IDC ha congregado a más de 200 asistentes en su VII Convocatoria anual sobre Outsourcing 2008, que tuvo lugar en Madrid y en Barcelona respectivamente. La nueva perspectiva que las empresas están dando a los servicios de outsourcing y las tendencias más actuales en este ámbito han sido los temas principales de la conferencia.
Diego Pavía, Presidente de la Asociación Española de Consultoría, abrió la jornada haciendo hincapié en que las relaciones profesionales con proveedores de servicios externos aportan calidad, previsibilidad y satisfacción tanto a nivel de oferta como de demanda. A continuación, Rafael Achaerandio, Research Manager de IDC, presentó las condiciones actuales en las que se encuentra el mercado de outsourcing. “Estamos en un entorno económico incierto caracterizado por la desaceleración y además hemos observado una constante escasez de recursos especializados en TI que sigue amenazando la industria del outsourcing e impactando en los costes”, comentó el experto de IDC. Esta situación se ve agravada por el hecho que todavía no se están tomando muchas medidas a largo plazo para combatir la carencia de recursos, que según IDC irá creciendo durante 2009-2010.
A pesar de los riesgos que presenta para los negocios la desaceleración económica, el sector del outsourcing en España se encuentra en un escenario privilegiado gracias a la localización geográfica estratégica de nuestro país, que proporciona a las empresas extranjeras el lugar ideal de conexión entre Europa, Oriente Medio, África y América Latina. En este sentido, Rafael Achaerandio destacó que “España tiene una oportunidad que debe aprovechar para posicionarse en servicios de outsourcing”. Además, en cuanto a la salud del mercado interno de externalización, según datos de IDC, un 35% de las empresas que tienen que renovar sus contratos de outsourcing, cambiarán de proveedor en los próximos meses, con el consiguiente incremento de la presión dentro del mercado hacia precios más bajos y soluciones más integradas.
De hecho, la principal tendencia en el sector sería poder ofrecer los mejores servicios estandarizados a menores precios, asegurando la mayor flexibilidad y agilidad al negocio del cliente. “Las empresas buscan alianzas estratégicas con sus proveedores, por eso, aunque permanece entre los aspectos más valorados, el coste ya no representa el elemento más crítico para las empresas a la hora de elegir un proveedor”, comentó el analista de IDC. “Hoy en día, la capacidad de las soluciones de externalización para alinear las TI a los objetivos de negocio e implementar las innovaciones tecnológicas dentro de los flujos de trabajo de la empresa, se consolidan como los dos factores determinantes para diferenciar a la multitud de proveedores”, concluyó Rafael Achaerandio.
En este contexto, Francisco Aguado, socio de Accenture, destacó cómo las nuevas TI permiten a las empresas adoptar nuevas estrategias de crecimiento al mismo tiempo que les facilitan un soporte válido para garantizar su puesta en marcha. “El outsourcing es sin duda una herramienta estratégica para los negocios, gracias a la mejora continua en los procesos empresariales que proporciona a través de la innovación, la flexibilidad y la optimización de los flujos de trabajo”. Según el experto, el outsourcing deberá orientarse hacia un concepto más general donde la elección de proveedores más eficientes y ofertas de servicio más amplias, permitirá contratos orientados a la variabilidad y la incorporación de modelos más dinámicos e innovadores respecto a los actuales.
La necesidad de adoptar nuevos enfoques en la ejecución del outsourcing fue señalada también por Luis de Pedro, responsable de desarrollo de negocio y de servicios de Outsourcing de Hewlett Packard. El experto destacó que hoy en día para garantizar los objetivos de negocio se impone la necesidad de alinear las TI con las líneas de desarrollo estratégico de la empresa. En este sentido, las TI deben pasar de ser un centro de coste que opera y maneja las infraestructuras a un centro de desarrollo de negocio que proporciona innovación y nuevas fuentes de negocio. “Es sólo de esta forma que las TI se pueden convertir en un socio tecnológico capaz de aportar soluciones e ideas que producen beneficios tangibles para las empresas. El valor del outsourcing para los negocios está en su capacidad de evitar el aislamiento entre las diferentes áreas de las TI y garantizar el cumplimiento de los objetivos de negocio a través del seguimiento y la valoración de los resultados”, afirmó el experto.
Joaquín Gil Lasa, Director de la Unidad de Outsourcing de Atos Origin, también destacó que el outsourcing no debería limitarse a gestionar sólo las infraestructuras sino también, resulta imprescindible que sea orientado a incrementar la productividad de las personas. “En la actualidad, los procesos de externalización, además de garantizar que los empleados de una empresa puedan trabajar desde cualquier lugar con cualquier dispositivo y en cualquier momento, deberían asegurar la posibilidad que los usuarios sigan trabajando de la misma manera, independientemente de cuál sea el dispositivo que usen”, comentó el experto. “Hay que gestionar un entorno complejo diseñado, pensando en el usuario y para esto se necesita proporcionar servicios de calidad, eficiencia y reducción de los costes”, concluyó el director de outsourcing de Atos Origin.
La importancia de orientar el outsourcing hacia los objetivos de negocio fue destacada también por José Antonio Ortega Barros, Director Regional de Consultoría y Outsourcing de Tecnocom. El experto explicaba como, según los últimos análisis del mercado, “la situación económica cambiará el enfoque en los contratos de outsourcing que evolucionarán de modelos tradicionales a modelos de ganancia en productividad”. En este sentido, la externalización transformacional beneficiará el nivel de productividad de las empresas, permitiendo que participen activamente en el análisis de sus propios recursos para entender y decidir qué aplicaciones se necesita externalizar. En consecuencia, José Antonio Ortega Barros destacaba que “el imperativo principal para los proveedores de servicios de outsourcing será la adaptación a los recursos del cliente y su éxito se basará en la orientación de los procesos de externalización al enfoque del negocio”.
Todos los ponentes coincidieron que en el actual contexto empresarial, la responsabilidad del CIO consiste en poder desarrollar iniciativas orientadas a contribuir de forma significativa a lograr los objetivos de negocio. Según Francisco Bermúdez, Vicepresidente y Director General de Operaciones de Capgemini, “la misión de los CIO ha cambiado y ahora está orientada a fortalecer la relación entre negocio y tecnología para mantener un coeficiente de eficiencia entre costes y calidad de servicio”. En un contexto de fusiones, adquisiciones y creciente competitividad, el CIO debe potenciar la influencia de las TI en los resultados de la compañía y por eso el uso de un outsourcing inteligente es indispensable para poder aplicar la innovación tecnológica al negocio.
Por su parte, David Cuesta, Director de Soluciones de Venta de T-Systems, convenía con Rafael Achaerandio de IDC en que el coste ya no es el principal motivo parar adoptar soluciones de outsourcing. “Cada vez más, las grandes y pequeñas empresas están buscando soluciones extremo a extremo capaces de gestionar de forma estandarizada y globalizada todas las necesidades de los clientes”, comentó el director de T-Systems. Se trata de ofertas basadas en una nueva visión de negocio donde el outsourcing aporta servicios dinámicos de infraestructura, permitiendo a los CIO, en cuanto gestores de las TI, demandar más responsabilidades a los proveedores y seleccionar a aquellos que ofrecen una combinación de las TI y servicios de telecomunicaciones con valor diferencial en el mercado. Una nueva tendencia que según el experto se consigue a través de la fiabilidad, flexibilidad y coste facilitados por un único proveedor.