Es la eterna discusión. Los empresarios se preguntan por qué tienen que ‘gastar’ tanto dinero en tecnología. La realidad es que el análisis es correcto, mientras lo vean como un ‘gasto’, sea cual sea la cantidad que dediquen, siempre va a ser excesiva. Los empresarios piensan en términos de ‘invertir’, y como tal necesitan saber cuál es el retorno que van a tener de la misma. Si no lo conocen prefieren dejar el dinero en el banco.
Hoy por hoy sigue existiendo una disociación importante entre tecnología y negocio. Los proveedores de tecnología cuentan con unos estupendos argumentarios funcionales, pero desgraciadamente estos no sirven para que el cliente entienda qué valor aporta una determinada solución tecnológica a su operación (negocio). Los ejecutivos de empresas quieren saber de qué manera la solución tecnológica va a impactar en su negocio, y cuantificarlo dentro de su cuenta de resultados. Ese mensaje hoy por hoy no se está dando en la mayoría de las empresas.
Hoy en día existen herramientas potentes que permiten realizar estimaciones sobre el retorno que va a tener una inversión para una empresa. Es bastante habitual que cuando una empresa adquiere una máquina para producir los bienes o para prestar los servicios que luego vende, se haga una estimación del impacto que va a tener en el negocio, y en base a su coste y a ese impacto se tome la decisión de adquirirla o no. Del mismo modo habría que hacer esta estimación para inversiones en soluciones informáticas, cuyo retorno en la empresa puede incluso superar al de los equipos de producción.
En España existen ya empresas que se dedican a hacer este tipo de estudios o a ayudar a las empresas a implementar una sistemática para hacerlos con las herramientas y métodos adecuados. Por ejemplo la empresa Glomark Iberia que lleva más de 2 años establecida en nuestro país, la cual representa a la americana Glomark-Governan Corporation (www.glomark.com). Glomark cuenta con una metodología propia denominada EVCTM (Economic Value Creation – Creación de Valor Económico), que permite mediante un proceso de análisis de creación de valor causa-efecto, donde las causas son las funcionalidades técnicas de las soluciones, las cuales tienen un efecto operativo en las empresas (en reducción o incremento de horas hombre, horas máquina, facturas emitidas, días de cobro, productos en inventario, etc), el cual se puede convertir en unidades económicas utilizando datos sencillos de la empresa o mercado. El valor que crea la tecnología puede variar considerablemente dependiendo del tipo de causa y tipo de efecto. La metodología EVC define los diferentes tipos de causas y efectos para que la valoración sea más fácil y estructurada para la persona que construya un caso de negocio. Así mismo cuenta con la familia Genius de herramientas para todo el ciclo de creación de valor, desde estimar, comparar, analizar riesgos y hasta realizar seguimiento después de su implantación en la empresa. El conocimiento y experiencia de empresas como Glomark en la realización de estudios económicos de retorno de inversión permite eliminar esa disociación, y presentar el impacto de la tecnología en el negocio, no sólo desde el punto de vista funcional, sino también desde la perspectiva económico financiera.
Un estudio de retorno de inversión debe tener en cuenta tres dimensiones, los ahorros de costes (en general son fáciles de estimar), los incrementos de ingresos (implican un mayor nivel de incertidumbre) y los riesgos tanto desde el punto de vista de costes como de ingresos. Curiosamente los riesgos es algo que a todo el mundo preocupa pero que nadie se interesa en considerar su impacto. Pongamos un ejemplo interesante, es bastante habitual que las empresas tomen sus decisiones de inversión en base a los ahorros de costes que se obtengan. Cuando tienen que decidir si van o no a invertir en una solución de seguridad (por ejemplo instalar un firewall o un antivirus) y hacen un análisis basado en ahorro de costes, el Caso de Negocio siempre saldrá negativo ya que la seguridad en ningún caso va a ahorrar costes. Obviamente la toma de decisión en base a ahorro de costes es insuficiente. Los riesgos se deben de analizar en base a lo que ocurriría (o probablemente podría ocurrir) si no se realiza la inversión; ahí es donde se puede ver el valor de la seguridad. Este inadecuado análisis es una de las razones de la precariedad de la seguridad en nuestro país.
La realidad es que en general se piensa que la mayoría de los efectos que produce la tecnología informática en el negocio son intangibles, y por esa razón ni siquiera se intenta medirlos. Uno de los principios de la mencionada empresa Glomark es que no existen los intangibles, y si existen son la excepción que confirma la regla. Ahora bien, cuando estamos estimando el impacto que tiene una funcionalidad sobre el negocio, y esa estimación la hacemos a varios años, lo importante es entenderlo, y estimar la magnitud de ese impacto. Si estimamos que el ROI va a estar en el rango del 100% al 120%, la exactitud de que vaya a ser un 105% o un 107% no debería ser relevante en la toma de decisión. Lo que sí sería relevante es si el rango está entre el 100-120 ó el 30-50. Pero aunque el ROI es un buen indicador, éste por sí solo no es suficientemente relevante para tomar una decisión. Adicionalmente se deben analizar otros indicadores como son el Periodo de Recuperación, el VAN, el TIR en incluso la evolución del Flujo de Caja en el tiempo. Un Caso de Negocio sobre una implementación de una solución tecnológica en una empresa debe tener en cuenta todos estos indicadores, y presentarlos además dentro de un rango de resultados.
En la actualidad las empresas cuentan con un impresionante abanico de tecnologías que pueden ayudar a mejorar sus cuentas de resultados de forma significativa. Por otro lado los suministradores de estas soluciones ofrecen sus soluciones de forma indiscriminada al mayor número de empresas posibles. Esta forma de actuar produce un enorme desgaste por ambas partes y una significativa ineficiencia para los dos; los empresarios están perdiendo oportunidades de mejorar sus resultados y los suministradores están utilizando sus recursos ineficientemente.
El análisis del impacto de las diferentes tecnologías en las cuentas de resultados de las empresas ayudaría enormemente a reducir esta disociación entre empresa y tecnología, y a empujar hacia delante el objetivo que tenemos todos los agentes sociales de desarrollar la sociedad digital.