La importancia del papel del asesor para impulsar el crecimiento y la competitividad del tejido empresarial es innegable. En un contexto marcado por la constante actividad normativa y por la inmediatez de los cambios regulatorios, la figura del asesor se posiciona como un aliado indispensable para las pymes. Pero, más allá de la gestión normativa, y respondiendo a los desafíos del entorno económico actual, los asesores han evolucionado para convertirse en asesores globales que colaboran estrechamente con las empresas para promover su desarrollo y, de un tiempo a esta parte, también su transformación digital.
Según datos del Barómetro de la Asesoría 2023, el 35% de los despachos profesionales considera que su rol está cambiando para adaptarse a una nueva figura de consultor global. De hecho, este estudio que impulsamos desde Wolters Kluwer para obtener una radiografía del sector, indica que el 49% de los asesores prevé que en un futuro muy próximo (dos años), habrán podido centrar su actividad en temas de asesoramiento gracias a la tecnología.
La digitalización se ha convertido en un imperativo para la supervivencia empresarial. Los despachos profesionales, conscientes de esta realidad, no solo se están adaptando internamente, sino que actúan como impulsores y motores de innovación para la digitalización de sus clientes. Así, resulta fundamental destacar el valor fundamental que aportan los despachos profesionales al tejido económico y empresarial: más allá de gestionar las obligaciones normativas, actúan como socios estratégicos que guían a las empresas en su viaje hacia el crecimiento. En el siglo XXI, los asesores no solo alivian la carga administrativa de las pymes, sino que también les proporciona las estrategias y herramientas necesarias para prosperar en un entorno cambiante.
Resulta fundamental destacar el valor fundamental que aporta el despacho profesional al tejido económico y empresarial
El impulso de la Administración pública hacia la digitalización de procesos constituye, asimismo, un reto más para las pymes. El 58% de los despachos profesionales considera que la digitalización de la Administración les obliga a proporcionar un mayor asesoramiento y dedicar menos tiempo a gestiones mecánicas, según datos del último Barómetro de la Asesoría publicado. En este sentido, contar con un despacho profesional que lidere los cambios asegura a las pequeñas y medianas empresas una adaptación rápida, fiable y segura a los nuevos trámites normativos.
El rol del despacho profesional como socio estratégico es ya una realidad y refleja la evolución constante y la capacidad de adaptación de las asesorías, con un enfoque consultivo que va más allá de las funciones tradicionales. Hoy en día, la figura del asesor moderno es esencial para garantizar el éxito continuo de las empresas en la era digital. El valor añadido que aportan los despachos profesionales como socios estratégicos no puede ser subestimado, ya que actúan como catalizadores del crecimiento y la innovación empresarial, identificando oportunidades y ofreciendo soluciones personalizadas.
En un entorno empresarial cada vez más desafiante y competitivo, los despachos profesionales destacan como pilares fundamentales del éxito empresarial, creando sinergias que impulsan un futuro empresarial más sólido y orientado al éxito de los negocios. Así, gracias al nuevo rol transversal de los asesores, la alianza estratégica de las pymes con los despachos fortalece su posición en el mercado y sienta las bases para un futuro empresarial más fuerte y cohesionado.
Por Manel Peralta, Product Strategy Director en Wolters Kluwer Tax & Accounting España