El dispositivo que ha presentado a esta comparativa presenta un exterior con un peso relativamente reducido, si tenemos en cuenta el tamaño de la pantalla. De su diseño exterior podemos además destacar la posibilidad de desmontar la peana de sujeción o instalar la pantalla en la pared. Sus posibilidades, en cuento a ergonomía se refiere, son muy reducidas, limitándose únicamente a la inclinación.
En lo relativo a la calidad de imagen, este dispositivo cuanta con un panel de tipo TN, junto con la tecnología CrystalBrite para ofrecer un nivel adicional de nitidez en la reproducción de colores. Su tamaño de 22” de diagonal nos permitirá trabajar con una resolución máxima de 1680×1050.
Además de esto, la pantalla es capaz de ofrecer un nivel de brillo de hasta 300 cd/m2, un nivel de contraste de hasta 2500:1 y un ángulo de visualización definido en los 170º en horizontal y 160º en vertical. Por último, en este sentido destacar también sus 5 ms en cuanto a tiempo de respuesta, garantizando también un correcto comportamiento en la reproducción de imágenes en movimiento.
Como viene siendo habitual, en el frontal de esta pantalla aparece el panel de control, compuesto por una serie de botones desde donde será posible ajustar los parámetros relativos a la imagen, como el brillo y el contraste, la posición, fase, reloj, etc.
Además del botón de ajuste automático, incluye también un botón para activar el denominado “empowering Technology”, pensado para cambiar rápidamente entre diferentes ajustes predeterminados, orientados para conseguir el mejor nivel de visualización cuando se trabaja con texto, con gráficos, película, etc.