Desde que los robots y la Inteligencia Artificial pasaron a primera plana del mercado tecnológico, siempre se ha defendido que la gran “amenaza” para el ser humano sería en relación con los trabajos repetitivos y “de poco valor añadido”. Hemos mantenido que la creatividad humana nunca llegaría a ser imitada por la Inteligencia Artificial.
Pero desde que en Noviembre de 2022 la compañía Openai lanzó la nueva versión de su chatbot, denominada ChatGPT, se han encendido muchas alarmas acerca de la Inteligencia Artificial. Los grandes avances que se están sucediendo en muy corto espacio de tiempo, desde que millones de personas han utilizado ChatGPT y han comprobado las increíbles capacidades para redactar textos con contenido realmente variado o responder a casi cualquier pregunta, muchos están (estamos) en estado de shock.
¿Está la creatividad artificial a la altura de la creatividad humana? Esta es la gran pregunta para el futuro próximo
Las noticias están llegando de todas partes, por ejemplo en el mundo de la educación, donde se ha hablado mucho de que las Universidades se han visto en la obligación de cambiar la forma de examinar a los alumnos debido al uso que se está haciendo de la IA por parte de estos. En USA se dice de que podría ser el fin de los deberes. Incluso en España algunas Universidades que habían decidido que los trabajos de masters y postgrados se entregaran manuscritos, para que por lo menos hubieran tenido que copiarlo, han tenido que cambiar sus procedimientos al descubrir que hay algoritmos capaces de aprender a escribir con nuestra letra de forma casi perfecta.
Otro área que está bastante revuelta es el de el contenido fotográfico, donde varías webs han tenido que desarrollar soluciones para detectar fotografías creadas con IA e incluso están empezando a prohibir subir fotografías que tengan demasiados retoques de IA. También se ha popularizado mucho las herramientas para crear arte digital, con diversas iniciativas en las que se pone una descripción y la IA genera una creación artística en base a lo que hemos descrito, como DALL-E, también creación de Openai. Por no hablar del desarrollo de los videos Deepfake o la nueva moda de crear imágenes de personas que no existen.
Quizás lo más relevante de todo esto es la inquietud que se está empezando a crear acerca del desarrollo de la IA en áreas donde hasta ahora parecía que solo los humanos podían estar como puede ser la creatividad. De ahí surge el concepto de Creatividad Artificial que es un campo de la inteligencia artificial que se centra en desarrollar sistemas y algoritmos que puedan generar contenido nuevo y original, como música, arte, escritura y diseño.
¿Está la creatividad artificial a la altura de la creatividad humana? Esta es la gran pregunta para el futuro próximo y aunque a día de hoy la respuesta es que no, lo cierto es que avanza a una velocidad sorprendente. Podemos discutir que la IA no tiene creatividad sino casi infinitos datos que relaciona para conseguir los resultados deseados; mientras que la imaginación humana no está basada en datos o al menos no solo en datos, sino también en emociones, sensaciones, relaciones etc.
En cualquier caso, ha llegado el momento de que los humanos empecemos a perder el miedo a la IA y a acostumbrarnos a convivir con la IA. Debemos sacar partido de todas las oportunidades que nos ofrece, debemos desarrollar regulación específica para la IA, así como protegernos contra posibles ataques gestionados con IA. Es decir que la IA es ya una parte más del mundo digital y tenemos que admitirlo y aprovecharlo.
