responsable de casi una quinta parte de todo el spam mundial-, Estados Unidos ha ido reduciendo sus niveles de emisión”, afirma Graham Cluley, consultor de Tecnología en Sophos. «Menos alentador”, continúa “es el caso de Brasil. No es ningún secreto que este país ha estado asociado durante mucho tiempo con el cibercrimen -en particular con la propagación de troyanos destinados a atentar contra bancos-. No obstante, es conveniente matizar que el incremento protagonizado por Brasil, también puede deberse a que China ha reducido su peso en este sentido. En cualquier caso, es una tendencia a vigilar de cerca”, confirma Cluley.
Por continentes, Asia continúa siendo el cabeza de serie, con más de un tercio de emisión de correo electrónico no solicitado. Por otro lado, y aunque Estados Unidos, como país, continúa albergando un alto número de cibercriminales; América del Norte, en su conjunto, ha reducido la emisión de spam desde el último trimestre de 2008, pasando del segundo al tercer lugar.
Por continentes, y en el periodo de enero a marzo de 2009, el desglose de transmisión de spam sería el siguiente:
1. Asia 34,8%
2. Europa 23,6%
3. Norte América 19,4%
4. Sur América 19,0%
5. África 2,0%
Otros 1,2%
El 97% de los correos recibidos en las empresas son spam
El spam supone una verdadera plaga para las bandejas de entrada de los servidores de correo electrónico. Concretamente, un 97% de todo los e-mails recibidos en los servidores de correo empresariales son mensajes basura, lo que repercute en una pérdida de tiempo y de recursos para las compañías.
Utilizado principalmente como un método de venta de mercancías falsificadas o ilegales, casi todo el spam procede de ordenadores infectados de malware (llamados robots o zombis), y que son controlados a su vez por los denominados ‘botherder» (delincuentes cibernéticos).
Y es que, de manera involuntariamente, los usuarios pueden permitir que sus equipos pasen a ser parte de un botnet, simplemente haciendo clic en enlaces maliciosos que, frecuentemente, vienen incluidos en los mensajes de spam.
La única manera de que los usuarios y administradores puedan reducir el riesgo de comprometer sus equipos es a través de la ejecución de herramientas antispam y antimalware, y, asegurándose de que tanto el software como el hardware utilizado esté actualizado.
«El principal problema es que no todos los internautas eliminan los mensajes de spam cuando los descubren», explica Cluley. «Igualmente, se da la circunstancia de muchos usuarios compran aquellos productos comercializados en los correos basura, ya que, de no ser así, los delincuentes que están detrás de los botnets se darían por vencidos o se dedicarían a otra cosa. En este sentido, es necesario advertir que la adquisición de este tipo de productos contribuye a agravar el problema del spam, sin olvidar, el riesgo que supone poner información personal en manos de criminales”, concluye Cluley.