Microsoft Ibérica ha decidido donar aquellos ordenadores comprados en establecimientos donde se distribuían programas ilegales (en España, un 45% del total de los puntos de venta). Esta compra de PCs por parte de Microsoft se enmarca dentro del programa Comprador Misterioso (Mystery Shooper), una iniciativa puesta en marcha por la compañía en el año 2004 y que tiene como objetivo reducir la venta de software ilegal en el canal de distribución informático en nuestro país.
Según el último estudio resultado de este programa de compras (marzo de 2007), el 45 por ciento de los puntos de venta de informática en España distribuía software sin licencia. Para hacer el estudio se visitaron 2.438 puntos de venta entre el 1 de julio de 2005 y el 31 de diciembre de 2006. En algunos casos, y dependiendo de las circunstancias de la operación, Microsoft puede llegar a denunciar a aquellos distribuidores que incurran en esta práctica fraudulenta.
Sin embargo, a partir de ahora Microsoft va a hacer un buen uso de ese material informático y va a destinar los ordenadores adquiridos en las compras de prueba que forman parte de esta iniciativa a Fundaciones o Asociaciones sin ánimo de lucro.
La Fundación Bip Bip ha sido la que ha recibido la primera remesa de equipos, 45 PC´s y 21 monitores. A partir de hoy todo el material informático que sea retirado de las tiendas por contener software ilegal servirá para ayudar a personas sin recursos o en riesgo de exclusión social.
Txema Arnedo como Director de Desarrollo de la Propiedad Intelectual de Microsoft afirma “es muy gratificador ver que finalmente estos PCs, con su software legal van a servir para ayudar a disminuir la brecha digital en España” Arnedo añade “la compañía colaborará siempre que pueda con la Fundación Bip Bip ya que desarrollan una labor fundamental para adaptar los equipos a las necesidades de las ONGs que son los usuarios finales”.
Atendiendo a su Plan de Protección del Cliente de Windows puesto en marcha a principios de 2007, Microsoft persigue el software ilegal desde tres frentes: Formación al cliente y al distribuidor informático, Innovación tecnológica y acción legal. Entre sus objetivos persigue concienciar a consumidores y distribuidores informáticos acerca de este problema y ayudar al comprador a identificar fácilmente las copias originales de las que no lo son.
