El renting tecnológico se está convirtiendo en una modalidad de adquisición de tecnología cada vez más frecuente. Las empresas están viendo en el renting un modo de mantener al día su tecnología al mismo tiempo que reducen costes y no tienen un impacto negativo en su capital. Debido a la crisis, las compañías no están en un buen momento para realizar grandes desembolsos, pero, al mismo tiempo, necesitan disponer de tecnología para seguir siendo competitivas. Desde BCN Binary, consultora tecnológica especializada en el ahorro de costes y aumento de la productividad, se destaca que si se lleva a cabo una buena estrategia de renting tecnológico, la empresa puede ahorrarse entre un 10 y un 15% del coste total de propiedad.
Hoy en día, toda empresa, necesita equipos informáticos adaptados a sus necesidades, dispositivos móviles que permitan la movilidad de los trabajadores, sistemas de impresión, etc. La tecnología se ha convertido en un bien insustituible y necesario para que las empresas desarrollen su trabajo. Al mismo tiempo, la tecnología va cambiando y las compañías tienen que adaptarse a esta evolución si quieren ser competitivas. Sin embargo, ¿Cómo pueden las empresas disponer de esta tecnología sin realizar un desembolso total inicial? La fórmula que está cobrando cada vez más fuerza es el renting tecnológico.
Entre las principales ventajas que aporta el renting tecnológico se encuentran, en primer lugar, el hecho de que es 100% deducible, por lo que la empresa podrá desgravar impuestos. Por otro lado, gracias al renting la empresa dispondrá de la última tecnología sin necesidad de realizar un desembolso al principio. De esta forma, mantienen su liquidez y el límite de crédito no se ven reducidos, y, esto, en momentos de crisis es esencial. Asimismo, el renting permite que la empresa realice inversiones en otras partidas y que siga siendo competitiva, pues, dispone en todo momento, de la última tecnología.
Sin embargo, desde BCN Binary se alerta que, si bien las ventajas del renting tecnológico son muchas, es necesario llevar a cabo una planificada estrategia para que sea eficaz. Cada empresa tendrá unas necesidades y objetivos, por lo que lo más recomendable es adaptar de forma adecuada el renting a la empresa.
