Más de la mitad de la información personal de la población mundial está disponible en la Red Oscura debido a infracciones masivas de datos, lo que convierte en obsoletos los métodos tradicionales de verificación de identidad y alienta a actividades delictivas. Entrevistamos al vicepresidente de Mitek, compañía especializada en verificación digital de la identidad (IDV). La rapidez con la que el cibercrimen se reinventa para acceder, mediante la usurpación de la identidad digital, a datos personales de usuarios de todos los ámbitos, impone que el de la fiabilidad del canal digital sea un imperativo para todos los operadores, que son cada vez más, tanto del ámbito público como del privado, cuyo negocio o plataforma depende de información personal de los clientes y usuarios.
¿Qué es la identidad digital?
Hoy en día, todos tenemos una identidad digital. Quizá más o menos controlada, pero nuestra actividad deja una huella en internet y la vincula de forma irrevocable a nuestra identidad física, cualquier perfil personal o profesional, los contenidos digitales que publicamos, nuestros contactos, email y teléfono, e incluso las transacciones electrónicas que realizamos. El rastro puede ser más o menos accesible, pero está ahí.
Obviamente, esta identidad digital también tiene, un lado oscuro. Cualquier persona puede crear diferentes identidades en internet, o bien, suplementar la identidad de otra a partir de la información que pueda encontrar en la red, por no hablar claro, del robo de datos personales, financieros, etc.
Por ese motivo, no es extraño que uno de los principales retos del sector financiero sea la identificación y autenticación fiable de los usuarios en sus procesos de onboarding, o bien, en la solicitud de créditos o financiación online.
Los sistemas de verificación de identidad digital evolucionan a un ritmo cada vez más vertiginoso
¿Sabemos los usuarios qué es la identidad digital?
Aunque parezca que no, cada vez somos más digitales. La penetración del uso de tecnologías móviles se está diversificando y tenemos más presencia online porque dedicamos muchísimas horas estar conectados. Lo que quiero decir, es que somos digitales y hay un grado de consciencia de que dejamos una huella cuando interactuamos y de que creamos una identidad virtual.
¿Cómo se protege la identidad digital?
Los sistemas de verificación de identidad digital evolucionan a un ritmo cada vez más vertiginoso. Las nuevas soluciones no se limitan a autenticar el documento y sus medidas de seguridad, y a realizar un matching de este con la persona. Se comprueba también que la persona exista con una prueba de vida o liveness, que mediante un filtro de vivacidad es capaz de distinguir si se trata de la persona real o una fotografía a través de ciertos movimientos.
¿El riesgo de fraude es cada vez más elevado?
Sin duda, la inversión en seguridad digital por parte de las empresas cada año crece pero también por eso las soluciones de verificación digital ofrecidas por Mitek frena considerablemente este riesgo.
Teniendo en cuenta la gran cantidad de datos que se ceden, gratuitamente, a aplicaciones, servicios, etc. No parece que a los usuarios les preocupe mucho este tema,…
Los usuarios no han sido conscientes de la comercialización de sus datos y los riesgos de ello. Es por esto que normativas como la GDPR colaborará a minimizar la divulgación de datos sin consentimiento.
La legislación, concretamente GDPR, ¿puede ayudar a que no se comentan fraudes?
Las normativas propuestas siempre buscan aumentar las medidas de seguridad y con esta normativa se busca proteger el usuario, sus datos y evitar la manipulación de su información.
