GE ha presentado un sistema de detección múltiple mediante identificación por radiofrecuencia (RFID) sin batería que podría hacer posible una amplia gama de productos de detección inalámbricos de bajo coste en aplicaciones como salud, seguridad, envasado de alimentos, tratamiento de aguas y prevención de la contaminación.
Los exclusivos sensores RFID desarrollados por GE, basados en las etiquetas RFID tradicionales, funcionan sin batería. De este modo, se superan las limitaciones de los sensores actuales, que necesitan contar con una fuente de alimentación propia para ofrecer una respuesta selectiva a múltiples agentes químicos en condiciones variables. Al eliminar la batería, se pueden diseñar sensores más pequeños que un céntimo y fabricarse con un coste muy reducido. Este avance podría hacer posibles muchas e interesantes aplicaciones, tales como:
– Nuevos sensores de seguridad que pueden detectar amenazas químicas y biológicas con más eficacia.
– Seguimiento sobre el terreno de las labores de depuración de aguas, comprobando la presencia de impurezas.
– Seguimiento de seguridad de alimentos y bebidas, para verificar si las mercancías transportadas o conservadas en cámaras frigoríficas están frescas.
– Fabricación portátil de vacunas, para garantizar la pureza de una vacuna fabricada en situ durante una acción de emergencia para responder a un brote de gripe u otra epidemia potencial.
– Seguimiento de emisiones en centrales eléctricas.
Estos nuevos sensores RFID utilizan una etiqueta RFID convencional, pero están revestidos con una película que reacciona ante agentes químicos o biológicos. El lector del sensor puede obtener diferentes respuestas, lo que permite al sensor identificar y medir productos químicos concretos en diferentes mezclas y en condiciones variables. Los sensores de GE pueden detectar concentraciones reducidas de gases tóxicos como productos químicos industriales, compuestos orgánicos volátiles y productos químicos en líquidos.
Para funcionar sin batería, la energía se obtiene inalámbricamente del lector del sensor. El lector activa la antena del sensor y el chip RFID recoge diversos parámetros de respuesta. La medición de estos parámetros permite detectar selectivamente diferentes productos químicos con un único sensor.
Radislav Potyrailo, uno de los científicos que lideran el equipo de desarrollo multidisciplinar que trabaja en el área de detección inalámbrica de GE Global Research, señaló: «Creemos que el sistema de detección inalámbrico sin batería de GE revolucionará muchos productos en las áreas de salud, seguridad, agua y prevención de la contaminación, por nombrar algunas.
Al no necesitar baterías, podemos fabricar sensores que son mucho más pequeños y con un coste sustancialmente menor. Estos atributos, junto con las prestaciones de detección selectiva de agentes químicos y biológicos, crean oportunidades nuevas y hasta ahora desconocidas en el área de la detección que darán lugar a muchas e innovadoras aplicaciones».
Potyrailo añadió: «Como estos sensores pueden fabricarse con un coste tan bajo, también pueden hacerse de usar y tirar. Del mismo modo que se pasa un lector sobre un producto para saber el precio, se podría acercar un lector de mano a un cartón de leche o un alimento envasado y ver si se ha echado a perder. Ésta es sólo una de las nuevas aplicaciones que pueden ser una realidad gracias a los sensores RFID de detección múltiple de bajo coste y desechables».
El desarrollo de este novedoso sistema de detección inalámbrico de GE ilustra la tremenda capacidad de la tecnología de GE para aprovechar las múltiples áreas de conocimiento técnico de las diferentes disciplinas representadas en el GE Global Research Center. En el desarrollo de este nuevo sistema ha participado un equipo mutidisciplinar formado por químicos analíticos, ingenieros de radiofrecuencia, expertos en polímeros e ingenieros de microfabricación.