Con el objetivo de estimular la innovación y el crecimiento de las economías locales, la Unión Europea ha decidido poner el foco de algunos de sus programas de financiación en la sostenibilidad y la protección del medio ambiente. De esta manera, la Unión Europea quiere financiar e impulsar proyectos que permitan combatir los principales desafíos en materia medioambiental y, al mismo tiempo, apoyar la economía y la innovación tecnológica.
Es el caso, por ejemplo, de LIFE Cersuds. Este proyecto recibió apoyo a través de LIFE, un programa de financiación enfocado en el medio ambiente y en el clima que, desde su puesta en marcha en 1992, ha inyectado hasta 702 millones de euros en distintos proyectos españoles. Otro caso es el de LitterDrone, financiado a través del programa Blue Labs, que se centra en buscar soluciones innovadoras a algunos de los principales retos que ofrece el medio marítimo. Así, ambos proyectos se han beneficiado de distintos programas de financiación para resolver problemas tan acuciantes como la gestión del agua de lluvia, la adaptación de las ciudades al cambio climático o la contaminación de nuestras costas y del medio oceánico.
La Unión Europea ha decidido poner el foco de algunos de sus programas de financiación en la sostenibilidad
Para Lucas González Ojeda, portavoz de la Comisión Europea en España: “Es importante apostar por proyectos que nos permitan avanzar en materia de sostenibilidad y, al mismo tiempo, generen empleo y crecimiento local. Desafíos como el cambio climático o la contaminación del medio marítimo no solo son importantes a nivel medioambiental, sino que causan grandes pérdidas socioeconómicas y comprometen muchas industrias tradicionales, de las cuales dependen un gran número de familias. Mediante diversos programas de financiación, la Unión Europea busca poner solución a estos problemas que nos afectan a todos”.
Unas “mágicas” baldosas que filtran el agua
El primero de estos proyectos, LIFE Cersuds, recibió un total de 986.947 euros del programa LIFE para poner en marcha un innovador Sistema de Drenaje Urbano Sostenible que minimizara los problemas de la gestión del agua de lluvia en las ciudades y el riesgo de inundación. Para ello, se desarrolló un pavimento compuesto por baldosas cerámicas de bajo valor comercial que es capaz de filtrar el agua de lluvia según cae al suelo, teniendo una permeabilidad de entre 8.000 y 10.000 litros por m2/hora.
Con este proyecto, el Instituto de Tecnología Cerámica (ITC) ha sido capaz de dar un nuevo uso a la producción de la industria cerámica española, una de las más importantes a nivel mundial. Gracias a LIFE Cersuds, la Unión Europea ha contribuido a fortalecer este sector a través de una solución que, además, colabora con los puntos 6 y 9 de los Objetivos de Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas: preparar nuestras ciudades para el cambio climático y gestionar de forma más sostenible el agua.
En palabras de Javier Mira, responsable del ITC e investigador de LIFE Cersuds: “La provincia de Castellón concentra el 90% de la producción de baldosas cerámicas en España y, durante la crisis, se generó una cantidad importante de material de bajo valor comercial en stock. Con la financiación de la Unión Europea, hemos puesto en valor todo este material, dándole una segunda vida que nos permite mejorar la gestión del agua de lluvia en las ciudades. Actualmente, estamos redactando anteproyectos para ponerlo en marcha en otras zonas y ciudades, y vamos a desarrollar un modelo de negocio para industrializar la fabricación de este sistema de drenaje sostenible”.
Drones y cámaras de alta precisión contra la basura marina
LitterDrone es un proyecto que, con la colaboración de la Universidad de Vigo, la Asociación Española de Basuras Marinas y la empresa Grafinta, utiliza lo último en tecnología de identificación de imágenes para combatir el problema de la basura marina en nuestras costas. A través de cámaras de alta precisión situadas en drones, han creado un software que detecta y cataloga los desechos de nuestras playas para establecer las zonas de mayor acumulación y sus fuentes, permitiendo poner en marcha planes de acción y de prevención más eficaces.
Mediante este proyecto, que recibió 312.998 € de financiación por parte de la Unión Europea, esperan no solo luchar contra la contaminación que se genera en nuestras costas, sino reducir su enorme impacto socioeconómico. Tal y como indica Fernando Martín, coordinador del proyecto: “La basura marina no solo genera un gran problema medioambiental, sino que tiene un gran impacto en la economía local, afectando a muchas industrias tradicionales. Con este proyecto, esperamos ayudar a las autoridades a tomar decisiones y a desarrollar medidas más efectivas para combatir este desafío”.
De esta manera, LitterDrone también colabora con el punto 14 de los Objetivos de Desarrollo Sostenible, que se enfoca en la protección y conservación de los océanos. La parte final de este proyecto desemboca en la creación de un plan de negocio que permita aplicar esta solución en otras áreas y ámbitos de interés, con lo que se espera que su desarrollo sea mucho mayor.
