Según la consultora Gartner, el gasto medio en impresión en las empresas oscila entre el 1% y el 3% de la facturación. Si tenemos en cuenta que los beneficios medios en una empresa suponen el 5% de las ventas y que el uso de compatibles puede reducir un 33% los costes totales de impresión, la reducción de hasta un 1% de costes respecto a la facturación se trasladaría directamente a resultados, consiguiendo incrementarlos en un 20%.
Los costes de impresión están afectados por dos grandes variables, la adquisición o alquiler de impresoras, multifuncionales y copiadoras, que representan el 33% del total según los datos de GfK, y el consumo de cartuchos de tinta y toners, que suponen el 67% del coste.
La diferencia de precio de los cartuchos y toners compatibles respecto a los originales varía mucho según los modelos, desde un 5 a un 90%. Algunos modelos, además, aportan un gran ahorro al usuario por la vía de una mayor capacidad de tinta o toner, llegando a tener el triple de capacidad de tinta que los originales. El ahorro medio que obtienen los clientes que utilizan compatibles es superior al 50% teniendo en cuenta los dos efectos.
Un estudio comparativo elaborado por Conzumo.com confirma que el gasto en consumibles representa dos terceras partes de los costes de impresión, este ahorro reduciría en un tercio los costes. Medidos en términos de facturación, una empresa podría pasar de dedicar el 3% de sus ingresos a sólo el 2% sin afectar negativamente a sus ventas.
Una reducción de costes indirectos del 1% puede parecer insignificante pero lo cierto es que si la empresa obtiene un beneficio respecto a las ventas del 5%, se obtendría un incremento sostenible del beneficio un 20% superior.
Este rápido análisis refleja el gran impacto que el uso de consumibles compatibles puede tener en los resultados de cualquier empresa. Corresponde ahora a los departamentos informáticos, financieros e incluso a los más altos responsables de la estrategia de la empresa, hacer un análisis más detallado con ayuda de sus proveedores. Es cuestión de tiempo que los consejos de administración empiecen a exigir este tipo de medidas de reducción de costes como ya empiezan a demandar los clientes el uso más ecológico de los recursos.
