Más del 70% de los españoles afirman tener un nivel bueno o muy bueno de bienestar y salud general, un porcentaje que se reduce al 54% cuando se toman en cuenta percepciones de bienestar hacia aspectos particulares de su salud, su entorno, su familia y su trabajo. Para los españoles, la clave del bienestar está en la relación con su familia y amigos (88%) y pasar tiempo descansando en casa (79%).
Estas son algunas de las muchas conclusiones que se desprenden del “Philips Index: Bienestar y salud en España 2010”*, un estudio que ofrece una perspectiva global del bienestar y la salud de los españoles, y del impacto de la tecnología en estos ámbitos. Este “índice de bienestar” se ha elaborado a partir de una encuesta realizada por la consultora TNS entre 1.700 españoles de más de 18 años.
En concreto, el Philips Index evalúa el grado de satisfacción general con respecto a la importancia que otorgan los encuestados a cinco ámbitos relacionados con la salud y el bienestar de la población: el familiar y de amistades; el del bienestar, el estado físico, la comunidad en la que se vive y el laboral.
Los encuestados con edades entre los 25 y los 45 años son los que perciben mejor todos los componentes de su bienestar, especialmente en lo que respecta a la propia salud, la familia y amigos. Por su parte, los más jóvenes (18 a 24 años) tienen los porcentajes más bajos en tres de las cinco variables analizadas: los índices de comunidad, bienestar, y familiar y amistades.
“A pesar de las transformaciones que ha vivido la sociedad y la familia española en los últimos años, es llamativo observar que la familia y el hogar siguen siendo el centro del bienestar para los/las españoles/as, un elemento cuidador, un colchón, incluso en momentos de dificultad económica como los que atravesamos”, señala el Profesor Jesús M. de Miguel, Catedrático de Sociología en la Universidad de Barcelona, y actualmente Fellow RCC en Harvard University, junto con Ching T. Liao (Barcelona GSE, Universidad Pompeu Fabra, Barcelona), quienes han realizado un análisis comparado del Philips Index en España con los realizados también este año en Estados Unidos y en China.
De Miguel también destaca el nivel de bienestar físico sensiblemente más bajo en la mujer que en el hombre. “La mujer se preocupa más por su salud y la de los demás. Se compromete más con su cuidado, incluso va más al médico o al dentista, pero duerme peor, tiene más estrés y su percepción global hacia su salud y bienestar es sensiblemente menor que en el hombre. Un 35% de mujeres no se considera satisfecha con su estado general de salud y bienestar”, señala el sociólogo.
Lo que más nos importa y nuestro grado de satisfacción
Un 96% de los españoles otorga la mayor importancia como elemento de bienestar a lo bien que se lleva con su familia y amigos, y está igualmente satisfecho con ello (96%). La salud física de los familiares es la segunda variable más valorada (para el 93%), pero sólo están satisfechos con ella un 88%, lo que resulta en una diferencia o gap del -5%. Otro de los aspectos que los españoles destacan como importantes es la salud mental, sin diferencias entre la importancia y la satisfacción (ambas para el 93%). Por el contrario, la salud física propia, importante para el 91%, presenta un gap del -8%.
Los factores que peores resultados obtienen en la comparación entre lo que nos importa y cuánto nos satisface son el coste de la vida (es importante para el 74% y sólo el 34% está satisfecho); el que hace referencia a cuánto se gana (importante para el 69% y 55% satisfechos); y la cantidad de estrés (importante para el 68% y 56% de satisfechos).
El estrés y la falta de sueño como factores que alteran nuestro bienestar
Uno de cada cuatro españoles declara tener falta de sueño, y este síntoma es más acusado en las mujeres. Los más jóvenes y las personas entre 35 años y 54 años son los que menos duermen. Esta falta de sueño afecta en un 58% de los casos a la salud física y en un 51% a la salud mental. Pero la vida familiar y el rendimiento en el trabajo también se ven afectados por la falta de sueño (según el 45% y el 44% de los encuestados respectivamente).
Mientras que el 40% de las mujeres se sienten algo o muy estresadas, esta sensación sólo afecta al 25% de los hombres. Las causas primordiales de este estrés son los gastos mensuales, la perdida de trabajo y la economía.
Los españoles ante la salud
Un análisis de los resultados del Philips Index permite identificar los diferentes puntos de vista con los que los españoles afrontan la salud. Entre las cuatro “personalidades” identificadas, destacan dos grupos, uno denominado “dependientes”, que representa al 42% de los españoles, y otro que podría denominarse “comprometidos innovadores” y que engrosa ya el 31% de la población. Los primeros representan las conductas más tradicionales hacia la salud y son mayoritariamente individuos entre 35 y 54 años.
Los segundos, que tienen entre 25 y 45 años, en su mayoría presentan unas características de interés como indicadores de tendencia. Son poco entusiastas con su estado de salud (sólo el 10% cree que es muy bueno), siguen los consejos del médico y acudirían más a él si no tuvieran que desplazarse. Les gusta buscar una segunda opinión y están interesados en leer e informarse sobre noticias relativas a salud. Apuestan por la incorporación de innovaciones tecnológicas en el trato con su médico (realizar los tests médicos en casa o utilizar el correo electrónico). Tienen una alta confianza en la evolución de la tecnología médica y están abiertos a probar nuevos aparatos para mejorar su salud y bienestar.
Según Marisa Carrión, directora del sector Technology de TNS, “el grupo que hemos llamado de comprometidos innovadores representan un 31% de la población y en pocos años empezarán a engrosar el grupo de pacientes crónicos. Su carácter más activo, menos tradicional en su relación con el médico y comprometido con su propia salud, marca una interesante tendencia”.
El papel de la tecnología en la salud y el bienestar
Para los españoles, según las conclusiones del Philips Index, los principales aspectos que se han visto afectados positivamente por los cambios tecnológicos son los relacionados con la salud. Así, el 90% de los entrevistados opina en este sentido. Otros ámbitos destacados son la educación (88%), la comunicación (87%), ahorrar tiempo (79%), así como la información, trabajar desde casa y viajar, las tres con un 76%. En términos generales, los españoles valoran en la tecnología, en primer lugar, la calidad y después, la capacidad para hacerles la vida más sencilla.
Otra de las principales conclusiones extraídas del estudio es que tres cuartas partes de los encuestados consideran que la tecnología médica le permitirá vivir más años, mientras que el 58% considera que la tecnología médica le va a facilitar no tener problemas de salud cuando envejezca.
Así, el 81% de los encuestados reconoce que la luz puede tener un efecto importante en su salud y bienestar. Además, el 80% considera que cada uno es responsable de comprender la tecnología que le va a hacer mejorar su vida y que los avances tecnológicos cambiarán nuestros hogares profundamente en los próximos 10 años.