Pocos son los directivos de empresas norteamericanas los que califican de positiva la Ley de IA europea. A lo sumo, la callada por respuesta suele ser la táctica habitual. Los directivos de Appian, sin embargo, suelen salirse de la norma. En buena medida, porque esta multinacional norteamericana lleva tiempo trabajando con la IA y siempre ha incidido en la importancia de la privacidad de los datos a la hora de alimentar los sistemas y aplicaciones de inteligencia artificial.
Durante la celebración de una nueva edición del Appian Europe, Matt Calkins, CEO de la compañía, no dudó en afirmar que “la Ley de Inteligencia Artificial europea es la norma más importante del mundo en materia de IA. La clave se encuentra en que en Europa hay una mayor conciencia de que los datos pertenecen al propietario original de los mismos, a la fuente de los datos, y no son tanto una mercancía que pueda ser utilizada por otros. Creo que es un instinto muy saludable”.
El máximo directivo de Appian destacó el enfoque europeo ante la IA: “En Europa tienen un enfoque más ilustrado de la IA que en Estados Unidos, donde estamos en gran medida libres de regulación. Y a mi me encanta esta mentalidad. Me gusta la Ley de IA. Creo que Appian tiene más en común con el enfoque europeo de la IA que con el de la costa oeste de Estados Unidos”.
La clave de este pensamiento se encuentra en que Appian siempre ha incidido en la protección de los datos como el pilar sobre el que se debe sustentar el desarrollo de la Inteligencia Artificial. No es de extrañar por tanto que la estrategia de Appian “sea más compatible con esta legislación que otras empresas que están en el negocio de la IA”, aseguró Calkins quien añadió que “la Ley Europea de IA es única en un aspecto fundamental y es que pone la carga de los datos sobre el usuario. En lugar de poner la carga en un fabricante de IA, dice que el usuario es el principal responsable de si la IA utiliza los datos de manera adecuada. Esto es una gran diferencia con respecto a otras leyes como la de California, que fue vetada y que habrían hecho recaer toda la carga sobre el fabricante de la IA”.
Para Calkins una de las grandes cualidades de la ley de IA es que obliga a todos, fabricantes y usuarios, a asegurarse de que la IA se utiliza de forma responsable. “Responsable significa que no hay que perdir a la IA que tome grandes decisiones por sí sola, especialmente en áreas de alto riesgo, sino que siempre debe estar gobernada y supervisada por personas. Esto se denomina harcer un despliegue responsable de la IA. Y Appian está en línea con esa filosofía. Creemos que la mejor forma de hacerlo y de garantizar la calidad se debe basar en la transparencia y en la supervisión humana y la mejor manera de hacerlo es poner la IA en un proceso”.
El evento de los procesos
Appian centró el evento en la importancia que la IA va a tener en los procesos empresariales. La compañía se define así misma como una organización de procesos. “Desde que nacimos no hemos hecho otra cosa que centrarnos en los procesos. Y todas las organizaciones se definen por sus procesos”, aseguró Calkins. La diferencia es que, los procesos evolucionan y es ahí donde quiere situarse Appian: en ser el partner que acompañe a las organizaciones en esa evolución de los procesos: “Normalmente, un proceso no es el mismo que en el pasado y, en el futuro, puedes contar con que será diferente aunque no sepas exactamente cómo. Así que un proceso tiene muchas aristas, muchos usuarios y muchos pasos que dar. Es único y cambia con el tiempo. Fundamentalmente, eso es lo que es un proceso”.
La perspectiva sobre la que se sustenta la filosofía de Appian es que los procesos forjan la reputación de una organización. Por eso es importante que las empresas presten la atención necesaria a sus procesos para que realmente el ecosistema de clientes y partners que rodean a la organización sientan que se les presta una atención personalizada. En palabras de Calkins, “cuando las organizaciones hablan de digitalizar o de reinventar, están hablando de procesos. Es el proceso el que hace la organización y es el proceso el que crea la eficiencia en las relaciones. Por eso decimos que Appian es la compañía del proceso, pero no sólo que vendemos software de procesos. Eso es el principio, pero no el final. La promesa que está implícita en decir que somos la empresa de procesos es que ofrecemos la experiencia completa en torno al proceso. Somos la experiencia, la supervisión, los ejemplos, el historial y, lo que es más importante, la asociación y el compromiso personal”.
Calkins, siempre ha sido un directivo con los pies en el suelo, que comprueba de cerca la realidad que afecta a los clientes. Y no suele vender humo. De hecho, reconoce que no es la compañía más barata. “Me gusta decir que Appian es más una experiencia que un producto. Nuestro objetivo es llevar a los clientes hacia al éxito. Y creo que hemos demostrado un compromiso inusual en este sentido durante los 25 años que llevamos en el negocio. En ningún momento de nuestra historia hemos sido la mayor organización que vendía software para ejecutar un proceso. Nunca. Tampoco somos los más baratos. De hecho, nunca somos los más baratos, pero ofrecemos a los clientes algo extra y es que siempre nos hemos preocupado por llevar al cliente a la línea de meta con éxito. Y creo que eso sigue caracterizando el enfoque de Appian. Tomemos, por ejemplo, el hecho de que todos los clientes de Appian tienen mi dirección de correo electrónico (en ese momento, apareció en la pantalla el e-mail del directivo). Appian está ahí a todos los niveles. Cuando una empresa confía en Appian, tiene una conexión directa con todos los miembros de esta organización, y tenemos ese compromiso inquebrantable de asegurarnos de que el cliente tenga éxito”.
Con esa filosofía y apostando por la privacidad de los datos, Appian incorpora la IA a su plataforma. Durante su presentación, Calkins señaló la importancia que le dan a los datos de los clientes. Su enfoque pasa por adaptarse a la ley de IA europea. “Ya creíamos antes de que se promulgara en este enfoque. La IA no es nada sin datos. Para sacarle partido hay que entrenarla con datos. Muchas empresas tecnológicas lo que quieren es acceder a los datos porque forma parte de su plan de negocio y les permite desarrollar su propia plataforma de IA. Nosotros valoramos más la transparencia, la supervisión humana, el gobierno de los datos y la privacidad de los clientes. Para nosotros los datos no son un negocio”, afirmó el CEO de Appian.
La importancia de los datos
El hecho de que los datos no formen parte de la estrategia de negocio, es sobre ellos donde Appian ha construido uno de los productos más exitosos en la tecnología empresarial en los últimos años: se trata de Data Fabric, una arquitectura de datos que permite unificar, asegurar y optimizar los datos distribuidos en toda la empresa. Esta arquitectura crea una capa de datos virtualizada que conecta datos de sistemas dispares y proporciona una visión unificada de los mismos, lo que además de no tener que migrar esa información, permite el acceso a ellos en tiempo real y mejora el rendimiento de las aplicaciones sin necesidad de tener que realizar ajustes manuales. Tal y como aseguró Calkins, “el último lustro nos hemos centrado en desarrollar Data Fabric, lo que nos ha permitido que, además de ser una firma de procesos, también lo seamos de datos. Data Fabric es nuestra especialidad, y nos permite poner esa capa de base de datos virtual sobre toda la empresa y obtener la información que necesita en tiempo real. Esa es la clave de la diferenciación con otras empresas que aseguran que también poseen una solución como la nuestra. La realidad de estas afirmaciones demuestran que tenemos un gran producto y que, obviamente ofrece un valor diferente al que otros anuncian porque nosotros ofrecemos a los clientes el valor de los datos de toda la organización para que sean accesibles como si fuera una fuente de datos local. Todo parece local y todo se encuentra unificado por un lenguaje semántico común y una capa. Se puede leer y escribir, y el rendimiento se ajusta automáticamente”.
Dentro de ese Data Fabric, la compañía incorporó en abril la herramienta Procces HQ que proporciona a los usuarios una visibilidad completa de sus datos y procesos empresariales. Al estar integrada con el Data FAbric de Appian, las empresas aprovechan al máximo sus capacidades de unificación y análisis de datos a la vez que permite explorar y analizar cómo funcionan realmente los procesos empresariales, identificando posibles mejoras y ahorros. Asimismo, facilita la exploración de datos y la creación de informes y paneles personalizados para responder a preguntas comunes de negocio.
La idea es que el usuario pueda navegar, medir y optimizar sus procesos a la vez y en tiempo real, lo que le proporciona un reflejo real de lo bien (o lo mal) que está funcionando un determinado proceso. Las recomendaciones de mejora, por supuesto, son impulsadas por la IA. La incorporación de esta tecnología es la que posibilita la efectividad y la rapidez con la que se ejecuta Process HQ. Dado que Data Fabric trabaja sobre un conjunto de datos distribuido “el trabajo que realiza Process HQ es mucho más potente de lo que sería si estuviera vinculado a una sola base de datos. Dado que los agentes pueden llegar a toda la empresa y extraer datos de todos los lugares que el tejido de base de datos virtual ha estado tocando, tienes muchos más datos a tu alcance”, explica Calkins. Y dado que trabaja sobre muchos más datos la IA se vuelve más eficaz. Si a este punto a la IA se le proporciona un menú de procesos y subprocesos que pueda poner en marcha, entonces las empresas tienen “un agente mucho más poderoso capaz de hacer cambios más profundos y de mayor alcance sin tener que tomar acciones arriesgadas e improvisadas”, afirmó Calkins.
En este mundo de procesos que describe Appian y para mejorar la plataforma, la compañía acaba de introducir en ella el aplicativo Appian Autoscale que permite a las organizaciones escalar procesos directos de gran volumen, ya sea para gestionar la validación de reclamaciones en tiempo real, la supervisión continua de transacciones, la calificación del riesgo crediticio u otros procesos de alto rendimiento. Con Autoscale, los usuarios pueden escalar fácilmente procesos nuevos o existentes y supervisar su rendimiento con herramientas que ofrecen información sobre millones de instancias de procesos. Un historial detallado de los procesos también ayuda a identificar y resolver problemas rápidamente, garantizando un funcionamiento sin problemas incluso en períodos de alta demanda. El objetivo es que las empresas puedan crear procesos resilientes y adaptables que respondan al instante. Al integrar la IA autónoma que responde de forma autónoma a los estímulos dentro de los procesos estructurados, la nueva solución permite que la IA utilice los datos de forma eficaz. Este enfoque facilita una colaboración sin fisuras entre los sistemas humanos y digitales para impulsar las acciones y maximizar el rendimiento
El mercado EMEA
Appian considera a Europa, Oriente Medio y Africa como uno de los mercados más importantes en su estrategia de crecimiento. Su estrategia y la innovación que poseen sus productos está haciendo que el número de empresas que confían en sus productos sea mayor. Algunos de los principales bancos e instituciones son ya clientes de Appian. El hecho, además, de que su visión sobre la IA se adapte a legislaciones como la Ley de IA europea también está beneficiando a su estrategia. En este sentido, Americo Mazzotta, vicepresidente de ventas para EMEA, aseguró a Byte TI que “el tipo de verticales e industrias son muy similares en toda EMEA, independientemente de la región. Vemos que hay un fuerte crecimiento en el sector público y que hay una fuerte adopción y una fuerte necesidad de automatización en el área de seguros, servicios financieros, así como la cadena de suministro. Este va a ser también nuestro foco de atención el año que viene, y sin ninguna diferenciación, específicamente territorial, porque en cierto modo hay muchos puntos en común. En términos de áreas de crecimiento, hay zonas que están creciendo a un ritmo más rápido que otras. Estamos viendo un fuerte crecimiento en Iberia y en el sur de EMEA. El próximo años nos vamos a centrar mucho en Europa Central, que es un territorio en el que podemos crecer mucho. Asimismo continuaremos potenciando nuestra estrategia en el norte de Europa que ha sido históricamente nuestra mayor fuente de ingresos”.
Pero a pesar de que las necesidades pueden ser parecidas, es en el sector público donde se observan las principales diferencias. Appian siempre ha puesto a las AAPP como uno de sus objetivos prioritarios, sin embargo la estrategia debe variarse y es necesario tener en cuenta la idiosincrasia de cada país. Tal y como explicó Mazzotta, “las necesidades en los sectores públicos pueden ser similares, pero, por supuesto, están muy regulados por las leyes de los distintos países. Por lo tanto, tenemos que darles un nivel de flexibilidad. Creo que una solución potencialmente buena para el sector público italiano no funcionaría para el Reino Unido o en Alemania. Hay requisitos específicos de cada país, requisitos lingüísticos, circunstancias del entorno…”
Y luego está el problema de las licitaciones. En el caso español, por ejemplo, se alargan durante meses lo que en ocasiones provoca que las AAPP no accedan a la última tecnología, Este déficit, Appian lo resuelve con una plataforma base que apenas cambia cuando se produce una actualización. Tal y como explicó a Byte TI Mazzotta, “es cierto que los ciclos de venta son mucho más largos en las AAPP que en el sector comercial. Por eso, nosotros queremos asegurarnos de que estamos dando funcionalidades incrementales a nuestros clientes, pero manteniendo el núcleo de la solución. De esta forma, aunque el concurso público dure 18 meses, las funciones básicas que el cliente ha solicitado en el concurso siguen ahí. No desechamos ni hemos desechado ninguna de las características que son realmente el corazón y el núcleo de nuestras capacidades. Es algo que siempre comunicamos a nuestros clientes”.