Tener que juzgar con el ojo, y no con datos más objetivos, no es el medio más imparcial para escoger el mejor entre modelos de cualidades similares. A la hora de elegir un proyector no sólo cuenta la imagen que éste proporciona, sino que hay que considera factores como su versatilidad, para que sea capaz de aceptar el mayor número posible de fuentes, así como su coste de mantenimiento. Como todo administrador consciente sabe, los costes de mantenimiento, incluyendo el de la factura eléctrica, pueden suponer a la larga tanto o más que el coste de adquisición en algunos casos.
Con todo ello en mente, nuestras preferencias han recaído en el Sony VPL-EW5, un modelo basado en tecnología LCD que ofrece un amplio conjunto de funcionalidades y facilidades de manejo, junto con un precio asequible y competitivo hacen que este modelo de solución a una amplio conjunto de posibles usos.
El Sony VPL-EW5 destaca no sólo por su amplio formato de presentación, que es de 1.280 por 800 puntos sino también su soporte HDMI. Su excelente nivel de brillo hace que pueda operar incluso en salas con iluminación, lo que facilita que los asistentes puedan tomar notas o consultar documentación escrita.
Su sistema de apagado y encendido rápido no sólo supone un ahorro de energía, sino, y no menos importante, de coste eléctrico. Y, adicionalmente, incrementa la vida útil de la lámpara. Diversos modos preajustados facilitan además que se cambie con soltura de un modo de presentación, como visualización de películas al de presentación, sin necesidad de complejos ajustes manuales cada vez.