La irrupción de redes profesionales en nuestro país hace aproximadamente tres años ha dado lugar a un nuevo escenario en el que los profesionales y
las empresas buscan compartir experiencias, conocimientos y entrar en contacto con otros profesionales que les puedan abrir las puertas a una nueva oportunidad laboral.
En tan corto periodo de tiempo, el auge de este tipo de redes ha sido tal que, en el caso de Linkedin, la red profesional líder en el mundo, cada segundo un profesional nuevo se conecta a ella hasta alcanzar los 750.000 usuarios en nuestro país, mientras que en el caso de Xing, la plataforma de networking líder en España, la cifra asciende hasta los 1,1 millones de usuarios.
Estas cifras tan sólo son un ejemplo del rápido crecimiento que las redes profesionales han experimentado en nuestro país, donde el 51% de los 1.100 usuarios de Internet encuestados por Adecco Professional, la consultora de selección del Grupo Adecco, asegura utilizarlas y, además, el 45% de los expertos en recursos humanos afirma haber recurrido alguna vez a ellas para reclutar candidatos. Además, un 52% de los expertos en recursos humanos encuestados asegura que podría descartar a un candidato de un proceso de selección por su “rastro digital”.
A pesar de ello, conviene recordar que pese a las facilidades que este tipo de redes proporcionan a la hora de encontrar un candidato a priori idóneo para una vacante, de nada serviría sin una labor posterior de consultoría, entrevista personal y valoración de aptitudes y actitudes que asegurara que el candidato realmente reúne los requisitos apropiados para un determinado puesto.
Si, además, tenemos en cuenta que cerca del 40% de las ofertas existentes en el mercado laboral no se publican y se accede a ellas, generalmente, mediante la red de contactos, las redes profesionales se configuran como el cauce ideal para hallar socios y colaboradores, ampliar la cartera de clientes y proveedores y conocer a expertos de confianza que, todos ellos, puedan abrir las puertas de un nuevo empleo.