Ante la creciente demanda de soluciones empresariales destinadas a agilizar y mejorar la experiencia del usuario en la contratación de servicios online, Kyocera ha desarrollado una nueva plataforma que posibilita la firma electrónica legal y segura gracias a la biometría facial.
La nueva solución, totalmente adaptable a las necesidades de cada empresa u órgano administrativo, permite configurar un proceso contractual completo y escalable con diferentes componentes. Como resultado, las organizaciones pueden hacer uso de la forma más sencilla de un sistema que les permitirá reducir tiempos de gestión, suministrar servicios al cliente con inmediatez, abrir nuevos canales de venta para clientes finales, y, en definitiva, optimizar y digitalizar sus procesos.
“En un momento de transformación como el que vivimos, en el que la digitalización marca la hoja de ruta de las empresas y el cliente demanda facilidad y agilidad, la tecnología debe ser una aliada para impulsar el beneficio de ambas partes”, señala Jose Aznar, Product Strategy Manager de Kyocera, y añade que “gracias a la biometría facial hemos desarrollado una plataforma que permite mejorar la experiencia de compra a la vez que fomenta la eficiencia en el propio negocio”.
La tecnología de biometría facial ayuda a las propias compañías a combatir las posibles acciones fraudulentas o robos de identidad
La versatilidad de la tecnología biométrica hace de esta plataforma una solución idónea para todo tipo de sectores. Entre sus aplicaciones se pueden destacar:
- Contratación de productos financieros (cuenta corriente, cuenta de valores, tarjetas, etc.) y seguros. Reserva y contratación de viajes, hoteles y servicios.
- Alquiler de vehículos y servicios de movilidad.
- Identificación de titulares de productos y confirmación de identidad (lo que permite, por ejemplo, operar en las plataformas de trading).
- Autorizaciones y consentimientos médicos.
- Certificaciones de entregas o recogidas.
Además de los beneficios para el cliente, la tecnología de biometría facial ayuda a las propias compañías a combatir las posibles acciones fraudulentas o robos de identidad, así como cumplir con las regulaciones eIDAS y AML, entre otras.
Seguridad, agilidad y eficacia, ¿cómo funciona?
El proceso para llevar a cabo la contratación online se inicia con la identificación del cliente en su propio PC, Tablet o móvil. El sistema extrae la información de los documentos de identificación y, tras mostrar la cara, se verifica la imagen para asegurar la coincidencia. Tras ello, el documento contractual se genera de forma automática con los datos recogidos.
Si fuera necesario, la operación puede formalizarse a través de una firma digital, con un código enviado por SMS al móvil del usuario.