Son múltiples los retos a los que se enfrenta la movilidad. En el ámbito empresarial, la seguridad parece ser uno de los principales, pero hacer las aplicaciones más intuitivas y similares a las que un empleado se encuentra en su ordenador, también. A lo largo de este artículo intentaremos dar las pautas de los principales retos a los que se enfrentan los entornos móviles.
La movilidad ha pasado a ser uno de los vehículos más potentes de la transformación digital
Una de las claves de la movilidad en los entornos empresariales se encuentra en que ha vivido de lo que los usuarios han demandado. Han sido ellos, los que hicieron que las organizaciones dieran el salto a la movilidad, al ver el éxito que entre ellos tenía el uso de aplicaciones y dispositivos. La movilidad es ya uno de los ejes de productividad de las empresas y principal herramienta de trabajo para muchos empleados. Según la “Décima encuesta mundial sobe el coeficiente digital de las empresas” de PwC, las empresas españolas han mejorado su grado de digitalización (el 56 % de los encuestados lo sitúa como alto o muy alto) hasta ponerse al nivel de los principales países desarrollados y por encima de la media mundial (52 %). La inversión en movilidad ha contribuido en gran parte a esta transformación digital de las empresas españolas hacia modelos más flexibles, abiertos y colaborativos. Son varios los hechos que han posibilitado el despegue de los entornos móviles pero como asegura Daniel González Fernández, Senior Key Account Marketing de MobileIron, “tras años de hablar sobre el trabajo en movilidad, gracias a las velocidades y capacidades de las nuevas comunicaciones 4G y 5G, así como a la madurez de los sistemas operativos móviles, principalmente Android, iOS y Windows 10, podemos decir que las bases son sólidas y con garantía de continuidad. Esto permite a todo tipo de empresa el trabajo en tiempo real y desde casi cualquier localización”.
La movilidad ha pasado a ser uno de los vehículos más potentes de la transformación digital. Está también en el corazón de la innovación. También resulta a su vez el más agradecido, por la complicidad que genera con los usuarios. La mayor parte de las empresas están otorgando prioridad a las inversiones en movilidad en el horizonte 2017-2018. Según IDC, tan sólo en Estados Unidos el número de empleados “100% móviles” alcanzará los 105 millones de personas en el año 2020. Y es que tal y como afirma Elías Gargallo, Mobile Business Development Manager Oracle EMEA, “La industria de la movilidad se encuentra en crecimiento en el ámbito empresarial. La movilidad es una necesidad a la hora de conectarse con los clientes; cada vez más la movilidad es exigida y deseada por los empleados, pero es todavía una necesidad que pocas empresas realmente han cumplido. Normalmente, las empresas todavía tienen muy pocas aplicaciones móviles, pero se pueden encontrar muchísimos casos de uso que a nivel empresarial podían ser implementados”. El nuevo cambio en la movilidad es la llegada de interfaces de conversación a través de ChatBOTs. Esto proporciona un medio más simple y económico para proporcionar funcionalidad de apps mediante plataformas de mensajería de terceros (por ejemplo, Facebook Messenger, Slack) o incrustando una interfaz de chat en aplicaciones móviles o en la web o en dispositivos de audio chat como Amazon DOT o Google Home. El portavoz de Oracle afirma que “las plataformas ChatBOT también abren un nuevo canal para interactuar con los clientes. La mayoría de las empresas tienen una estrategia móvil y que están ejecutando, pero disponen de recursos escasos para satisfacer la demanda. La mayoría de los clientes están empezando a ver el potencial de ChatBOTs y buscan elaborar una estrategia”.
Productividad
Uno de los apartados que más se suele esgrimir a la hora de que una organización apueste por incorporar la movilidad a su filosofía empresarial pasa obligatoriamente por el incremento de la productividad. Gracias a los entornos móviles, el usuario está conectado de forma conectado. Sin embargo, ese supuesto incremento de la productividad no siempre es así, porque por ejemplo, uno de los aspectos que no producen los rendimientos pronosticados es el hecho de que una determinada aplicación no se parece en nada a la solución con la que habitualmente trabaja en la oficina. También el hecho de que muchos dispositivos no cuentan con una seguridad adecuada, con lo que no sólo no se incrementa la productividad sino que además se pone en riesgo información sensible de la empresa. En este sentido, Alfonso Ramírez, director general de Kaspersky Lab, afirma que “el poder trabajar desde cualquier dispositivo y lugar, ahorra tiempo, favorece la conciliación y agiliza procesos, ente otras muchas cosas. Lo que las empresas no pueden olvidar es que deben proteger todos los dispositivos desde los que se acceda a la información corporativa para evitar que los ciberdelincuentes accedan a la red de la empresa a través de esa vulnerabilidad”.
La productividad, se incrementa de forma clara con la movilidad. El problema es que en la mayoría de las ocasiones, las empresas no realizan una estrategia previa de lo que quieren conseguir. Ángel Zuate Suárez, Principal Product Marketing de Exact, asegura que, “vivimos en un mundo de apps que permiten redefinir las relaciones y procesos en los negocios. Ejemplos como el acceso a datos en tiempo real, flujos de trabajos online o colaboración con terceros en la nube están influenciando profundamente en la productividad de las empresas de manera cuantitativa: la rentabilidad media cuantificable a las inversiones realizadas en iniciativas móviles en nuestro mercado profesional se sitúa alrededor del 60-70%”. Por su parte José Antonio García, responsable de movilidad de HP España cree que “El poder trabajar en tiempo real cuando estás en campo, acceder a la información y poder retocarla al momento, independientemente de donde te encuentres, es sumamente productivo. Por ejemplo, el ser capaz de utilizar el dispositivo móvil, en vez de tomar datos a mano realizando un OCR de un documento, o que los empleados estén geolocalizados y saber quién está más cerca para ir a resolver una incidencia o quién puede gestionar más rápidamente una recogida”., Jorge García, Responsable Centro Especialización de Movilidad Avanzada de Connectis, “es indudable que hay ciertas tareas de naturaleza móvil, que ejecutadas en campo dotan de la máxima fiabilidad a un proceso y cuando además existe un proceso de digitalización reducen los errores y nos dan percepción de tiempo real a nuestra actividad operativa o empresarial”.
Una de las claves de la movilidad en los entornos empresariales se encuentra en que ha vivido de lo que los usuarios han demandado
Susana Gilabert Directora Marketing & Comunicación Grupo Econocom afirma que “los dispositivos móviles junto a los portátiles nos permiten trabajar en todo momento y en cualquier lugar, sin límite ya que podemos acceder de manera on-line, a las aplicaciones corporativas como si estuviéramos en nuestro puesto de trabajo físico. La ventaja fundamental es es el acceso a la información permanente y disruptiva, la capacidad de solventar una incidencia con tu cliente sin necesidad de desplazarte. La movilidad ha cambiado la manera de comunicarnos. Hoy no se concibe una empresa sin dispositivos móviles, aunque es evidente que hay que implementar una política de movilidad para garantizar el uso de esos dispositivos a nivel corporativo y garantizar la seguridad de los datos.
Adaptar las soluciones
Como hemos dicho, uno de los retos principales que tienen las empresas es la de adaptar sus soluciones tradicionales de escritorio a los dispositivos móviles de sus trabajadores. Una estrategia de movilidad empresarial exitosa no implica tener todos los sistemas corporativos en el móvil. Se trata de crear apps móviles simples, fáciles de utilizar que simplifiquen un trabajo determinado o un proceso, y que también se conecten a la red corporativa a través de la nube. El mayor impacto radica en cómo las grandes empresas adaptan el interfaz de sus sistemas empresariales a la nueva realidad. El cambio no es estético: es una oportunidad para dotar a estos sistemas de la potencia que otorgan los nuevos móviles y sus tremendas capacidades (mejores cámaras, geolocalización, identificación biométrica, etc.), así como acompasar estos sistemas al nuevo mundo cognitivo. Sistemas inteligentes, que aprenden en cada interacción. Joan Ramón Mallart, Responsable de movilidad en IBM SPGI afirma que “la idea es que esas apps mejoren la productividad dando respuesta a un problema de negocio concreto o a mejorar un proceso determinado. Si se alinean los ingredientes adecuados, como son un buen diseño de experiencia de usuario, el sacar el máximo partido de las capacidades del dispositivo, e integrarlo de manera adecuada con los sistemas transaccionales, el resultado son apps que potencian el trabajo del profesional. El último ingrediente, la capacidad de dotar a estas aplicaciones de inteligencia cognitiva, es lo permite otorgar un salto diferencial al uso que el empleado hará en su día a día”. El camino empieza por un caso de uso y cómo resolver los retos de un profesional en su ámbito de actuación. En este sentido la calidad del diseño de la app es vital y en nuestro caso ponemos en valor la simplicidad, el diseño, la interactividad con los procesos a la hora de desarrollar soluciones móviles de una forma rápida. Además, es preciso que la app sea inteligente y dé la información precisa. Para ello las empresas requieren servicios de integración que aseguren que esas apps móviles están conectadas de forma segura a sus sistemas, permitiendo la sincronización. Mallart afirma que “poco a poco se irán transformando, se harán más sencillas pero paradójicamente más potentes. El secreto radicará en sacar más partido de la enorme cantidad de datos disponibles en el cloud y potenciar la complementariedad entre ellas: APPs que colaboran entre ellas”.
El portavoz de MobileIron asegura que “la mayoría de las nuevas soluciones ya se desarrollan pensando en entorno de trabajo móvil. El problema radica en las soluciones tradicionales. Estas no estaban pensadas para trabajar en movilidad, por lo que generalmente, cuando se movilizan, se suelen dejar muchas fisuras de seguridad que comprometen la integridad de la compañía. Esto requiere la utilización de plataformas de seguridad y gestión externas a la solución de negocio que estamos movilizando”.
Las empresas tradicionales de software se han ido adaptando a la nueva realidad para que sus soluciones se adapten a la nueva realidad. Desde Sage se apunta que “la mayoría de las nuevas soluciones ya se desarrollan pensando en entorno de trabajo móvil. El problema radica en las soluciones tradicionales. Estas no estaban pensadas para trabajar en movilidad, por lo que generalmente, cuando se movilizan, se suelen dejar muchas fisuras de seguridad que comprometen la integridad de la compañía. Esto requiere la utilización de plataformas de seguridad y gestión externas a la solución de negocio que estamos movilizando”. Desde Exact, otra de las empresas que también se encuentra en proceso de adaptación, “Aunque depende del fabricante, en general, están en proceso. Podemos encontrar ejemplos en el mercado de soluciones que han sido diseñadas teniendo en cuenta la movilidad desde sus bases, mientras que otras han ido añadiendo servicios conectados alrededor de la solución que ayuden al usuario en ciertas situaciones”.
El hecho de que las aplicaciones móviles no se encuentren adaptadas al 100% supone que, como afirman desde Commvault “en muchas ocasiones no se da una repuesta corporativa a una necesidad real de los usuarios. De hecho esa es una de las razones por las que dichos usuarios recurren a herramientas públicas de compartición de archivos, porque tienen una necesidad a la que su organización no da respuesta. Lo que recomendamos desde Commvault es que las organizaciones empiecen a ofrecer este servicio a sus usuarios con herramientas corporativas, controladas, tan fáciles de usar como las públicas, y en las que la información esté indexada y controlada en todo momento. De esta manera el usuario empleará las herramientas corporativas, porque son igual de sencillas de usar que las de fuera”.
Los retos
Asumida la movilidad como un elemento esencial a la hora de incorporarla a la estrategia empresarial, está claro que los entornos móviles se encuentran ante diferentes retos. Preguntamos a varias empresas cuáles son esos desafíos. Desde Samsung creen que “el principal desafío para las empresas será alcanzar el equilibrio entre seguridad y privacidad. El 43 % de los responsables de negocio en Europa reconoce, de hecho, que proteger la privacidad de los empleados será un reto crítico para las empresas en los próximos tres años. Con el desarrollo de la Economía Abierta, las empresas colaborarán incluso con sus competidores, además de las startups y los trabajadores freelance, para impulsar la innovación. Por ello, necesitarán plataformas de seguridad personalizables que cubran todo el ecosistema de dispositivos y les permitan colaborar sin riesgos”. Por su parte, el portavoz de MobileIron asegura que “actualmente se trabaja mucho con los inputs del propio usuario de la aplicación móvil. El gran reto se presenta con la incorporación a cualquier proceso de la llamada IA (Inteligencia Artificial). El usuario del puesto móvil tendrá que adaptarse a este nuevo formato de trabajo, donde el sistema de IA dirigirá y ayudará al usuario a la hora de tomar decisiones. Otro gran reto es el trabajo desde casa o en movimiento. La mayoría de las tareas se podrán realizar sin pasar por la oficina, por lo que herramientas de video-conferencia, compartición de documentos, etc, tendrán cada vez más importancia. El dominio de este tipo de herramientas está haciendo ya que los usuarios tengan que adaptarse a una nueva forma de entender el trabajo diario”.
Susana Gilabert de Grupo Econocom considera que el principal reto de los entornos móviles se encuentra en la flexibilidad. También en la capacidad de adaptación e innovación. Para esta directiva “es muy importante rodearse de un integrador que tenga la capacidad y conocimiento de ese ecosistema de partners con conocimiento multidisciplinar necesario para el diseño e implantación de soluciones”.
El problema es que muchas veces, las empresas no ven ventajas en subirse al carro de la movilidad. En ocasiones se ven obligados a adoptar determinadas soluciones bien porque lo hacen sus competidores o bien porque se trata de estar a la última. Esto es un craso error por eso el responsable de HP considera que el principal reto que tiene la movilidad es “el convencimiento de las compañías en ir a ella. A día de hoy, los clientes disponen tanto a nivel hardware como software y conectividad, de los suficientes recursos como para poder asumir el reto de la movilidad. Pero falta una clara estrategia y voluntad de los consejos dirección de las compañías, de los emprendedores o de los dueños de las empresas en entornos más pymes, de adoptar esas nuevas tecnologías. Tener una mayor voluntad hacia el cambio y eliminar ese miedo inicial es lo más importante para que pueda ser una realidad”.
Una de las asignaturas pendientes de muchas organizaciones sigue siendo el cómo deben organizarse y dotarse de equipos y medios para afrontar con garantías un proceso de transformación digital con la movilidad como protagonista. Para el portavoz de IBM, “en los últimos años las empresas han visto como las apps se han convertido en el medio de interacción por defecto con clientes, empleados y socios comerciales. Pero cada una de las unidades de negocio han atendido esta necesidad de forma individual, creando un panorama fragmentado de apps corporativas, con experiencias de usuario inconsistentes y sobretodo, una alta ineficacia en las labores de integración. Todo ello ha resultado en despliegues costosos, manuales, casi artesanales. Desde IBM apostamos por una propuesta denominada Mobile at Scale, que permite a la organización dotarse de servicios avanzados de movilidad, brindando experiencias de usuario coherentes a menor coste, mayor velocidad y reduciendo la complejidad en el backend de las empresas. Los resultados se hacen manifiestos: hasta un 60% de reducción de costes en el desarrollo de una app, un 33% de reducción del time-to-market y una mejora del 45% en productividad”.
Seguridad
Este es quizá el apartado que más empieza a llamar la atención por parte de las organizaciones. El número de ataques se incrementa día a día independientemente del dispositivo que se utilice y la empresas han empezado a considerar que “el smartphone no es un móvil”. Como hemos dicho cuando se apuesta por la movilidad, la seguridad tiene que estar en un lugar prioritario dentro de la estrategia empresarial.
Desde Kaspersky Lab consideran que es necesario contar con una plataforma de seguridad capaz de proteger todos los dispositivos desde los que se acede a información de la empresa y los empleados deben ser conscientes de los riesgos. La prevención es imprescindible porque los gastos derivados de la mitigación pueden ser muy altos a nivel económico y de reputación, una vez el ataque ya se ha perpetrado. Además, es fundamental seguir las siguientes recomendaciones:
1) La integración del BYOD debe considerarse como un proyecto específico. Desde el primer momento las empresas deben establecer un plan de movilidad y no improvisar según vayan surgiendo los problemas. Esto incluye la seguridad como elemento fundamental en este plan.
2) Es necesario proteger los dispositivos móviles a través de una solución integral que garantice la seguridad de toda la red corporativa de la compañía. Sin la implantación de estas soluciones pueden surgir problemas de compatibilidad, además de crear un trabajo extra para los administradores de sistemas.
3) Las empresas necesitan desarrollar una estrategia para eliminar los dispositivos personales o empresariales de la red corporativa así como los datos almacenados en caso de extravío o robo, o si un empleado deja la compañía. Para eliminar los datos corporativos confidenciales y bloquear el acceso a la red corporativa, las empresas deben adaptar sus políticas de seguridad a esta nueva situación. Por otro lado, los trabajadores deben concienciarse sobre la necesidad de proteger todos sus dispositivos tecnológicos con conexión a Internet con una solución de seguridad actualizada.
Desde ESET creen que para empezar, el dispositivo debería contar con algún tipo de solución de seguridad para evitar que se vea afectado por alguna de las muchas amenazas existentes. Seguidamente se debe cifrar el disco o las carpetas más críticas para impedir que un atacante pueda acceder a la información confidencial de forma sencilla. Además el dispositivo debería estar protegido por alguna medida de seguridad (login, pantalla de bloqueo…) que evitase el acceso a otro tipo de usuarios que no sea sus legítimo propietario mediante una contraseña robusta o sistemas de autenticación biométrica y, si pueden estar acompañados de doble factor de autenticación, mejor.
“También se debería contar con una conexión VPN a la hora de acceder a los recursos de la empresa en remoto y, por último, disponer de algún sistema que permita localizar el dispositivo en caso de pérdida o robo y, si es necesario, eliminar remotamente la información almacenada en el mismo. Hoy en día, muchas de estas medidas de seguridad se incluyen en los antivirus, por lo que se pueden gestionar desde un único punto”, concluye Josep Albors, responsable de concienciación e investigación de ESET España.
Finalmente Jesús Muiño Barreiro, Director Comercial de Qualiac asegura que “la mitad de las empresas siguen creyendo que la seguridad es el principal problema para desarrollar una estrategia móvil en la compañía. Uno de los principales motivos sigue siendo la formación de los usuarios. La tecnología y los procesos deben impedir que los usuarios realicen acciones no seguras pero el propio usuario debe tener conciencia de porqué no debe intentar hacerlas. Hay que asegurar la seguridad extremo a extremo en los procesos. Verificar que desde el acceso del usuario final con su dispositivo hasta el lugar donde residen los datos no existen fallos de seguridad. Todas las medidas encaminadas a este fin deben ser prioritarias”.