El cloud computing está alcanzando la mayoría de edad en las grandes empresas, según señala un estudio realizado entre profesionales TI de grandes compañías europeas y norteamericanas en nombre de CA Technologies. El informe, elaborado por Management Insight, revela que las empresas que tienen más de 1.000 empleados ya están activas en la nube y que sus iniciativas en el campo de la virtualización están contribuyendo a generar un mayor interés en cloud computing. Los resultados también revelan un giro hacia un planteamiento de las TI que aplica el “pensamiento cloud”, es decir, que acelera los usos de cloud computing y ayuda a que los responsables de la toma de decisiones en TI y los implementadores de tecnologías TI estén alineados en lo concerniente a objetivos comunes de eficiencia, flexibilidad y escalabilidad.
Las principales conclusiones del estudio son:
- Más del 80 por ciento de las grandes empresas y el 92 por ciento de las corporaciones de mayor tamaño tienen como mínimo un servicio cloud; el 53 por ciento de los implementadores de TI indican que tienen más de seis servicios en la nube.
- Los principales incentivos para que las organizaciones exploren los entornos cloud son ahorrar costes (44 por ciento) y obtener un mayor control sobre los mismos (35 por ciento). Para el personal TI, los incentivos son incrementar la eficiencia (35 por ciento) y el deseo de trabajar con las últimas tecnologías (34 por ciento).
- La seguridad y el control continúan percibiéndose como barreras para el cloud computing. Los directivos están principalmente preocupados por la seguridad (68 por ciento) y la calidad del servicio (40 por ciento), mientras que aproximadamente la mitad de los encuestados piensan en el riesgo de pérdida de puestos de trabajo y en la pérdida de control como los mayores elementos disuasorios.
- La madurez de la virtualización lleva a actitudes más optimistas con respecto a la nube: en las organizaciones muy virtualizadas es cuatro veces más probable que pasen el mayor número de servicios posible a nubes públicas y privadas.
- Las actitudes hacia las nubes públicas y privadas convergen. Los encuestados citan el ahorro de costes, la eficiencia en los recursos, la flexibilidad y la capacidad para ofrecer servicios a usuarios de todo el mundo como los principales motivos para adoptar nubes públicas. De igual forma, el coste, la escalabilidad, la flexibilidad y la capacidad de gestión son los principales impulsores de las nubes privadas. Eso sí, en ambos casos, la seguridad se ve a la par como impulsor y elemento de disuasión.
Las organizaciones están activas en la nube
Las herramientas de colaboración encabezan el ranking de implantaciones cloud, con un 75 por ciento, siendo el correo electrónico hospedado, los filtros antivirus y antispam, y las conferencias vía web las aplicaciones más comunes implantadas por las grandes empresas.
Las plataformas de desarrollo y las infraestructuras en la nube (Platform-as-a-Service e Infrastructure as-a-Service) parecen estar preparadas para el crecimiento con un 58 por ciento de las grandes organizaciones que ya utilizan esos servicios, mientras que un 43 por ciento los está valorando. Estas cifras sitúan las infraestructuras en la próxima ola de adopción de la nube.
“Este estudio confirma que las grandes empresas están explorando las ventajas del cloud computing y están buscando pasar de servicios básicos, como los de colaboración, a servicios más complejos de infraestructuras y plataformas en la nube”, afirma Adam Famularo, director general de la línea de negocio de Cloud Computing, CA Technologies. “Los resultados validan la tendencia que predijimos: los directivos de TI se están convirtiendo rápidamente en orquestadores de una cadena de suministro TI compuesta por servicios internos y externos. Con este cambio llega la necesidad creciente de una gestión y seguridad sofisticadas que permitan a las empresas cambiar la forma en que conciben las TI para obtener todos los beneficios que ofrece el cloud computing: agilidad, eficiencia y escalabilidad”.
La madurez de la virtualización está contribuyendo al pensamiento cloud
Hoy en día, en las grandes empresas aproximadamente un tercio de los servidores x86 están virtualizados. Casi la mitad de estas organizaciones (46 por ciento) afirman encontrarse en una etapa de la virtualización «gestionada», con capacidad de mover máquinas virtuales y administrarlas para funciones de alta disponibilidad. A medida que las empresas avanzan en el ciclo de vida de la madurez de la virtualización, las aplicaciones que se destinan a la nube también empiezan a cambiar. En la primera etapa de ese ciclo se pasa de servidores virtuales no gestionados a gestionados, siguiendo por una etapa avanzada con planificación dinámica de recursos y backup consolidado, para llegar hasta la etapa “como en la nube” de automatización virtual avanzada y completa recuperación de desastres a través de la virtualización.
El correo electrónico encabeza la etapa “gestionada” (53 por ciento), la virtualización de puestos de trabajo y las bases de datos alcanzan el punto álgido en la etapa “avanzada” (30 por ciento) y las aplicaciones específicas sectoriales superan al resto en la etapa “como en la nube” (32 por ciento).
Además, los encuestados dicen tener planes para continuar pasando a máquinas virtuales las aplicaciones de misión crítica de infraestructuras no virtualizadas en los próximos dos años. Hoy en día, las grandes empresas están ejecutando el 47 por ciento de estas aplicaciones en infraestructuras no virtualizadas, porcentaje que descenderá hasta el 17 por ciento en los próximos dos años. Y de ese 17 por ciento, el 10 por ciento pasará a nubes públicas y privadas.
A medida que las TI se reorganizan para conseguir un entorno virtualizado más dinámico, crece la tendencia a adoptar la nube. Las organizaciones con un alto grado de virtualización tienen aproximadamente cuatro veces más probabilidades de pasar tantos servicios como sea posible a nubes privadas y públicas. En general, la percepción sobre cloud computing adquiere un tono más optimista a medida que las organizaciones mejoran su infraestructura técnica para soportar entornos más dinámicos.
Adopción polarizada en torno a nubes públicas y privadas
Cuando se preguntó a los encuestados que compartieran sus puntos de vista sobre los impulsores y las barreras para adoptar las nubes públicas y privadas, mencionaron el coste como impulsor y barrera, lo que sugiere que el verdadero impacto y la importancia del “ahorro de costes” aún no está resuelto.
La eficiencia en los recursos, la flexibilidad y la prestación de servicios a usuarios de todo el mundo se cuentan entre los elementos que favorecen la adopción de las nubes públicas. En cambio, la seguridad, el cumplimiento, la resistencia interna y la percepción de que las nubes públicas no son adecuadas para algunas aplicaciones de negocio son los principales elementos disuasorios.
El coste y la seguridad se citan a la vez como impulsores y como obstáculos en la adopción de nubes privadas. Otros impulsores son la escalabilidad, la flexibilidad y la capacidad de gestión, mientras que la complejidad, la disponibilidad, la fiabilidad y la lenta adopción de nuevas tecnologías se ven como elementos de disuasión.
Los participantes de la encuesta también apuntaron quiénes defienden y quiénes se oponen al cloud computing dentro de sus organizaciones. Los cuadros directivos de la empresa y del departamento TI son los principales defensores de las nubes públicas, mientras que los que tienen las responsabilidades cotidianas sobre la virtualización y los servidores son defensores de las nubes privadas (32 por ciento de los directores de operaciones de TI o directivos del centro de datos, 31 por ciento del equipo de virtualización y 30 por ciento del equipo de gestión de servidores). Como era de esperar, el equipo de seguridad encabeza la lista como el principal oponente a las nubes públicas y privadas (44 por ciento y 27 por ciento, respectivamente), seguido de los directores de las unidades de negocio y sus responsables (23 por ciento y 18 por ciento, respectivamente).
La nube está alcanzando la mayoría de edad en las grandes empresas
En general, el estudio confirma que las grandes organizaciones están adoptando tanto nubes públicas como privadas. Las corporaciones ya están activas en la nube. La virtualización fomenta la confianza y las capacidades necesarias para animar a las grandes empresas a construir nubes privadas. En última instancia, vivir en este duopolio de entornos cloud públicos y privados exigirá a las empresas adaptar sus herramientas de integración y filosofías de gestión para proporcionar servicios al usuario final a través de ambos tipos de nubes.