Hoy, 29 de febrero de 2024, en Madrid, se marca un hito significativo en la evolución de la construcción con el surgimiento de la Construcción 4.0. Este avance, destacado por la consultora Catenon, fusiona la industrialización y digitalización para transformar radicalmente la forma en que se construye, abriendo un vasto panorama de innovación en el sector.
Este cambio de paradigma no solo aborda la actual escasez de habilidades digitales entre los trabajadores del sector, sino que también responde a la necesidad apremiante de adoptar tecnologías emergentes. La llegada de nuevas herramientas digitales está redefiniendo los procesos constructivos al permitir una mayor industrialización, lo que conlleva a reducir los tiempos y costos de construcción, aumentar la eficiencia y seguridad, y promover la sostenibilidad, resultando en edificaciones más accesibles para el usuario final.
La industria 4.0 automatiza muchas de las actividades de la construcción, apoya el diseño de los procesos, permite tomar decisiones basadas en datos reales y simulaciones realizadas a partir de modelos digitales
Además, esta revolución tecnológica está atrayendo perfiles especializados en tecnología, rejuveneciendo la imagen del sector y atrayendo a los mejores talentos. Este cambio no solo facilita la transición generacional tan necesaria en la construcción, sino que también prepara al sector para enfrentar con éxito los desafíos venideros.
Según Carmen Caro, responsable de la división de Construcción en Catenon, “este reto abre una gran oportunidad para incorporar talento al sector, con condiciones laborales más atractivas, con entornos que tienen menor carga de condicionantes físicos, climatológicos, localizaciones cambiantes, etc. Permite también incorporar nuevos perfiles más técnicos y acordes a las expectativas de las nuevas generaciones y potenciar la inclusión de las mujeres en la construcción. Además, es clave en un momento importante donde el relevo generacional es una necesidad para el sector.
Construcción 4.0: dos tendencias
La revolución en la industria de la construcción está siendo impulsada por dos poderosas tendencias: la Digitalización y la Industrialización. La primera, centrada en el aprovechamiento de tecnologías digitales, redefine los procesos en todas las fases de un proyecto constructivo.
Desde el modelado de la información de la construcción (BIM) hasta la inteligencia artificial (IA) y el Internet de las cosas (IoT), estas herramientas clave como realidad aumentada (AR) y realidad virtual (VR) están transformando la forma en que se planifican, ejecutan y mantienen los proyectos. Gracias a la IA, se pueden tomar decisiones más acertadas en la planificación y gestión del proyecto, mientras que el IoT permite la recopilación de datos en tiempo real para mejorar el rendimiento y la eficiencia en el lugar de trabajo.
Por otro lado, la Industrialización en Construcción incorpora métodos de fabricación industrializados al proceso de construcción. La prefabricación y modularización de componentes en entornos controlados de fábrica permiten una construcción más rápida, eficiente y económica, con una mejora notable en la calidad y consistencia de los resultados finales.
Esta tendencia no solo optimiza los costos laborales, sino que también impulsa la adopción de materiales y prácticas de construcción innovadoras y sostenibles, así como estándares de calidad y seguridad más rigurosos en todos los proyectos. En esencia, la conjunción de la Digitalización y la Industrialización está marcando un nuevo paradigma en la construcción, caracterizado por la eficiencia, la innovación y el respeto al medio ambiente.
