En un entorno donde la sofisticación de los ciberataques y las brechas de seguridad no dejan de crecer, las empresas se enfrentan a un desafío constante. La evolución del SOC tradicional reconoce que un enfoque centrado únicamente en la detección y respuesta ya no es suficiente.
En relación a ello, SIA impulsa la evolución del enfoque tradicional de las operaciones de ciberseguridad junto a SIA eXtended Managed Detection & Response. Esta solución tiene como objetivo identificar y limitar rápidamente el impacto de los incidentes de seguridad en las organizaciones, brindando resultados medibles para mejorar continuamente su resiliencia.
“Para facilitar la resiliencia de las organizaciones es necesario contar con servicios de gestión de ciberseguridad con una visión holística y con una orientación a la gestión de riesgos, que aúnen diferentes capacidades para maximizar los resultados”, explica Roberto Espina, CEO de SIA,
SIA eXtended MDR contra ciberataques
SIA eXtended MDR proporciona a las organizaciones un nuevo paradigma para la defensa activa frente a amenazas, que deja atrás el concepto de SOC tradicional y da un salto de madurez en la gestión de la ciberseguridad.
SIA refuerza un modelo de defensa proactivo con su servicio extendido de detección y respuesta avanzada a los ciberataques
La combinación de la gestión especializada de los expertos que lo prestan, la optimización del tratamiento de la información, la automatización basada en IA que mejora la predictibilidad de la ciberdelincuencia y un conjunto de servicios complementarios de seguridad son los ejes del servicio que refuerzan las capacidades y medidas de las compañías frente a ciberataques y fugas de datos.
Gracias, además, a la plataforma tecnológica que lo soporta, SIA eXtended MDR incorpora al servicio las particularidades de cada organización y permite medir indicadores desde un único punto, el portal Detect One, que facilita el análisis, el reporting global y la mejora continua. Hasta el momento, el servicio ha logrado minimizar la detección de falsas alertas positivas a tan sólo un 2% y reducir el número de alertas de escaso valor en más del 80%.