Hace casi un año que Alfredo Yépez accedió al cargo de vicepresidente senior y director general de Latinoamérica y sur de Europa y presidente y consejero delegado de HPE España. Hablamos con él sobre los retos a los que se enfrenta HPE.
Aunque ya lleva casi un año en el cargo me gustaría conocer, ¿cómo llegó Alfredo al mundo de la tecnología?
Llevo en HPE 33 años. Soy ingeniero de sistemas. Y justamente cuando empecé en la que antes se llamaba Hewlett Packard Company, me formé en el área técnica. Fui ingeniero senior de campo y eso de alguna manera me permitió formarme en el área técnica. Es en el momento en el que llegué al mayor nivel de especialización como ingeniero de campo, cuando la compañía me ofrece una posición que me permitió enfocarme más al área de negocio.
Lleva en su posición actual casi un año, un cargo que incluye vicepresidente senior y director general de Latinoamérica, sur de Europa y además presidente y consejero delegado de HP España. ¿Vive Alfredo Yepez en un jet-lag permanente? ¿Cómo se compagina en tantas subsidiarias y con diferentes usos horarios?
Tanto como un jet-lag permanente no, pero sí en un avión permanente. Tengo acumuladas unos tres millones de millas desde que empecé a volar por mi posición en HPE. Es decir, he dado la vuelta al mundo unas 120 veces. Al final te acostumbras.
Mi cargo conlleva la dirección de aproximadamente 52 subsidiarias presentes en otros tantos países. La mayoría de ellos están en Latinoamérica. En el sur de Europa tengo la responsabilidad sobre Grecia, Portugal, Israel, España y Italia.
HPE era una empresa básicamente de producto y ahora es más bien una empresa de servicios en la que estáis centrados en vuestra plataforma GreenLake, que ocupa el espacio central de la estrategia. Dos preguntas. ¿Quién o qué ha cambiado? ¿Las necesidades de las empresas o la estrategia de HPE? ¿O ambas?
Yo creo que han sido ambas. Hemos visto como tendencia en la industria, la adopción de entornos híbridos de nube, lo cual, en cierta, forma forzó a HPE a rediseñar su estrategia y convertirla en una empresa que tiene la posibilidad de comercializar los productos en ambas modalidades. Es decir, aquellos clientes que de alguna manera quieran adquirir las plataformas o la tecnología en modalidad as a service, lo pueden hacer y consumir a través de la plataforma HPE GreenLake. De la misma forma, entendemos que todavía hay una cantidad de clientes o industrias o empresas que también necesitan o desean adquirir sus soluciones de tecnología en la modalidad tradicional, con lo cual ambas están disponibles para los clientes con HPE. Y ahora que vienen nuevas tendencias creo que eso va a forzar también a que haya un balance más ecuánime entre lo que son las adopciones de soluciones de Cloud y las que están basadas en modalidades de gasto de capitalización.
Y esto tiene que ver con la adopción de la inteligencia artificial, que está forzando de alguna manera a que este tipo de soluciones estén mucho más cerca de los centros de datos donde el dato es prioritario. Todo ello está forzando a algunas empresas a que tengan que tener las soluciones desde sus propios centros de datos y no en las nubes, por todos los efectos de seguridad, latencia, etcétera que son imprescindibles para ellos.
¿Cómo ven la nube en HPE?
Nosotros vemos la nube no como un como un destino, sino como una experiencia. Lo que ha hecho HPE al ofrecer diferentes modelos es dar a los clientes lo que estaban buscando. La nube es una experiencia porque significa gestionar tu centro de datos de una manera mucho más automatizada, de una manera mucho más flexible y siempre teniendo el control. Esa es la diferencia de lo que nosotros ofrecemos a través de la plataforma HPE GreenLake frente a lo que puede ser el Cloud Público. Nuestro mensaje siempre ha sido que la solución es ideal o de facto para los clientes se encuentra en un entorno híbrido, porque entendemos que hay ciertas cosas que por efectos de economía de escala es más beneficioso que estén en ambientes de cloud público, pero hay otro alto porcentaje de transacciones y de soluciones de cargas de trabajo que es más conveniente que estén en ambientes de cloud privado.
«Lo que ha hecho HPE al ofrecer diferentes modelos es dar a los clientes lo que estaban buscando»
Es curioso porque muchas empresas, sobre todo más bien medianas, más que las grandes, cuando se les habla de cloud, tienden a pensar en hiperescalares, tipo Amazon, Google o Microsoft. ¿Cuáles son las ventajas que proporciona a la GreenLake de HPE con respecto a estos hiperescalares?
La diferencia radica mayormente en la predictibilidad que tiene el cliente al tener el control total de su plataforma y de la forma de cómo lo gestiona a través de la plataforma de HPE GreenLake. Nosotros, incluso en esos entornos de cloud híbrido, fomentamos también la conectividad o la delegación de ciertas operaciones hacia entornos de cloud público. Esto es algo natural. De hecho, en HPE también hacemos uso de ciertas soluciones que están en ambientes de cloud público. Por eso siempre nuestro mensaje, nuestro lema ha sido el de fomentar la nube híbrida. Pero, si se quiere, cuando uno analiza lo que ha sucedido en la nube pública, aquellos clientes que han decidido repatriar sus aplicaciones hacia ambientes privados, tiene que ver con la falta de predictibilidad en lo que son las facturas que ellos reciben a consecuencia de los servicios públicos que contratan en la nube pública. Este hecho les ha provocado cierto temor y los ha forzado a repatriar sus aplicaciones hacia ambientes de cloud privados. Y esto es lo que refuerza nuestra estrategia o nuestro mensaje de que las organizaciones lo que quieren es conjugar la experiencia que les brinda el cloud con las ventajas que tienen los modelos más tradicionales.
Digamos que quieren tener el control…
Justamente. Lo que quieren es gestionar su plataforma de forma flexible, teniendo un control total, con el acceso a los datos, con la soberanía de la información residente en sus centros de datos, más que mover las aplicaciones hacia un entorno donde ellos no tienen ni el control de la infraestructura o de los datos y mucho menos de la facturación que ellos están recibiendo de manera de manera mensual. Con HP GreenLake, los clientes tienen la visibilidad total y el control absolutamente de todo y eso es lo que marca la mayor diferencia.
Habla de repatriación, pero uno de los problemas que tienen muchas empresas que abrazaron el cloud y se unieron a estos hiperescalares, es precisamente la dificultad para repatriar y mover todo lo que tienen a otro tipo de nube como puede ser HPE GreenLake. ¿Cómo les ayudan en HPE a poder ejecutar esta migración?
Sí, en muchos casos están cautivos y eso es lo que nosotros queremos resolver. Con los hiperescalares, prácticamente el cliente queda condenado o bloqueado a consumir allí y de alguna manera, ahora están tratando de liberarse. En HPE, a través de nuestro departamento de consultoría, les apoyamos para que estas migraciones se hagan de manera transparente, de manera sencilla. Además, nosotros les hacemos ver a los clientes que no todo tienen que repatriarlo.
Es cierto, que la migración de cargas puede ser bastante compleja para el cliente, pero HPE analizamos el entorno de la organización, organizamos sesiones de trabajo que hacemos en conjunto con los clientes para determinar cuáles son las aplicaciones o las cargas que pueden ser repatriadas, cuáles son las implicaciones que puede tener la migración y cómo pueden compartir un determinado aplicativo en un entorno híbrido. Para ello analizamos las ventajas que ofrecen ambas plataformas, la que proporciona el cloud público y la que proporciona el cloud privado.
Estamos en un mundo ahora mismo en el que las tendencias tecnológicas se multiplican como no había pasado nunca. Tenemos inteligencia artificial, analítica de datos, computación cuántica… ¿Cuáles cree que van a ser las principales tendencias en el medio plazo y qué papel que va a jugar HPE en este futuro tecnológico?
Lo más importante tiene que ver con todo lo que está sucediendo con inteligencia artificial. Yo creo que es una de las tendencias de mayor aceleramiento que hemos visto en los últimos años, inclusive es mucho más rápido que la misma adopción del cloud cuando el cloud nació. En este sentido creo que HPE está muy bien posicionada para facilitar la adopción de la IA. ¿Y a qué me refiero? Primero, hay que tener en cuenta la importancia que, en torno a la Inteligencia Artificial, siempre miramos la parte regulatoria y en HPE consideramos que inteligencia artificial es algo que puede producir un beneficio para la humanidad, pero siempre que esté bien regulada.
