Los marketplaces se han convertido en el siguiente escalón en la venta online para las empresas por los grandes beneficios que consiguen
La pandemia ha transformado el comercio, acelerando la compra online durante los últimos dos años. En 2021, el comercio electrónico en España aumentó un 14,5% respecto a 2020 y generó más de 13.600 millones de euros según los datos de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC). Esta tendencia previsiblemente seguirá al alza durante los próximos años y así lo reflejan las previsiones de EXE, que prevé que las ventas crezcan entre un 30% y un 50% durante este año. Pero este crecimiento es aún mayor en los marketplaces, que crecen al doble de velocidad que los ecommerce, según el Enterprise Marketplace Index.
Los marketplaces se han convertido en el siguiente escalón en la venta online para las empresas por los grandes beneficios que consiguen. Tanto es así que, actualmente, el 39% de los españoles realiza sus compras en este tipo de plataformas y casi la mitad, el 43%, ha aumentado su uso durante el último año según datos del State of Online Marketplace Adoption 2022. Ante esta situación, atSistemas, consultora 100% española de servicios digitales, destaca seis beneficios de evolucionar de un ecommerce a un marketplace.
Escalabilidad y rapidez
A diferencia del ecommerce, un marketplace permite a las empresas gestionar y asegurar transacciones de productos y servicios entre sus clientes y terceros. Es decir, permite que otras empresas puedan vender sus productos en la plataforma del operador, que es capaz, a su vez, de ofrecer una mayor gama de productos a sus clientes sin que esto suponga un coste para la propia compañía. Una mayor oferta de productos en una misma plataforma supone, tanto los usuarios como los vendedores, un gran margen de crecimiento para el operador del marketplace, que solo tiene que velar por la incorporación de más vendedores en su plataforma. Esta escalabilidad también supone una mayor velocidad de entrega y gestión de productos por parte de los vendedores a los consumidores finales y al operador del marketplace, que ahorra tiempos de producción. Esta rapidez es esencial en el panorama del comercio electrónico actual en el que la satisfacción del usuario está ligada directamente con la percepción de la entrega del paquete. Así lo recoge un reciente estudio de CTT Express que demuestra que el 73% de los españoles valora positivamente la compra en base a la calidad en la entrega.
A diferencia del ecommerce, un marketplace permite a las empresas gestionar y asegurar transacciones de productos y servicios entre sus clientes y terceros
Mayor facturación y eficiencia
La transformación de ecommerce a marketplace también supone una mayor facturación para los operadores del mismo, que no tienen que preocuparse tanto por vender un producto y que ahora percibirán ingresos constantes de las empresas por poder operar en su marketplace, así como su posicionamiento en el mismo. Este cambio es sustancial para el operador, que puede centrar sus esfuerzos en mejorar los procesos del marketplace, haciendo del mismo una plataforma más eficiente y efectiva en la que las empresas pueden gestionar los pedidos de los consumidores de una forma más sencilla y rápida. Además, esta evolución también permite a los operadores integrar un mayor número de productos de un amplio abanico de proveedores, aumentando su oferta, haciéndola más atractiva de cara al consumidor final y maximizando sus ingresos por operaciones de los proveedores en el marketplace.
Engagement y competitividad
La oferta de una gama más variada de productos permite a las empresas ser más competitivas en una variedad de sectores. Esta competitividad no solo se aplica a los consumidores directos ya que, según datos de Digital Commerce 360, las ventas de marketplaces B2B serán el 51% de las ventas totales en marketplaces en 2024, por lo que la evolución hacia los modelos de marketplace también serán tendencia en los próximos años en el área empresarial. Esta capacidad de ofrecer una gran variedad de productos en una misma plataforma y a un mejor precio a los clientes favorece el engagement de estos con el operador, ya que los consumidores sienten que pueden hacer de ese marketplace su lugar de compra online referente.