Debido a que las nuevas tecnologías y sus técnicas evolucionan a gran velocidad, las empresas necesitan tener un sistema que promueva agilidad, seguridad, velocidad y flexibilidad. Por ello, son muchas las entidades que encuentran en la nube híbrida una respuesta a esa necesidad.
Con esto, damos por sentado que la tecnología es el propulsor del futuro digital, y debe ser fluida, ágil y capaz de evolucionar en tiempo real para que las empresas se diferencien de la competencia. El campo de la tecnología proporciona a las empresas un gran servicio al cliente dentro de un mundo en constantes cambios.
Cada vez más organizaciones están incorporando a su sistema una mezcla de eficiencia, rendimiento y preparación hacia la nube. En algunos puestos de trabajo, realizar un traslado completo de toda la información empresarial a la nube no es factible por razones reglamentarias o por necesidades laborales.
Las claves del sistema híbrido
Las empresas necesitan responder con la mayor celeridad posible a los requerimientos de sus clientes, además de poseer un buen servicio hiperescalable y ser capaces de operar más rápido en momentos críticos. Para poder cumplir estas premisas, deben mejorar sus infraestructuras tecnológicas y evolucionar de la mano de la sociedad.
Con los sistemas híbridos, las empresas se mantienen ágiles y flexibles, además de evitar que los negocios tengan que trasladar todos sus datos a la nube. La nube no es todo o nada. Las empresas pueden tener una doble apertura de su sistema sin migrar todo su portfolio a una sola nube y sin problemas de seguridad con el cliente.
Cambiar hacia este tipo de modelos también proporciona a cada negocio la oportunidad de revolucionar su configuración actual de TI y mejorar sus sistemas existentes en la nube. Pero esto no significa que tengan que desechar toda su infraestructura para aprovechar sus beneficios. Las empresas quieren ser capaces de operar de forma rentable, sin limitaciones, y un modelo híbrido es una opción muy recomendada.
Combinando lo mejor de dos mundos
Muchas empresas tienen dudas acerca de si trasladar toda su infraestructura de TI hacia la nube. El modelo híbrido, que ofrece lo mejor del mundo de las nubes pública y privada, es la mejor solución para alcanzar y superar sus objetivos empresariales. Quizá el beneficio más importante que obtengan sean las tecnologías innovadoras integradoras del “cómo y cuándo quieras”, una capacidad clave en el panorama cambiante de las tecnologías emergentes y capacidades digitales.
Este enfoque no solo permitirá una mayor flexibilidad, sino que también tendrá un menor coste total de propiedad (TCO) y una mayor agilidad y seguridad en la experiencia del cliente. Estos son aspectos vitales para todas aquellas empresas que se esfuerzan por lograr sus objetivos hoy en día. Teniendo en cuenta los beneficios asociados, no es sorprendente que de aquí a 2020, el 90% de las organizaciones adopte este tipo de gestión para sus infraestructuras.
El modelo híbrido también permite a los negocios elegir las cargas de trabajo adecuadas para su entorno, así como las que dependen de las necesidades de las empresas y las nuevas tecnologías. La capacidad que tenga una empresa en cuanto a escalabilidad ayudará a la misma a manejar la inmensa cantidad de datos que se crean hoy en día. Y, más importante aún, significa que las nuevas tecnologías, tales como la inteligencia artificial y el Machine Learning, sean aún más accesibles.
Este tipo de infraestructuras también ayudan a las empresas a lograr éxitos digitales y abre las puertas hacia una hiperescalabilidad, la cual es crucial para cumplir con las demandas del mundo digital en el que vivimos. Debido a ello, cuanta mayor agilidad empresarial tenga una entidad, más posibilidades tendrá de cumplir sus objetivos digitales.
Listo para el mundo cambiante
Dados los beneficios de rendimiento y gestión de un entorno híbrido de las TI, no es de extrañar que los responsables europeos hayan adoptado recientemente, como su prioridad de inversión, la preparación de una infraestructura de centro de datos con este tipo de implementaciones.
Si tenemos en cuenta la evolución constante y rápida de sistemas tecnológicos como en el caso de la nube de datos, llegamos a la conclusión de que los negocios de hoy en día tal y como los conocemos, sufrirán cambios continuos. Todo traducido en una mayor agilidad, flexibilidad y velocidad de sistemas de almacenamiento.