Que los recursos intangibles generan crecimiento es un hecho pero, ¿qué lugar ocupa la formación en este proceso? Un estudio realizado por investigadores de la Facultad de Ciencias Económicas y Empresariales de la UPV/EHU, afirma que invertir en la formación de los empleados aumenta el valor de la empresa convirtiéndose en uno de los factores esenciales que determinan la eficiencia de una organización.
El trabajo, titulado “Impacto de la inversión en capital humano sobre el valor empresarial”, será presentado en Chipre en el III Congreso Europeo de Capital Intelectual organizado por la Universidad de Nicosia los días 18 y 19 de abril. A la presentación acudirán los responsables del proyecto; Arturo Rodríguez, decano de la Facultad de Ciencias Económicas y Empresariales de la UPV/EHU; José Domingo García Merino, profesor titular de la Facultad y Lidia García Zambrano, profesora e investigadora de la misma.
“Hemos descubierto que existe una relación fuerte y al mismo tiempo positiva entre la inversión que una empresa realiza en formación en los tres últimos años y el valor que la firma tendrá en la actualidad”, explica Lidia García. Una afirmación con puntualizaciones, puesto que el estudio ha revelado que es la inversión más reciente la que tiene más influencia en el resultado final, dejando en un segundo plano aquella que ha sido realizada en años anteriores. “Los empresarios deben ser conscientes de que es necesaria la constancia debido a la rapidez a la que cambian las habilidades y conocimientos requeridos”.
Conclusiones que se desprenden del estudio realizado sobre las empresas que conforman el IBEX 35, en el que se ha mostrado una regresión lineal que relaciona la inversión en formación de los trabajadores durante los años 2006, 2007 y 2008, y el valor intangible de las empresas en el año 2009. Para simular la pérdida de conocimientos que se sufre con el paso del tiempo se ha aplicado una depreciación del 15%, 20%, y 30% sobre los datos obtenidos.
La formación en cifras
Se puede afirmar que invertir en intangibles es, a día de hoy, el camino que deben seguir las empresas para reforzar su competitividad y asegurarse el crecimiento a largo plazo. Un hecho “a priori lógico” que choca con la realidad.
En 2006 las empresas analizadas en el estudio realizaron de media una inversión de 86.718.910 euros en formación. Un gasto que aumentó de forma importante un año después ascendiendo a 191.033.777 euros. No sucedió lo mismo un ejercicio más tarde, en el año 2008, cuando el gasto destinado a la formación se redujo un 40%.
Según los datos aportados por la CNMV (Comisión Nacional del Mercado de Valores), así como de las páginas web de las diferentes compañías, el sector que más invirtió durante este periodo, en términos relativos, es el de la construcción junto con el de los servicios, quedando por detrás el sector industrial.
Un buen ejemplo a seguir es el Banco Santander Central Hispano. Es la empresa que ha realizado una mayor inversión a lo largo de los tres años, seguida de Inditex, y OHL.
Crisis y formación
“Debido a la crisis las empresas han reducido su inversión en este apartado. “Se trata de una tendencia que se ha podido observar estos últimos años y que supone un paso atrás para las empresas de cara al futuro. Es fundamental apostar por la formación de los empleados como un punto competitivo esencial”, añade García.
La sociedad actual se caracteriza por ser una sociedad basada en el conocimiento. ”Se trata del principal recurso con el que puede contar una empresa puesto que es capaz por sí misma de generar nuevo conocimiento”. Por ello los recursos intangibles se han convertido en la base de competitividad para cualquier empresa, ya que su posesión confiere a la posibilidad de generar una ventaja sostenible en el tiempo e incrementar el valor de la compañía.
“Respecto al consejo que daríamos a los directivos es que inviertan, que inviertan en los trabajadores, a pesar de la crisis, la inversión en Capital Humano es el futuro”.