Sólo un 20% de las perdidas de datos es intencionado. Eso quiere decir que entre el 80% y el 90% de las mismas se producen por acciones no intencionadas.
Es necesaria la prevención para evitar estos errores que pueden ocasionar consecuencias muy graves desde el punto de vista económico y de imagen. Asimismo, puede provocar que la empresa incumpla determinadas normativas y la pérdida derive en una multa.
Para Joaquín Reixa, director general de Check Point en España y Portugal, “el problema al que se enfrentan las soluciones DLP es la gran cantidad de falsos positivos que saturan a los administradores de sistema, que tienen que revisar toda esa información que es viva y cambia continuamente. La solución DLP de Check Point reúne tres condicionantes imprescindibles: no interfiere en el negocio; funciona; y su implementación es sencilla y ofrece resultados desde el primer día ya que incorpora una gran cantidad de políticas preinstaladas”.
La estrategia del fabricante de seguridad que hace que el DLP funcione son tres tecnologías:
UserCheck es un motor sofisticado en tiempo real que incorpora el factor humano al DLP y alerta al usuario de posibles violaciones de políticas. Esta tecnología permite que el usuario decida si quiere o no enviar la información que clasifica en tiempo real.
MultiSpect aporta exactitud mediante la correlación instantánea de datos embebidos en los documentos. Usa un lenguaje script que permite crear nuevas reglas para el análisis de nuevos formatos de documentos.
Políticas Predefinidas que permiten que las comunicaciones legítimas se autoricen rápidamente. Además, pueden determinar el grado de sensibilidad de las políticas.