Según una investigación de HPE Aruba Networking, el 64% de los responsables de TI a nivel mundial creen que las preocupaciones de la seguridad están frenando la disposición de sus organizaciones para invertir en tecnología innovadora. En España, esta cifra es aún mayor, alcanzando el 71%.
Este escenario no sorprende, dado que el 91% de los encuestados en todo el mundo considera que la tecnología emergente representa un riesgo, y el 94% de los directivos en España admite haber experimentado brechas de seguridad relacionadas con la tecnología emergente.
Sin embargo, esta tendencia se presenta en un momento en el que los responsables de TI deben adoptar innovaciones como la inteligencia artificial generativa para impulsar la transformación empresarial, algo que el 89% a nivel mundial considera crítico en los próximos 12 meses. En España, este porcentaje es ligeramente menor, situándose en un 85%.
“Las necesidades empresariales han evolucionado, y los equipos están implementando cada vez más nuevas tecnologías para satisfacer estas necesidades. Sin embargo, las medidas de seguridad que pueden respaldar el surgimiento de la tecnología emergente deben evolucionar junto con ellas”, explica Scott Calzia, vicepresidente de marketing de HPE Aruba Networking.
La seguridad y los avances tecnológicos
La mayoría de los responsables de TI (95%) considera que la digitalización es esencial para generar nuevas fuentes de ingresos en los próximos 12 meses, aunque este porcentaje desciende ligeramente al 91% en España. Las organizaciones, tanto a nivel global como en España, están enfocadas en la implementación de tecnologías emergentes como 5G (91%), inteligencia artificial y aprendizaje automático (89%), e Internet de las cosas (IoT) y sensores inteligentes (88%).
En España, las cifras indican un alto grado de alineación con las tendencias globales, aunque hay algunas diferencias en la adopción de estas tecnologías específicas: 5G (85%), IA y Machine Learning (84%), e IoT y sensores inteligentes (77%).
Los responsables de TI se debaten entre los riesgos de seguridad y los avances tecnológicos
A pesar de este impulso tecnológico, solo el 45% de los responsables de TI considera a sus organizaciones como innovadoras, y un porcentaje similar las percibe como seguras. En España, el 49% de los responsables de TI describen a sus empresas como innovadoras y un 44% las considera seguras. A nivel global, el 64% de los responsables de TI afirman que las preocupaciones por la seguridad impactan negativamente en la disposición de sus organizaciones para invertir en tecnologías innovadoras.
Gestionando el riesgo creciente
También existe una creciente brecha entre las demandas tecnológicas y la capacidad del equipo de TI para gestionar todo: el 66 % de los responsables de TI tienen preocupaciones sobre la capacidad de su organización para mantenerse al día con la última tecnología y las demandas digitales, y el 55 % afirma que sus equipos de TI ya están al límite de su capacidad. En España este dato es del 75 % y del 36 %, respectivamente.
La combinación de este aumento en el uso de tecnología con la falta de recursos y las tendencias más amplias en torno al trabajo remoto, la nube híbrida y los centros de datos distribuidos, hacen que las organizaciones estén expuestas más que nunca.
El papel de la red
El estudio revela que tanto a nivel global como en España, la red desempeña un papel crucial en la transformación empresarial, especialmente en términos de seguridad y el impulso a la innovación. La mayoría de los responsables de TI cree que la red puede respaldar la ciberseguridad (64% global, 66% en España) y fomentar la innovación (61% global, 65% en España).
Para abordar estas necesidades, las organizaciones están invirtiendo en soluciones de seguridad basadas en la red, como Security Service Edge (SSE), control de acceso basado en políticas y seguridad Secure Access Service Edge (SASE), con altas tasas de adopción (89%, 88%, 87%, respectivamente).
En España, un destacado 84% de los profesionales de TI están considerando invertir en soluciones de seguridad integral, reconociendo la importancia de proteger sus activos digitales en un entorno empresarial cada vez más expuesto a amenazas cibernéticas.